Nuevo o radical en los ojos del USUARIO
Muchas grandes profecías que hablan del impacto fulminante para la sociedad de la expansión de una determinada tecnología se olvidan de la voluntad humana. Y entonces yerran el tiro de forma estrepitosa.
La más famosa fue el teletrabajo. Cuando surgió Internet se predijo que “la distancia desaparecerá” y se sugirió que las oficinas de trabajo se extinguirían. Como sabemos la historia fue por otros derroteros. La humanidad sigue encaminándose a una oficina para trabajar. Simplemente PORQUE QUEREMOS HACERLO.
En muchos proyectos de innovación radical detecto los mismos problemas que con esas profecías. El que algo sea posible por la tecnología no significa que las personas queramos hacerlo. Ese es el motivo por el que esos conceptos no logran despegar.
La alquimia del mundo digital disruptivo se nutre de lo asombroso, pero también de lo fácilmente reconocible (momento “ajá”). Quizá todo sea cuestión de ver más Juego de tronos. La receta de éxito de lo fantástico la expone el crítico cultural Jordi Costa: “Lo que singulariza a R.R. Martin… es el poder de conciliar lo asombros y lo reconocible, lo fantástico y lo humano. Si Marín genera (con Juego de Tronos) tanta adicción es porque es algo muy sencillo: sus personajes importan, marcan la diferencia, sienten, son contradictorios, pulverizan el arquetipo y se convierten en espejo de nosotros mismos”.
Post originalmente publicado en mi blog