REALIDAD o REALISMO

REALIDAD o REALISMO

Repasando alguno de mis artículos previos a lo largo de este período de escritura particular a través de esta columna, y luego de el resultado del test electoral, vuelve a convocarme la memoria, que es selectiva de acuerdo a las circunstancias que a cada uno le toca vivir.

A casi un año de aquel encuentro programado en medio del COVID 19 y respondiendo a la requisitoria de un colega solicitándome ayuda respecto del escenario económico que nos toca transitar, vuelve a convocarme mi querido amigo y nostálgico de sus aciertos juveniles, como le digo jocosamente, para que lo oriente respecto de sus complejidades en su bolsillo, su actividad laboral y su día a día.

Casi como un calco de lo sucedido el año anterior, le respondí de manera similar. Sucede que aunque un resultado electoral afecte la economía y el futuro de manera imprevista, en un año han pasado muchas cuestiones que se pusieron a la vanguardia como lo ha sido la necesidad de un autocuidado y prevención en materia de salud.

Solicité que pusiera énfasis en mejorar sus fortalezas, su capacitación y entrenamiento. En clausurar caminos que lo conduzcan a calles cerradas para construir otros laberintos. Que aunque se quieran evitar los hay indefectiblemente.

La pandemia cambió por completo nuestra manera de mirar el mundo y analizarlo, por qué habría de serlo en las empresas y emprendimientos? Sigo esperanzado que este cambio de pensamiento sea positivo en términos de una mejor calidad de vida y que el mundo del trabajo pase a ser un recurso vital a consecuencia de un mejor trato entre nosotros mismos.

Que el estar o no empleado o en la gestión de una empresa o emprendimiento no sea una consecuencia de un gobierno o partido político, sino un manera CULTURAL de encontrarnos como seres humanos.

Que los sueños y proyectos del mundo por venir no dificulten las volatilidades del corto plazo. Que esos cambios obligados y necesarios llegados disruptivamente sean instrumentos de calma y que corten la angustia de mi amigo nostálgico de lo que fue y ya no es.

A lo mejor quién mejor que la incertidumbre para soprenderlo para ponerlo a entrenarse en sus habilidades para dar lo mejor de sí mismo como el agua de un manantial.

Espero haberles transmitido mi mensaje con la necesaria convicción y optimismo de esta primavera en esta parte del globo terráqueo.

Hasta mi próxima inspiración estimados

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