REINVENTING “THE DEAL”
REINVENTING “THE DEAL”
En estos días he tenido la oportunidad de introducirme, de la mano de #Susana Gómez Foronda, en el mundo del Employer Branding, del Employer ¿“que”??.... si, la imagen que una organización genera en la mente de sus empleados “como un buen lugar para trabajar”, así como en los socios estrategicos más importantes en el mercado externo.
Claro, esto dicho así por el Señor Brett Minchington, padre de la frase, suena muy filosófico, pero es tan real como la vida misma. La manera en que una organización se conduzca, la forma en que trate (y lo que ofrezca) a sus empleados, marca definitivamente lo que sus empleados estén dispuestos a hacer por dicha organización, como lo van a hacer, y, por consiguiente, va a proyectar una imagen al mercado, una reputación, que, en ocasiones, puede estar en sintonía-diatonía con la imagen de marca que dicha empresa abandera y que contiene unos valores.
Pongamos, por ejemplo, que una organización hace sus deberes y lo que ofrece a sus empleados (propuesta de valor), la estrategia de la organización, y la imagen que se percibe en el exterior se encuentran en sintonía, de manera que existe una coherencia entre lo interno y externo, por lo que se generan dos beneficios: interno, el compromiso de sus empleados, y externo, la reputación hacia al exterior provocando la atracción de talento. Simplemente genial.
Pero, desde mi inexperta visión, lo realmente importante, llegados a este punto, es no caer en la complacencia, y tener en consideración que nos encontramos ante un entorno cambiante: economía, demografía, cultura, sociedad, y lo que hoy vale, mañana no. Por ello, ese “Deal” inicial mutuo entre la organización y el empleado, lo que se ofrece y lo que se espera, debe auditarse y pulsarse continuamente a fin deconocer su impacto en la organización.
Con ese objetivo siempre presente, promoveremos acciones de mejora continua requeridas por los empleados, detectaremos brechas a fin de solucionarlas, y todo ello, para lograr una consistencia desde tres vértices: como se ve a si misma una organización, como la perciben sus empleados actuales, y como lo perciben lo empleados potenciales a los que se dirije y socios externos.
¡Gracias Susana por abrirnos los ojos!
Abogada Laboralista
7 añosFantástica reflexión Luis Manuel Monte Villén.
Asesor Independiente de Consejos de Administración y CEOs en Desarrollo Organizativo, Transformación Cultural y Gestión de Talento | Consejera Independiente | Liderazgo | Futuro del Trabajo
7 añosGracias a ti Luis Manuel Monte Villén por el reconocimiento y tu participación. Me ha encantado compartir con vosotros mi experiencia. Un abrazo y felicidades por el artículo!