Más, es mejor

25/04/21

Real Madrid (0) vs Real Betis (0)

De todos es sabido que cuanto más te prepares para una prueba o cualquier situación evaluativa, el resultado de alcanzar el éxito será mayor. No obstante, este criterio no indica necesariamente que el aumento de horas de preparación será siempre directamente proporcional con las posibilidades de éxito. Es más, llegado un punto, ese incremento de tiempo invertido comienza a ser necesariamente contraproducente a la meta que nos fijemos.

Caer en el absolutismo del “más, siempre es mejor”, nos conduce en un primer momento a la persistencia y el aumento en la capacidad de esfuerzo, pero al poco, genera elementos poderosos como la autoexigencia, que nos redirige automáticamente a la ansiedad, y finalmente al hartazgo.

No se trata de realizar un gran esfuerzo y posteriormente un gran descanso reparador. La mayor parte de tareas que realizamos en nuestra vida son a largo plazo, al menos las más relevantes, resultando necesaria una buena organización del tiempo, gestionando descansos adecuados a las tareas diarias, sin menospreciar ciertas pausas más prolongadas elegidas estratégicamente. Se trata de evitar aproximarnos a ese peligroso círculo de ansiedad-hartazgo que puede echar por tierra meses o incluso años de duro esfuerzo.

El partido de ayer es un ejemplo más de lo que vemos a diario en nuestras vidas, aunque es cierto que duró algo más de noventa minutos, la realidad es que pudo resumirse en los primeros treinta, donde quince fueron para los andaluces y quince para los blancos. No hubo nada más. La gasolina era escasa, hablamos del tercer partido en una semana. Todos entendemos cómo funciona este mundo, pero luego no debemos olvidar ciertos daños colaterales necesariamente influyentes tanto en el fondo, como en la forma, y finalmente en el resultado. Lo cierto es que los jugadores que pudieron llegar con salud a este tramo de la temporada, hicieron un trabajo correcto, teniendo en cuenta la importancia de lo que estaba en juego para cada uno de ellos. Pero, como consumidor de fútbol, cuesta comprar un producto sobreexplotado y claramente reducido en prestaciones, dada la materia prima de todas las plantillas de primera división.

El empate perjudicó a los clubs, a sus aficionados y al consumidor de fútbol en general. La mente es poderosa, no debemos infravalorar su capacidad de construcción, pero tampoco la de autodestrucción. El descanso es la clave del esfuerzo, si conseguimos administrar nuestro tiempo, seremos los dueños de nuestro presente y nuestro futuro.

Jesús Ruiz


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