Querétaro debe reinventarse
Al igual que una organización debe adaptarse a los cambios en su entorno a través de ajustes a su estrategia, los estados también tienen que reconocer cuando las acciones que fueron efectivas en el pasado, ya no lo son en el presente y menos en el futuro.
Querétaro es uno de los estados que se ha destacado por su crecimiento a nivel nacional, lo que ha generado un entorno de altos ingresos en la región, ha sido polo de desarrollo sectorial como el aeronáutico o el logístico, ha tenido una gestión presupuestal transparente, y se cuenta con una estructura económica diversificada.
Sin embargo, al revisar los números, la economía estatal ha perdido la dinámica de crecimiento desde el 2018; por supuesto, está el factor COVID que afecta la medición de tendencias, pero si mantenemos el comparativo respecto a la economía nacional, la economía del estado ha tenido peor desempeño que la nacional en los últimos 2 años, y en el 2018 apenas estuvo a la par del ritmo nacional.
Es necesario revisar las fortalezas del estado, que son muchas, y usarlas para retomar la dinámica económica. Sí, es cierto que se tiene un estado con gran presencia de centros de investigación e instituciones de educación superior, pero eso no se ha reflejado en una mayor productividad económica (es más, el pico se tuvo hace 5 años), y en la región tenemos a la economía que menos "absorbe" a los egresados de estos estudios (se generan profesionales que no son los perfiles necesarios en el mercado laboral). Por lo tanto, no basta con tener estos elementos, es necesario estructurarlos productivamente.
También es necesario dejar de construir sobre las creencias compartidas que no tienen sustento en los números oficiales: no llegan 60 ni 70 familias diarias, no somos el destino de interiores con más recepción de turistas, no somos el mayor imán para la inversión extranjera directa en la región, no crecemos "en automático" 2 puntos arriba de la economía nacional, ni el Bajío ha sido el motor del crecimiento del país en los últimos 3 años. Sin datos precisos y claros, no se pude construir una estrategia pertinente.
También es necesario contar con las mediciones correctas para identificar las desalineaciones que se tienen en los componentes económicos y sociales del estado: desde hace años ha habido claras desalineaciones entre la oferta y demanda del mercado habitacional y del mercado laboral, lo que está creando cuellos de botella importantes. Y sí, el estado cerró con más gente ocupada que la que tenía un año antes, pero las estadísticas muestran que es una ocupación de calidad insuficiente, lo que ha disparado la proporción de personas con necesidad de un trabajo que no logran ser absorbidas por el mercado laboral. Sin claridad de los temas y puntos clave, no se puede tener una estrategia enfocada.
El entorno también ha cambiado, y nuestros vecinos han sido más efectivos en los últimos años en la atracción de inversión extranjera directa y una mayor creación de empleos formales, lo que ha provocado que la brecha salarial que se tenía con ellos se cierre. Es necesario tener claras las dinámicas del entorno próximo.
Y si a estas condiciones estructurales agregamos factores coyunturales derivados de la pandemia, Querétaro es el sexto estado con mayor exceso de muertes en el país, lo que nos deja con un reto social importante.
El primer paso es tener un diagnóstico claro, crítico, enfocado, para que se pueda replantear de forma integrada y estructural la estrategia para retomar el crecimiento económico. Es posible, es necesario, y es importante. Desafortunadamente, en el entorno actual de campañas, el discurso se ve bastante alejado de la realidad, sin importar el color.
Gerente General at Integra Consultoría
3 añosExcelente análisis Félix. Resultado de torturar a los datos hasta que confiesen. Una pregunta. Cuáles son los perfiles de los egresados universitarios vs los perfiles que requieren los sectores productivos?