Normal, no significa Natural

Estamos tan acostumbrados a lo que percibimos como normal, que ni siquiera cuestionamos qué tan real es. El adoctrinamiento social de acondicionamientos: "debes ser educado o qué van a decir de ti", "tienes que comportante bien o no serás aceptado", "deberías quedar bien con... para que puedas tener lo que quieres", dichas enseñanzas suelen ser manejadas bajo los estándares del mismo origen social que contempla que para ser aceptado, se requiere hacer lo que es aparentemente correcto, de otro modo, no se obtendrá lo deseado. En otras palabras, desde pequeños aprendemos a dejar de ser nosotros mismos para poder encajar en lo que se espera que seamos, y así, ser parte de algo. Hemos normalizado lo que se supone aceptable.

¿Has dicho Sí cuando realmente deseabas decir No? ¿Has asistido a algún evento a pesar de no querer hacerlo? ¿Has permanecido en un empleo o con una pareja aunque ya no te sintieras a gusto? Estos son simples ejemplos de lo que solemos hacer cuando consideramos que lo correcto es hacer lo que normalmente se espera de nosotros, bajo el distorsionado idealismo de cumplir con lo que se supone está bien.

Cuando comprendemos que Normal, no significa Natural, nos percatamos de que todo aquello que consideramos normal es precisamente aquello a lo que estamos acostumbrados y no necesariamente es lo que genuinamente está bien. Eso a lo que estamos acostumbrados, es básicamente ese estándar de lo que otros han etiquetado como correcto, aunque realmente -en esencia- sea mera conveniencia. Entonces, ahí en esa comprensión, surge la oportunidad de comenzar a ser naturales; es decir, buscar la autenticidad en nosotros mismos pese a que los demás lo conciban como extraño.

Ser Natural, es ser uno mismo en todo momento, no a conveniencia. Al mostrarnos al mundo tal cual somos, podemos ser educados, comportarnos de forma consciente y ser auténticos sin esperar esa normalizada aprobación del prójimo. Así que, la siguiente vez que queramos decir No, diremos no; cuando queramos quedarnos en casa, en vez de salir, lo haremos; al momento de sabernos insatisfechos con algo, buscaremos cambiarlo. Todo esto bajo la consigna asertiva de mostrarnos como somos y, al mismo tiempo, que sea de una forma que no contemple conveniencia propia o perjuicio para otros. La clave está en la seguridad y el amor que pongamos en ser nosotros mismos; en vez de ser normales, seremos naturales y leales a quien realmente somos.

Y tú ¿has sido normal o natural hoy?