¿Ser o Parecer?

Si nos preguntamos qué es más importante, ¿ser o parecer? Es normal que “ser” sea la respuesta automáticamente, ya que como se dice popularmente y de una manera romántica “lo que importa es lo de adentro”. Sin embargo, es también importante reconocer que somos seres visuales, ya que el 83% de las decisiones las hacemos por los ojos, y, además, nuestra mente decide mayoritariamente basada en sentimientos.

Esto no quiere decir que “el parecer” tenga una mayor importancia que el “ser”, simplemente que también tenemos que reconocer su relevancia. En realidad, en el ámbito de la imagen pública, consideramos que ambas, “ser” y “parecer” tienen un mismo grado de relevancia. Aquí te explicamos por qué. Con el “ser”, estamos hablando de una cuestión de fidelidad a nuestra esencia. Sin la cual, un proceso de imagen en el que se construye el proceso de percepción y por tanto el parecer, estaría engañando al público y, en algún momento, esta imagen construida terminaría por caerse y perder credibilidad. Los consultores decimos en manera resumida, forma sin fondo engaña.

Por otro lado, el “parecer” ayuda a transmitir la esencia para poder obtener los resultados deseados. Sin esta imagen coherente todo lo valioso de la esencia no traería beneficios ni alcanzaría su potencial debido a los bajos niveles de comunicación. En resumen, fondo sin forma no comunica.

Así que, cuando nos preguntan si consideramos uno u el otro como más importante, la respuesta es no. Ambos tienen gran relevancia y requieren el uno del otro para alcanzar resultados óptimos y lograr una imagen poderosa.