permítanme iniciar esta nueva entrega agradeciendo a todos ustedes el interés y la acogida de esta Newsletter dedicada a la metodología de la PDD. Algunos de ustedes me preguntan como formarse en PDD, al final de este artículo adjunto información y datos de contacto para todos aquellos que deseen titularse como Especialistas en Psicoterapia Dinámica orientada por Dimensiones, PDD.
Gracias y bienvenidos una semana más.
He preferido denominara mi enfoque terapéutico «psicoterapia dinámica» y no «psicoanálisis» por dotar al primer término de un mayor valor genérico e integrador, pero también hubiera podido utilizar el segundo sin que por ello se hubiera resentido el criterio descriptor de mi modelo. La psicología dinámica sin el psicoanálisis es un concepto vacío.
Aunque el mundo de las denominadas psicoterapias dinámicas es muy heterogéneo, es posible resaltar ciertos puntos de convergencia entre sus diversos enfoques. Algunos de estos planteamientos son:
- La existencia de lo inconsciente como un elemento fundamental de la vida psíquica del ser humano. Además, es importante distinguir diferentes planos en la descripción de este concepto.
- Lo inconsciente puede ser la causa de un buen número de síntomas, que se reflejan tanto en el plano mental, emocional y somático, así como en el marco de las interacciones humanas.
- Un elemento clave en la clínica psicodinámica es el hecho de que el analizado enriquezca su consciencia con el material que proviene de lo inconsciente.
- Para poder iniciar el proceso es necesario establecer una relación de colaboración analizado-analista (la denominada «alianza terapéutica») que permita fijar las reglas que van a regir la interacción terapéutica.
- En el proceso de toma de consciencia es central el material que proviene de la fantasía, de la imaginación y del análisis de los sueños.
- El instrumento fundamental que se utiliza en el marco analítico es la palabra –aunque de forma complementaría se puedan emplear otras herramientas como el psicodrama y el movimiento corporal, así como la plasmación de las imágenes que provienen de lo inconsciente a través del dibujo, pintura u otros actos creativos–.
- La intervención mediante la palabra puede tener diferentes formatos: aclaración, pregunta, confrontación, e interpretación –considerándose esta última como la fundamental, pues mediante ella se da el paso decisivo de hacer consciente lo inconsciente–.
- Es primordial el análisis de la relación analizado-analista, analizado-analista, pues este último puede ser investido mediante la proyección de emociones, sentimientos y partes del sí mismo de su analizado. Este fenómeno fue denominado «transferencia». El interpretar la transferencia permite que nuestro paciente se acerque a sus procesos inconscientes.
- La consciencia por parte del analista de los sentimientos que le surgen durante el análisis –contratransferencia– se torna en básico para el buen desarrollo del proceso psicoterapéutico. Fundamentalmente podemos ver esta importancia en dos aspectos: como forma de prevenir las posibles proyecciones del analista que pueden modular y manipular el material del analizado, o bien como forma de empatizar y obtener información de los procesos psíquicos inconscientes que se movilizan en nuestro interlocutor dentro de la experiencia analítica.
- También se torna en imprescindible el conocimiento de los denominados «mecanismos de defensa» por los que el yo del sujeto se protege del material inconsciente. Los más importantes son: la represión, la racionalización, la escisión, la negación, la proyección, la introyección, la formación reactiva y la identificación proyectiva.
También podemos hablar del surgimiento de nuevos puntos comunes en la teoría y práctica psicoterapéutica de un número importante de analistas que, partiendo de orientaciones distintas, encuentran importantes convergencias en lo que consideran ha de ser la dirección de la práctica clínica contemporánea. Algunos de estos puntos son:
- Un interés en las filosofías posmodernas y en las posiciones constructivistas y hermenéuticas. Esto no excluye que algunas perspectivas relacionen lo inconsciente con un proceso conectado con la naturaleza, pero al mismo tiempo plantee que su elaboración es un acto de «creación de consciencia». Este punto nos sitúa frente a un inconsciente emergente, pero que al mismo tiempo es construido mediante la elaboración.
- El señalar como fundamental en nuestra metapsicología un modelo en el que se dé una relación dialéctica entre lo intrapsíquico y lo interpersonal.
- La revelación de la contratransferencia como una herramienta fundamental en el marco del análisis interpersonal.
- La idea de que en cualquier intervención analítica se reflejan aspectos de la subjetividad del analista. No sería posible concebir la interpretación desde la pura objetividad.
- Es muy importante señalar que en la relación analítica tanto el analizado como el analista generan mutuamente datos.
- La perspectiva de que el trabajo analítico se desarrolla en el marco de una conversación por lo que lo podemos definir como una terapia dialógica.
- La concepción de la interpretación no solo como modo de descubrir cierta verdad sino como una forma de vincularse con el analizado.
- La valoración de forma muy considerable de los vínculos de apoyo y sostén que se desarrollan en ciertos procesos analíticos. El terapeuta utilizado como función que ayuda a corregir déficits que el paciente ha padecido en su proceso evolutivo. Mayor importancia del contexto y la forma interaccional que la misma interpretación, teniendo esta última, en ciertos casos, un potencial retraumatizador.
- La importancia que damos a las posiciones psicoanalíticas más bidimensionales –relación del bebé con su madre– o a la posibilidad de interpretar complejos o patrones relacionales inconscientes desde una óptica que amplía la visión pulsional freudiana–.
- La transferencia como forma de organización del espacio analítico –más ligado a perspectivas relacionales, interaccionistas o intersubjetivas, entre las cuales también podemos descubrir patrones arquetípicos–.
- El reconocimiento de un inconsciente no reprimido.
- La vital importancia que se le concede a la creatividad.
- La relevancia del concepto «edición» en la relación analítica –que difiere de la clásica reedición transferencial–, pues se posibilita que el analizado registre una experiencia emocional nueva y su posterior integración en el sí mismo.
- El interés por las preguntas relacionadas con el sentido de la existencia y por las diferentes formas de entender la espiritualidad.