Maldito parné

Ah, el presupuesto. Un tema que siempre saca a relucir el ingenio. Los clientes quieren más, claro, y a veces parece que trabajamos gratis para estirar el presupuesto como si fuera chicle.

Aquí algunas de mis claves:

Empiezo con un análisis a fondo de los medios en los que vamos a aparecer. No se trata solo de estar, sino de estar donde realmente importa. Leo detenidamente sus dossieres de publicidad y estudio sus audiencias para asegurarme de que estamos llegando al público adecuado.

Luego, evalúo los objetivos del cliente: ¿quieren lanzar un producto? ¿O tal vez necesitas branding? Cada propósito requiere una táctica diferente. Por ejemplo, si el objetivo es generar leads, no voy a apostar únicamente por banners. Aquí es donde puedo complementar con opciones adicionales, como SEM, publicidad programática o contenido nativo, para asegurarme de que cada euro esté

Cada medio ofrece diferentes formatos y alcances, así que elijo el más estratégico: envío de emailing, banners, o incluso branded content.

La clave está en optimizar, no en aumentar. Se trata de hacer que cada inversión rinda al máximo, sin sacrificar la calidad ni la creatividad.

Así que sí, maldito parné, siempre estás ahí, pero es un reto que, en el fondo, disfruto.

Con estrategia y un poco de magia, logramos que los objetivos de los clientes se hagan realidad, uno por uno.

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Es fundamental conocer al consumidor, sino que se lo pregunten a Jorge Aguilar García

Y los apasionados de la comunicación, no os podéis perder la información de Santiago Doménech

Os espero en comentarios ¡Hasta la próxima reflexión!