Plantas Industriales para el Desarrollo Formal de la Minería en el Perú

En Gobernabilidad Perú, estamos comprometidos con el desarrollo de una minería sostenible que contribuya al crecimiento económico del país, respetando a su vez al entorno social y ambiental. Creemos en una industria minera que genere riqueza de manera inclusiva y responsable, promoviendo bienestar, conocimiento y prosperidad para el Perú.

En un contexto de crecimiento en la demanda de minerales críticos para la transición energética y el uso eficiente de recursos naturales, consideramos que el desarrollo de plantas de procesamiento y refinación de minerales es fundamental para aprovechar esta coyuntura, fomentando el crecimiento de la minería formal, el desarrollo económico, la protección ambiental y el incremento de la recaudación fiscal.

A continuación, destacamos los principales beneficios de las plantas de procesamiento de mineral para la pequeña minería y minería artesanal en el Perú:

1.Reducción de la Contaminación Ambiental: Las plantas de procesamiento de mineral permiten el tratamiento de minerales con tecnologías avanzadas y controladas, reduciendo significativamente la contaminación causada por el uso inadecuado de sustancias tóxicas, como el mercurio y el cianuro, por parte de los pequeños mineros. Esto contribuye a la protección de suelos, cuerpos de agua y aire, preservando la salud de las comunidades cercanas y el entorno natural.

2.Mejor Fiscalización y Cumplimiento de Normativas Ambientales: Al concentrar las actividades de procesamiento en plantas centralizadas, se facilita la supervisión y control del cumplimiento de las normativas ambientales y laborales establecidas por el Estado. Estas plantas actúan como puntos de control para asegurar que las operaciones mineras se lleven a cabo de manera legal, responsable y en menor tiempo, lo que resulta ventajoso para los mineros. Además, se abren oportunidades para la creación de clústeres mineros con participación público-privada que optimicen las cadenas logísticas y productivas de la gran, mediana y pequeña minería.

3.Optimización de Recursos y Recuperación de Metales: Las plantas de beneficio emplean tecnologías más eficientes que maximizan la recuperación de metales valiosos del mineral, reduciendo el desperdicio y aumentando la eficiencia del proceso. La minería artesanal y de pequeña escala, al utilizar métodos rudimentarios, suele perder una parte considerable del contenido metálico. Con estas plantas, es posible incrementar la tasa de recuperación de metales, lo que se traduce en un uso más efectivo de los recursos minerales disponibles.

4.Mejora de la Recuperación y Control Ambiental: En zonas de difícil acceso, donde la minería artesanal utiliza cianuro en pozas abiertas, las prácticas informales generan graves impactos ambientales y una baja recuperación de minerales, a menudo no superior al 60%. Con la implementación de plantas de procesamiento modernas, se podría alcanzar una recuperación superior al 90%, gracias al uso de tecnologías avanzadas como relaveras y sistemas de control ambiental que minimizan el impacto, mejoran la trazabilidad y reducen la pobreza al aumentar la productividad y formalización de los mineros.

5.Reducción del "Falso Flete" y Pérdidas Económicas: En el procesamiento convencional, minerales valiosos como el oro, la plata, el zinc, el plomo y el cobre son exportados como material estéril, perdiendo valor significativo. Por ejemplo, con un contenido de 30 gramos de oro por tonelada de mineral, la recuperación actual puede ser tan baja como el 30% al 40%, resultando en una pérdida de aproximadamente USD 500 por tonelada, además del costo adicional del "falso flete" estimado en USD 400 por tonelada. Implementando plantas de refinación adicionales, como las de Southern Perú y Cerro Verde, podríamos maximizar la recuperación de elementos valiosos, eliminando el falso flete y agregando hasta USD 15,000 millones anuales al valor de nuestras exportaciones.

6.Acceso a la Formalización y Beneficios Sociales: Las plantas de beneficio proporcionan una vía para que los pequeños mineros y mineros artesanales puedan formalizar sus operaciones, cumpliendo con las regulaciones legales y accediendo a beneficios como seguridad laboral, acceso a servicios sociales y oportunidades económicas sostenibles a largo plazo.

7.Fortalecimiento de la Trazabilidad y Responsabilidad Social: Procesar el mineral en plantas autorizadas asegura la trazabilidad del producto final, lo que facilita una minería más responsable y transparente. Este control es esencial para garantizar que los metales producidos no provengan de fuentes ilegales o que promuevan prácticas laborales inadecuadas o degradación ambiental, mejorando así la reputación de nuestros productos en los mercados internacionales.

Estos puntos resaltan la importancia estratégica de desarrollar plantas de procesamiento y refinación de minerales como herramientas clave para la sostenibilidad, formalización y crecimiento de la minería en el Perú. Apostar por una minería formal y tecnificada es apostar por el desarrollo integral del país y la mejora de las condiciones de vida de nuestras comunidades.