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No hemos tenido descanso durante la pandemia. El primer día ya transitábamos las calles buscando apoyar con lo que estaba a nuestro alcance, en medio de la visión apocalíptica de barricadas militares y escasos transeúntes.

Próximos a 2 años, hemos diagnosticado a más de 10,000 pacientes que han recibido un trato totalmente personalizado con el apoyo y asesoría que requerían. Hemos tratado a algunos cientos, directa e indirectamente. Al principio, en un escenario en el que no había camas hospitalarias y teníamos pacientes graves que atender en sus domicilios con todas las medidas de soporte necesarias. Lactantes, niños, adultos, ancianos, personas con problemas de salud de fondo... sin discriminarles y dando lo mejor de nosotros (..nosotros, pues somos un equipo del que me siento muy orgulloso) sacrificando tiempos libres e incluso, nuestra seguridad.

Esta tercera ola es muy exigente y con un equipo renovado hemos seguido tratando pacientes (y agradecemos a Dios haber guiado nuestro criterio y permitido que todos nuestros pacientes hayan vuelto a sus rutinas habituales y a compartir con sus familias... nuestra mayor recompensa) y hecho malabares ante la falta y especulación con las pruebas diagnósticas, poniendo por delante siempre a nuestros pacientes. Eso es lo que nos propusimos al emprender este camino hace unos años y no podemos estar más que agradecidos por la confianza que han depositado en nosotros que, además, nos obliga a ser mejores cada día.

Como era de esperarse, en esta tercera ola, algunos del equipo nos enfrentamos personalmente a esta impresentable fracción de material genético y proteínas, pero también pudimos superarlo para poder seguir tratando pacientes, pues ese es nuestro objetivo; dar salud y acercarla a más personas. Cualquier actividad que realicemos siempre estará enmarcada en ello.

Sigamos teniendo cuidado que esto aún no termina y no hay nada más bonito que saber que nuestros seres queridos se encuentran saludables y pronto podremos compartir con ellos.

Mientras eso sucede, recuerda que estamos siempre cerca, para acompañarte.