Cortar cebollas o emocionarte de verdad

He llegado a emocionarme incontroladamente por un plato de comida. Una receta mágica que hizo brotar una lágrima que contenía sentimientos imprevisibles, conectando con elementos insospechados en ese relato que provenían de mi interior, no de la comida. Y menos de una cebolla.

Cortar una cebolla provoca irritación ocular y lagrimeo. Solemos decir que lloramos pero no es verdad… Lloramos con una película que nos emociona, porque estamos tristes o vemos sufrir, por desamor o ¡incluso de felicidad! Pero realmente es:

• Porque hay historias que nos mueven por dentro
• Porque empatizamos y nos identificamos con lo que les pasa sus protagonistas

Existen por eso recursos lacrimógenos, cebollas escondidas (a traición, indetectables pero lícitas) que recibimos y son dardos estudiados que se nos clavan. Cebollas en forma de música previsible y emotiva que está en la superficie de un vídeo o una película que puede estar vacía, estructuras o recursos con una fórmula infalible, como si fuera el picante en la comida… sabes que lo vas a sufrir.

Pero lo que verdaderamente hace que nos emocionemos son las historias auténticas, las melodías sacadas del alma, las palabras que se infiltran en los recovecos de nuestra piel, una pintura que trasciende la mirada, hasta un plato de comida que nos hace conectar con nosotros mismos.

Y lo mejor es que emocionarse, llorar, genera un efecto positivo justo después: libera oxitocina y nos relaja.

No es fácil emocionar a nuestra audiencia con nuestras historias. Pero es uno de los caminos más efectivos para conectar con ella, sino el que más, junto al humor. Pero es mejor no cortar cebollas frente a ella, sino cocinar con cariño una receta con todos los elementos más honestos y buscar qué ingredientes van a conectar con ella.

Cocinemos buenas historias.

El inspiranoico (I) - Familia y memoria

Me permitiréis que en esta ocasión os comparta 3 proyectos, cada uno por un motivo que creo que representa la emoción y la empatía con la audiencia, espero que los disfrutéis.

El primero es un branded content de BBVA y El Celler de Can Roca. Os dejo el tráiler del documental de 30 minutos que creo que vale mucho la pena.

• Cómo conectar la familia y el legado con la extinción de alimentos
• Un viaje emocionante, emotivo y lleno de esperanza y memoria
• Un trabajo excepcional con una historia familiar y de tradición, auténtica y de responsabilidad hacia los tuyos y el mundo que dejamos. Un posicionamiento muy trabajado de la marca con un storydoing patente. Documental completo

El inspiranoico (II) - Sin palabras. Solo danza

Las desgracias que nos ocurren sirven a veces para decir las cosas que nunca hemos dicho y de la forma que no esperábamos. El coreógrafo Paul Lightfoot no pudo ver a su padre durante el confinamiento mientras estaba hospitalizado, 5 días mientras se estaba despidiendo de este mundo. Decidió trabajar esos días una coreografía en su homenaje, desarrollando belleza en forma de movimiento que es poesía pura, emoción y corazón.

Podéis ver la versión completa que dura solo 7 minutos con la danza entera (a partir del minuto 3)

Os dejo el teaser.

El inspiranoico (III) - Gracias jefe

Sí que es posible emocionarse y llorar por las cosas buenas, por la gente que nos ha marcado, por las personas que nos cuidan. Pero siempre es difícil hacerlo con los jefes, esos líderes que mientras tiran proyectos adelante con su visión siempre tienen tareas tan complicadas como hacer crecer, cuidar y gestionar a personas, cada una con sus aspiraciones, motivaciones y carácter. En el IESE hicimos este vídeo (multipremiado) en formato de experimento social (real) para agradecer a los jefes, a esos líderes que dejan huella y que logran ese impacto perpetuo más allá de los individuos, hasta la sociedad, para hacer un mundo mejor.

Micro Foto Cuentos  

Metáforas visuales y relatos escondidos e inspirados en imágenes. Imagen y texto por Oriol Gil. Para más relatos: Instagram @uri_rubio_relatos

“Todo es agua”

No veía absolutamente nada. El camino se desvanecía y la temida niebla le hacía permanecer helado, con la mirada perdida. Decidió inspirar fuerte con los ojos cerrados intentando absorber todo el aire a su alrededor en una larga inspiración. Cuando abrió los ojos, el camino estaba claro y visible. Aguantó la respiración y levantó la vista. Como si fuera el último suspiro, soltó una profunda bocanada que inundó el cielo de nubes. Automáticamente una cálida y agradable lluvia gobernó el ambiente. Sonrió.

Hasta la siguiente edición. Sigue inspiranoico. Sigue contando.

Uri