San Lino Agropecuaria: de una mala experiencia a crear un feedlot de primera, que genera energía y fertilizantes con los residuos

Con el objetivo de reducir la huella de carbono, desde San Lino Agropecuaria llevan adelante un proyecto de economía circular: utilizan el estiércol generado en el feedlot para producir biogás que se puede utilizar para generar energía eléctrica y calórica. Además, como subproducto de este proceso se genera biofertilizante que es empleado en los cultivos agrícolas y pasturas.

“Yo lo hacía por un tema comercial, después empezamos a ver que era bueno el producto que hacíamos, con muy bajo contenido de gases de efecto invernadero, y hoy estoy muy preocupado por el tema de la huella de carbono y de los gases de efecto invernadero”, resume Jaime Goodall, de San Lino Agropecuaria.

El emprendedor, de 64 años, adelanta que desde la empresa están trabajando para completar el circuito del resto de los subproductos del campo. El proyecto tiene más de 10 años y surgió luego de que su esposa heredara un campo en Chivilcoy, donde hoy están el feedlot y el biodigestor.

Además de tener Jaime una larga tradición agropecuaria, dado que su familia tiene campos en Tejedor y Villegas, también su esposa viene de ascendencia ganadera. El bisabuelo de ella llegó a los 7 años de España, estudió para ser boticario en la Argentina y luego fue farmacéutico —incluso fundó la primera farmacia de Chivilcoy— y barraquero. “Tenía barracas y empezó a comprar campos y después, como por la campaña al desierto debieron hacer aportes, el Gobierno les dio como recompensa 13.000 hectáreas”, agrega Jaime,cuyo bisabuelo vino de Inglaterra a la Argentina con 9 toros Hereford.

Durante la década que trabajó como contratista, estuvo por distintos puntos del país: desde el partido bonaerense de General Villegas hasta la ciudad chaqueña de Charata y San Luis. Pero en un momento, comenzó a tener nuevos proyectos. “Yo quería incorporar otra forma de facturar, que era la parte ganadera”. La oportunidad se le dio en 2011, cuando su esposa heredó un campo en Chivilcoy. “Empezamos acá, que había unas pocas vacas. Era muy mal momento para ganadería, pero bueno para agricultura. Así que fuimos reteniendo todo”, recuerda.

El origen del cambio comenzó a gestarse en 2012, a raíz de una gran inundación que hubo en la zona. Como respuesta, decidieron empezar a engordar en feedlot caseros. “Pero era un despiole el tema del barro”, sostiene. Si bien la cantidad de tierra negra junto a la materia orgánica resistía el pisoteo en corrales, llegaba un punto en el que el agua traspasaba.

“Justo vi en el diario que alguien estaba haciendo feedlots sobre cemento en Carlos Tejedor y, como yo era de ahí, fui a buscarlo”, rememora.

Al llegar al lugar, Jaime vio un biodigestor y que habían arrancado con un feedlot de 500 animales. “Me parecía fantástico poder hacerlo sobre cemento. Vi que el proyecto funcionaba bien, pero había cosas que no me gustaban y quería hacerlo de forma tal que se pudiera escalar para arriba”, reflexiona y explica que la idea era que podían llegar a tener 5000 animales permanentes bajo un feedlot así y producir el alimento para esa hacienda en el propio campo. Entonces, decidió llevar adelante la propuesta, pero con algunos cambios. La idea original se adaptó a su realidad y en el campo decidieron hacerle, además, un tinglado para la sombra.

“Arrancamos todo el proyecto en 2015, ahí empezamos toda la planificación. Encontré un arquitecto, que era hijo de un amigo mío del colegio, que me ayudó muchísimo con la planificación. Con él y con los [del proyecto del biogás] hicimos dibujos y cuando arrancamos, ya lo hicimos con la idea de poder agrandar la capacidad máxima que puede tener el campo, por su superficie, para producir la comida”, describe en relación a la idea de economía circular.

El funcionamiento es simple: la materia fecal del feedlot se introduce a uno de los biodigestores y, al terminar el proceso, el biogás que se obtiene se transforma en electricidad a través de los grupos electrógenos. Esto significa el biogás proviene de materia orgánica.