Reflexionar te hace más reflexivo y el ser más reflexivo te hará más efectivo
Es así que he decidido reflexionar al empezar el día, apenas me despierto y si es fin de semana, me encanta hacerlo el domingo por la tarde, puede ser mientras tomo un café, otras veces una buena copa de vino es perfecto para hacerme compañía.
Simplemente me alejo de todo lo que puede causar una interrupción en mí y me dedico a “pensar”.
Ahora que he encontrado tiempo para pensar, deseo compartir los beneficios de esta práctica con todos ustedes, y deseo cerrar el artículo haciendo una pregunta que espero les de un motivo para reflexionar.
¿Conoces realmente qué piensa tu esposa, tus hijos, tus padres, tus hermanos, tu equipo, tus amigos? Si lo supieras, ¿podrías hacer algo para que su vida y la tuya sean mejores? .Sin conocerte te doy la respuesta.
“Sí, claro que sí”
Fuente: Aldo Tapia