Lucía Velasco: “Estamos en un momento de inflexión, como lo fue la llegada de la electricidad”

Durante su ponencia en los seminarios GETD, esta economista colaboradora de importantes instituciones a nivel nacional e internacional, señaló como la disyuntiva de la disrupción en la que estamos inmersos no son solo los cambios que se van a producir sino hacia dónde queremos dirigirlos.

A lo largo de hora y media y ante una audiencia entregada en nuestra sede, Lucía Velasco explicó su visión sobre el presente y el futuro al que nos dirigimos teniendo en cuenta las tendencias tecnológicas actuales, el protagonismo de la inteligencia artificial, el mapa de la gobernanza global de estas materias y las oportunidades que este escenario nos ofrece.

Tendencias tecnológicas

A juicio de Velasco, “el objetivo primordial del cambio tecnológico es mejorar nuestras vidas y solucionarnos problemas, dependiendo del sector unos lo orientarán a mayor productividad otros a combatir el cambio climático, a predecir cambios.” Un escenario en el que también se ven involucradas otras praxis como la de la diplomacia tecnológica, los conflictos y relaciones internacionales ya no se verán determinados solo por cuestiones fronterizas, sino también por decidir qué tecnologías prevalecen y se compran. En el amplio mundo de conocimiento, señaló “habremos de redefinir el proceso de la educación”.

“Se nos viene un territorio desconocido con oportunidades y riesgos en el que no sabemos dónde está el límite”, y que se materializará en realidades como estas que destacaba Velasco:

-        La IA generativa impactará en las estrategias empresariales, impulsando la innovación y el crecimiento y remodelando el panorama tecnológico.

-        La computación cuántica revolucionará coordenadas como las de la criptografía o la farmacología.

-        La carrera especial permitirá nuevas formas de conectividad, resolviendo el aislamiento de buena parte del territorio.

-        Las interfaces entre hombre y máquina facilitarán interacciones más intuitivas.

-        Las tecnologías inmersivas universalizarán la realidad virtual y la aumentada.

-        La inmersión robótica hará que los robots sean más inteligentes y hábiles y resulten cotidianos en muchos entornos.

La era de la IA

“El Reglamento define Sistema de Inteligencia Artificial como aquel que opera con elementos de autonomía y que, basándose en datos y entradas obtenidos de humanos o máquinas, infiere como alcanzar unos objetivos propuestos, usando para ello técnicas basadas en el aprendizaje-máquina o en lógica y conocimiento, y genera como salida contenidos, predicciones, recomendaciones o decisiones que influyen en el entorno con el que el sistema interactúa.”

La sesión continuó con esta definición de la IA extraída del Reglamento Europeo de Inteligencia Artificial aprobado por el Parlamento Europeo el pasado 14 de marzo, en la que Lucía llamó la atención sobre el término decisiones. A la pregunta de por qué está aumentando tanto el potencial y el crecimiento de la IA, su respuesta fue clara, “porque se está invirtiendo mucho dinero en este tema, principalmente en EE.UU. y, aunque en menor medida, también en otros países como China, Reino Unido, Alemania y Suecia”.

“La IA tendrá un gran impacto económico y social, generará nuevos productos y servicios tecnológicos y aumentos de la productividad que pueden oscilar entre el 35 y el 70%, no inmediatamente pero sí en un plazo de cinco años”, previsión a la que añadió que sus principales usos se darán en campos como los de servicio al cliente, ciberseguridad, asistentes digitales personales, CRM, gestión de inventarios o producción de contenidos.

Un escenario futuro que nos han de hacer pensar sobre “la dependencia tecnológica que ocasionará, si tendremos las habilidades que requerirá, a quién perjudicará y beneficiará laboralmente o cómo se verá afectada nuestra privacidad.” También sobre riesgos como que no seamos capaces de diferenciar la realidad de la ficción, he ahí los deepfakes, la diseminación estratégica de la desinformación, y la estereotipación con que se falseen fenotipos y se impongan visiones del mundo. Sin olvidar otros tan importantes como su aplicación a la guerra y la amenaza que esto supone para la democracia como sistema de gobierno.

Gobernanza global

Un horizonte prometedor pero que también despierta recelos. Por eso está surgiendo regulaciones y normativas en muchas partes del mundo, desde EE.UU., Canadá y Europa, a China, Japón y Australia. “Un campo en el que es necesario lograr una homogeneización, porque si no, las compañías desarrolladoras encontrarán posibilidades de ir más allá”, opinaba Lucía. “La regulación siempre es positiva, lo que debemos evitar es la burocratización.”

Aprovechar la oportunidad

Como señaló al principio de la sesión, en su cierre Lucía volvió a señalara que debemos decidir qué aplicaciones queremos dar a nuevas posibilidades como la IA generativa y multimodal, cómo la vamos a aplicar en el trabajo y en la vida personas y qué nuevos usos, aun no imaginados o publicados, nos proponemos darles, teniendo en cuenta la personalización a gran escala que nos va a permitir.

Un viaje hacia el futuro “que exige informarnos, concienciarnos y elegir” y en el que deben complementarse gobiernos, empresas y ciudadanos, apoyándose en la regulación y en la ética.