Malos tiempos para el emprendimiento joven.-
Malos tiempos para el emprendimiento joven: el número de autónomos menores de 30 años se ha reducido casi la mitad desde 2007. El distanciamiento de los jóvenes hacia el auto-empleo se está cronificando. Una generación que parece no tener aspiraciones más allá de la de obtener un puesto de trabajo fijo, y si puede ser en la administración, mucho mejor. Pocos son los que arriesgan, y quienes lo hacen no se sienten respaldados por los poderes públicos y su entorno.
El panorama no puede ser más desolador, y esto se nota en la afiliación de los jóvenes al colectivo de los autónomos. Según un último informe de la asociación de autónomos UATAE, el colectivo de los autónomos jóvenes continúa su caída en picado, decreciendo en 1.790 afiliados en 2018 (un leve -0,7%), hasta 257.394 autónomos menores de 30 años.
Sin embargo, lo más preocupante es la destrucción de empleo autónomo que ha acontecido en los últimos 12 años. Desde 2007, se ha experimentado una pérdida del -40,55%, lo que significa un descenso de 175.304 afiliados en esa franja de edad.
En Pymes y Autónomos España, es un país con menos emprendedores que el resto de Europa .Además, el peso de estos trabajadores dentro del colectivo ha caído de manera significativa. En 2007, los autónomos menores de 30 años suponían un 13,7% del total, frente al 7,9% actual. La única conclusión positiva es que la brecha de género se ha reducido en este tramo de edad, ya que un 63,2% de los autónomos menores de 30 años son hombres, frente a 36,8% mujeres, siendo el decrecimiento desde 2007 hasta 2018 menor en mujeres (-30,3%) que en hombres (-45,2%).
Y todo ello teniendo en cuenta que existe un grado de bonificación en menores de 30 años en sus cotizaciones a la Seguridad Social. El problema parece bastante más profundo. Para Landaburu, secretaria general de UATAE, “se vende una idea de emprendimiento que no muestra la variedad y realidad del trabajo autónomo y se sigue insistiendo en medidas de buen espíritu pero que vemos que no funcionan, como la tarifa plana”. Además, ha denunciado que “grandes ideas no se desarrollan porque no tienen el capital necesario o por que se compaginan con otras actividades por cuenta ajena” y ha reclamado “un consenso de todos los agentes sociales y políticos para crear una estrategia de emprendimiento juvenil para la próxima década y un banco de financiación del talento”.