Motivarse resulta "distinto".

Un buen día, toca mover nuevamente ese papel que aloja tanto datos personales, como nuestro historial laboral/profesional. Sea que haya sido por decisión propia o causa de fuerzas mayores, todos conocemos esa dura etapa de: motivarse. Y lo digo para que no quepan dudas sobre lo que quiero abordar: el proceso de postulación, espera y selección, espera y gratificación de un nuevo empleo.

Incluye a reclutadores, profesionales y gradualmente a la cultura de toda Empresa. Porque para que todo funcione, todos debemos estar involucrados.

A continuación, intentaré dejarles en claro mi punto de vista.

Iniciamos la búsqueda laboral. A qué herramientas recurrimos? Portales de empleos masivos, esta propia red profesional o el apartado de "Ofertas abiertas" de la Empresa de nuestro interes. Procedemos a leer cuidadosamente las posiciónes disponibles, analizando muchas variables: nuestros propios intereses, las competencias solicitadas, nuestras habilidades y su grado de madurez, los idiomas pedidoas, la distancia a recorrer o si la oferta es remota (lo cual amerita investigar si la propia empresa provee las herramientas para desempeñarse en el puesto). Hay quienes llevan una planilla con todas sus postulaciones, encabezando con fecha de inicio, seguimientos, y otros datos de relevancia. Soy uno de ellos.

Luego está la fase de entrevistas. A este punto hay que mantener la motivación medianamente activa, porque tras varias postulaciones, es un tanto fácil, hay no observar resultados favorables sentir los efectos de la tristeza, principalmente. Esto afecta la región central de nuestros nervios y disminuye la confianza. Así debe ser, cientificamente hablando, verdad?

Primera entrevista con el encargado de la búsqueda, normalmente alguien de RRHH, no?. La charla se desarrolla de forma bastante agradable. Todo parece ir bien. Quien hace las veces de entrevistador/a finaliza con una gran sonrisa, y deja la puerta abierta para una segunda entrevista. Desde otras postulaciones se comienza a recibir también invitaciones a entrevistas, y así pasan los días. Aquí mi primera recomendación: al finalizar una entrevista veo bien, tomar como buena práctica envíar un correo de agradecimiento, queda en sus manos el contenido del mismo pero en lineas generales sería:

"Estimado [quiencorresponda]: No quiero dejar pasar la oportunidad para agradecer el tiempo invertido y la..." aquí sumamos nuestras observaciones generales por ejemplo. Y disponiendonos a prestar nuestra atencióna resolver dudas que hayan quedado pendientes, por las moscas.

Más tarde, repetiremos el mismo correo, de suceder, con quién realiza la entrevista técnica. A gusto del consumidor. Por cierto, en la estrevista técnica es crucial no mostrarnos fanfarrones. Es algo natural en algunas personas, y complicado en otras pero recomiendo que no lo sean. Tus habilidades serán tu cinturon de campeón, sin tener que alardear de ellas. En silencio, siempre es mejor.

Acabadas las entrevistas, la opción del correo mostrando agradecimiento NO debe ser abusada. Pero pareciera que todo es color rosa en este texto, cierto? La realidad no tiene muchos colores. Hay personas que se pasan no es que días, sino varios meses subsistiendo gracias a un bono de desempleo o del porcentual que corresponde solo por días trabajados. Y no hablemos del ámbito "en negro" (como lo conocemos en Argentina). Para sentirse motivado en estos últimos tiempos, hay que ser un buscador constante, probar trucos de forma periodica y ser perseverante. Sé que varias personas al leer este artículo dirán: "que bonito, este chaval de TI puede darse el lujo de cambiar de trabajo cuantas veces quiera sin casi preocuparse." Prácticamente sí pero hay que ver el panorama mucho mayor. en IT, somos MUCHOS. Por lo tanto la competencia es bastante intermitente y despiadada en ciertos periodos.

Aunque no lo parezca, este hombre si ha sufrido el periodo de búsquedas un largo tiempo. Viendo como las postulaciones se multiplicaban, pero las entrevistas disminuian. La motivación, era poder encajar en un lugar donde pudiera desarrollarme con mejores habilidades y pudiera tener espacio para aprender con nuevas tecnologías y nuevos equipos. Encontré mi lugar, tranquilos. Y entiendo que hay mcuhos en una situación nada grata. Como siempre, aquí me tendrán a disposición, para un consejo, aliento, revisión o simplemente intercambiar ideas.