¿Qué pasa cuando te haces viral?

Hace una semana, el streamer Xokas, que podríamos considerarlo como una persona influyente, me mencionó en su directo. Es más, no solo me menciona, si no que también muestra mi Tweet y lo lee en alto.

Para poner en contexto hasta el punto que llega la viralidad del tweet: Xokas cuenta con 2,6 Millones de seguidores en su canal de Twitch y +700mil en Twitter.

En este artículo hablaré sobre todo esto y lo que he aprendido.

Sin querer también ocurren cosas

¿Qué determina que un tweet se haga viral o no? No tengo ni idea, no me dedico a ello y no soy experto. Lo único que sé es que, este tweet en concreto, fue un tweet viral... sin querer.

Escribí el tweet desde la cama y con algunas décimas de fiebre. Es un tweet sin una estructura trabajada, sin utilizar hashtags, sin mencionar a nadie. Es un tweet pensado únicamente para transmitir lo que sentía en ese momento.

Hizo boom y se convirtió en Chocapic

No he sido consumidor de Chocapic, pero supongo que esa frase se me quedó grabada.

No sé muy bien quién o qué cuenta hizo que echase a rodar la bola de nieve. Lo único que sé es que, en una horquilla de un par de horas, las notificaciones empezaron a ser infinitas. Si dejaba la página de notificaciones abierta, la luz destacada azul no hacía más que parpadear y los números bailar.

Mucho ruido y difícil de gestionar

Llega un momento en el que gestionar las notificaciones se hace imposible. No hay forma de seguir las conversaciones, de leer los comentarios, de responder a las preguntas.

Por suerte no soy alguien muy activo en Twitter, por lo que no tenía miedo a perderme otros contenidos no relacionados. Simplemente dejé pasar «la novedad» e intenté no mirar los números y lo que iba pasando.

Aprendizaje #1 » Opinamos sin saber

Así somos los seres humanos. Vemos algo y, de forma muy rápida y en décimas de segundo, ya tenemos una opinión al respecto. Y no solo eso, tenemos una opinión y la decimos en alto, de cualquier forma.

Este tweet me hizo ver muchas respuestas de primera mano. Muchas respuestas de gente que daba su opinión sin:

• Leer el hilo
• Ver el vídeo de contexto que añadí
• Lo que es peor: sin preguntar

Estoy muy contento de que haya pasado esto ya que me ha permitido darme cuenta que yo soy igual. Que yo también he juzgado sin saber... y desde ahora quiero tomarme más en serio el no juzgar o dar una opinión sobre algo sin tener el contexto.

A veces opinamos sin pensar en lo que eso puede suponer para otras personas. Varias personas me decían cosas como: «si no sabes vender o llegar a una facturación mínima... no sirves, dedícate a las ONG o trabaja para otro, abandona».

Y, como digo, en mi caso sé cuál es mi situación, sé que lo estoy haciendo «bien», sé que es alguien que no me conoce. Pero, ¿qué pasa con otras personas? este tipo de comentarios puede ser muy hirientes y hay que tener cuidado.

Aprendizaje #2 » Hay más gente buena que mala

En esto creo que todos estamos de acuerdo. La gente mala hace mucho ruido y destaca, pero hay muchísima más gente buena. Como he comentado, algunas personas fueron algo negativas (no muchas), pero encontré otras personas que querían mostrar su apoyo, su ayuda, su comprensión.

He de reconocer que no he sentido mucho odio respecto a lo que yo puse. Diría que los mensajes negativos serían de un 10% y los positivos de un 40 % (el resto podrían considerarse neutros).

Me quedo con ese 50% neutro y 40% positivo, muestra que hay un 90 % que no son comentarios malvados y eso es importante tenerlo en cuenta y destacarlo.

Aprendizaje #3 » No necesito esto

He vivido por primera vez «la fama». Y eso de «la fama» tiene que ir muy, muy entre comillas. Pero ha sido algo destacado y relevante en mi vida y experiencia en redes sociales. Nunca había vivido algo así y ha sido especial.

Eso sí, tengo muy claro que no es algo que me guste. La gran mayoría de interacciones que ocurrieron, fueron interacciones que no aportaban nada. Eran likes, retweets, comentarios negativos/neutros, etc.

Algunos tweets sí que me aportaron y tuvimos una pequeña conversación (lo que Twitter puede llegar a permitir). También crecí en unos 270 seguidores pero, muy probablemente, gran mayoría de estos seguidores dejarán de seguirme pronto. Creo que, en cuanto vean que no pongo tweets del estilo, se cansarán y seguirán con su vida.

¿Cuál es mi futuro ahora?

Seguiré trabajando como hasta ahora, creando contenidos y ayudando a otras personas. Estoy muy ilusionado en el proyecto de @PROductividad y el que tendrá novedades dentro de muy pocos días.

Respecto a las redes sociales, seguiré con mi perfil bajo y aprendiendo de otras personas.

» Ibon.