Reflexiones sobre la atención al público en las instituciones públicas

ANIBAL MARQUEZ

Es el caso del Detective Anìbal Màrquez, funcionario investigador del Cuerpo de Investigaciones Cientìficas, Penales y Criminalìsticas. No habìa una persona que no hubiera sido maltratada por èste Detective (los insultaba, retardaba la prestaciòn del servicio y aparte de eso los tuteaba), asì por ejemplo les decìa: “SIENTATE ALLI”; “YA TE ATIENDO”; “ESPERATE”; “ESO NO ES POR AQUÍ”; “ESE CASO ES DE JEFATURA”; “VAYA A OTRO LADO”, esas entre otras expresiones.

           Comenzaba la mañana de aquèl fatìdico sàbado 24 de diciembre del año 2001 cuando sale de su residencia la señora Irma de Màrquez, madre de Anìbal, se despide en el camino de su hijo, no obstante èste le hace entrega de cierta cantidad de dinero para la compra de algunos ingredientes destinados para la celebraciòn de la cena navideña. Llega Anìbal a su Comisarìa y recibe la guardia del Grupo Saliente, expresa en ese momento: ¡¡quiero una guardia tranquila, hoy es 24, no quiero problemas!!.

          Por otro lado llegaba la señora Irma de Màrquez a los alrededores del Mercado Principal de Coche, lucìa animada para efectuar sus primeras compras, cuando de pronto en forma intempestiva , dos hombres desalmados, pistolas en mano y luego de amenazarla de muerte, acompañàndo èsta amenaza con fuertes empujones, logran despojarla del dinero que portaba en una pequeña cartera de cuero, habiendo logrado su cometido principal, no en vano le efectùan varios disparos hirièndola de gravedad. De inmediato los presentes corren despavoridos y tan sòlo uno de ellos, un humilde anciano corre hasta el cansancio y logra llegar a la Oficina donde se encontraba de guardia el Detective Màrquez, sin oxìgeno siquiera para respirar procura el anciano entrevistarse con el funcionario Màrquez : ¡¡Inspector mataron a .....!! contesta Màrquez ¡¡señor, espèrese!!; insiste el anciano ¡¡la robaron y luego....!!, vuelve Màrquez ¡¡señor, traiga a la persona para que denuncie!!; mientras tanto agonizaba la señora Irma, momentos cuando llega un conductor, ayudado por los presentes, la suben al vehìculo y proceden a su traslado al Hospital màs cercano.

                           Inmediatamente a su ingreso, procede la distinguido Maritza Martìnez a reportar el ingreso a la oficina màs cercana del CICPC, el propio Màrquez rcibe la llamada: ¡¡ es la Distinguido Martìnez, quiero reportar el ingreso de una señora muy grave a quien asaltaron!!, contesta Màrquez ¡¡Mire Distinguido tome nota que luego mando la comisiòn!!, contesta la Distinguido ¡¡es que la señora està muy grave, casi muerta!!, insiste Màrquez ¡¡si se muere vuelva a llamarme para llamar a la furgoneta!!.

           Asì transcurrìan los minutos, cuando uno de los presentes del hecho logra dar aviso a una comisiòn de la Policìa uniformada, dàndoles las caràcterìsticas de los criminales y la direcciòn hacia la cual huyeron, se trasladan de inmediato los Oficiales y logran capturar diligentemente a dos sujetos cuyas caracterìsticas  son muy parecidas a los sujetos que fueran descritos con anterioridad, deciden llamar a la misma Oficina del CICPC: ¡¡Buenos dìas, es el sargento Edgar Pèrez, con quien hablo!!, ¡¡Sì, es el Detective Màrquez, dìgame!!, quiero solicitar informaciòn de una señora que està herida en el hospital y tenemos a dos sujetos detenidos!!, contesta Màrquez ¡¡ustedes conocen el procedimiento, pàsenlos a la Fiscalìa, ustedes son los estàn practicando la detenciòn, ¡¡sì, lo sabemos, pero insisto, quiero saber acerca de la señora, dònde està, còmo se llama!!, ¡¡no sè, està en el hospital, no sè cuàl!!; transcurrìa no màs de una hora de aquèl hecho cuando sale uno de los mèdicos del quiròfano y le informa a la Distinguido: ¡¡Distinguido, la señora pese a nuestros intentos por salvarle la vida, falleciò, lo lamentamos!!, de inmediato efectùa llamada al CICPC y le informa a Màrquez: ¡¡Inspector, la señora de hace rato acaba de fallecer!!, contesta Màrquez: ¡¡està bien, ahora mando la comisiòn, es que la tengo ocupada en otra cosa!!, ¡¡està bien, yo espero la comisiòn en el hospital, ah... mire, al parecer hay dos sujetos detenidos!!, ¡¡sì, lo sè pero esos detenidos no son nuestros porque....!!.             Suena el telèfono de Màrquez, se trata del Supervisor de Guardia quien le informa: ¡¡Tiene usted un ingreso de una persona por arma de fuego en el hospital!!, no sè Comisario, la comisiòn està lista para salir!!, ¡¡puès màndela ahora y me reporta!!, ¡¡entendido Comisario, ya mando a la comisiòn!!, ¡¡no, no la mande, traslàdese usted mismo y me llama!!.

             Sale la unidad P-508 de inmediato al Hospital, insiste Màrquez en el trayecto a su acompañante ¡¡ Què vaina, se nos enculebrò la guardia paisano!!, ¡¡Bueno, què vamos a hacer!!. Al llegar al mismo y luego de entrevistarse con el camillero del hospital, èste los conduce a la Sala de Cadàveres, donde una vez en su interior procede èste mismo a dejar caer la sàbana que posaba sobre el cuerpo sin vida de quien parecìa ser una mujer de unos 55 años de edad, al quedar su rostro completamente al descubierto, impotente y rebozado por la sorpresa expresa Màrquez ¡¡ES MI MADRE, MALDITA SEA, COMO PUDO HABER PASADO, QUIENES FUERON, NO LO PUEDO CREER!!, mientras tanto en la Oficina del CICPC aùn continuaba esperando sin respuesta alguna aquèl diligente anciano; por la otra, los funcionarios policiales permitìan retirarse a los sospechosos que momentos antes habìan detenidos, se trataba entonces de los verdaderos ASESINOS. 

MI SENTIDO PESAME…….. ANIBAL