Ser yo mism@, contra viento y marea
Cuando una persona se siente bien, consigo misma, hay una mayor fuerza interior, suficiente para impulsar a dicha persona a realizar acciones que le permitan ampliar su zona de aprendizaje, a vencer obstáculos, a modificar sus creencias limitantes, a reencuadrar sus perspectivas, a identificar sus valores, a establecer metas relevantes y a lograrlas.
Un factor clave para tener una buena aceptación de ti mismo, es lo que se conoce como la autoestima, la propia valoración que tienes de ti y que, a pesar del entorno, o incluso de lo que piensen u opinen tus seres queridos, te permite tener la suficiente confianza en quién eres y en quién quieres convertirte.
He tenido clientes, que han tomado plena conciencia de qué, aunque su padre o su madre, u otro ser querido, no confíe en ellos, o incluso dicha persona esté en contra de lo que hace o quiera hacer, comprenden que deben agradecer el amor, el cariño, la educación, los valores y demás cosas por las que reconocen valía, y persistir en desarrollar su carrera profesional o su vida, de la forma que han elegido.
Recuerdo una cliente, mujer, que su mamá hizo hasta lo imposible, y durante varios años, para que no estudiara o no concluyera su carrera profesional; al final se graduó, con honores y actualmente trabaja en una empresa gracias a su preparación académica; sin embargo, en esos momentos en los que estaba por terminar la universidad, tuvo la posibilidad de estar en un proceso de Coaching, que si bien no tenía como objetivo resolver la situación que tenía con su madre, era importante para ella hacerlo, si quería lograr ser quién finalmente hoy día es.
Y es que, a través del Coaching, las personas pueden tomar conciencia de todo lo que compone o integra su vida, y darle el lugar adecuado, ordenar las cosas que le suceden, los sentimientos, los sueños, y en el fondo entender en quién se quieren convertir, y cuándo eso sucede, no importa si llueve, truena o relampaguea, lo van a conseguir, porque en verdad es lo que quieren.
También tuve otro cliente, que durante años había batallado con sus padres y hermanos, por la forma en la que quería vivir su vida, de manera independiente, basándose en la preparación académica, en el desarrollo de habilidades y competencias, versus los consejos que le daba su familia de “llevársela tranquila”, conformarse con lo que tenía, o con la vida que le había tocado y entonces simplemente se enfocó en quién realmente quería ser, se independizó en todo sentido, aceptando y queriendo como son a sus familiares y amigos, y manteniendo su esfuerzo y dedicación a superarse a sí mismo día con día.
Con el Coaching he descubierto que lo principal es ser yo mismo, contra viento y marea, quizás recuerden personas a las que se refieren con la frase "genio y figura hasta la sepultura", cuándo se trata de quienes son auténticos, y que curiosamente, son quiénes trascienden por su integridad, su congruencia y su pasión por la vida.
Y es que la auto estima te lleva a desarrollar un amor propio, por ti mismo, a quererte y cuidarte, a valorarte, a disfrutar de quién eres, justo en este momento, y también a desear ser alguien mejor, sin que por ello debas despreciar tu estado actual, por el contrario, agradecerlo, pues sea como sea, has llegado hasta este punto, y ahora toca encaminarse hacia otra nueva meta, y en el fondo eres y seguirás siendo tú.
Así que, si tienes interés de trabajar con tu autoestima para desde ahí despertar y aprovechar tu potencial, no dudes en acudir a un Coach profesional, por supuesto, que sea de la ICF.