Plegaria para mi niño dormido… (Mas allá de la muerte … )

Me senté en la cama nuevamente, miré el reloj y me di cuenta de que recién me había acostado….

Pensé que si tomaba algo para dormir podría resultar - pero - ¿Cómo hago para olvidar?

Imaginariamente vino a mi mente su rostro, su voz, su perfume… y una angustia recorrió todo mi cuerpo. 

Mil preguntas sin respuestas…

¿Culpable? Quien … soy yo que cedí tanto a sus locuras. 

¿Culpable porque no supe escuchar su voz que pedía ayuda?

Ya hacia varias noches que intentaba retener esas imágenes en mi cabeza, imágenes donde jugábamos juntos, imágenes donde sus hermanos se reían y yo me sentía cómplice de sus tonterías.

Me levanto, prendo la televisión, pero algo me falta. Miro al vacio…

La silla está ahí, la mesa también, creo que hoy debo decidir si continúo poniendo los cubiertos. Es que lo hago sin darme cuenta. Es algo mecánico.

Su mascota, que tanto lo hacía reír, parece que también sufre porque no regresa, de reojo veo como agacha su cabeza.

Sus amigos pasan por la vereda de enfrente e instintivamente busco si está entre ellos.. pero, no.. aunque sus risas son las mismas, no puedo encontrar la suya.

Escucho el ruido de las voces de la escuela, el mismo ruido del auto, su moto.

Hasta el autobús pasa delante de mi puerta, pero sé que no bajará, el chofer sigue su ruta dejando gente en cada esquina, lo miro irse y tal vez baje en la otra o en la siguiente parada.

Veo mil veces sus fotos en mi teléfono, leo nuevamente sus mensajes, su retrato esta colgado en la pared y su cama esta intacta.

Hasta las redes sociales son crueles porque me recuerdan a cada momento, ignorando que ya no está, niego con la cabeza, cierro la puerta..

Pienso.. 

Me quedan tal vez, mas de 30 años de vida.

Y me pregunto…

¿Porque tengo que esperar 30 años o lo que me quede por vivir, para saber que no estará mas?.

¿Sigo? ¿muero? ¿lloro?

Colaboracion: Macarena Chavez