Siete frases con las que tu asesor financiero sabe que le estás mintiendo

¿Qué pasa cuando contactas con un asesor financiero? Que, según tu situación económica, lo harás por diferentes motivos. En algunos casos, lo harás porque te resulta imposible conseguir un crédito en tu banco, aunque también puedes solicitar sus servicios en el caso de que tengas dinero ahorrado y quieras obtener mayor rentabilidad por él. También son especialmente útiles cuando tienes una empresa y necesitas que te echen una mano con la fiscalidad.

La relación con tu asesor debe ser de máxima transparencia. La confianza es fundamental para que entienda tus necesidades y te proponga soluciones que, finalmente, sean viables. ¿Cuándo sabemos que no es así? Te contamos lo que más escuchamos en Gesconsa Consultores.

"Eso también me lo dan en mi banco"

Cuando nos encontramos esta frase, no sabemos muy bien qué es lo que clientes esperan de nosotros. Acudir a un asesor no es sinónimo de encontrar un 'chollazo' o que consigamos que se obre el 'milagro'. Si consigues lo mismo en tu banco, ¿por qué has contactado con nosotros?. ¡Corre y acepta lo que te han ofrecido!

Si no lo has hecho y has llegado hasta nosotros, ¡es por algún motivo!. Además, sabemos que por tu perfil, es imposible que te hayan dicho SÍ a la financiación que buscas.

"Tengo 14 pagas al año"

Estás intentando inflar tus ingresos y nos vamos a dar cuenta cuando veamos tu Declaración de la Renta, pero también tus nóminas. ¿Qué piensa el cliente? Que obviamente no es lo mismo tener 12 pagas a 14 y, esta cifra, puede suponer la diferente entre acceder o no a tu hipoteca. Tranquilo, con el tiempo descubriremos la verdad.

"Me van a hacer fijo en breve"

Importa el hoy. Tu futuro no nos importa ni a nosotros, ni a ningún banco. No te hagas castillos en el aire con el día de mañana, piensa en si tu situación financiera actual es garantía de que vas a poder pagar tu vivienda durante los próximos 30 años.

"Esa cuota es muy cara"

¿Qué esperabas tal y como está el mercado hipotecario actual? Olvídate de cuota que ronden los 200 ó 300 euros, en la mayoría de los casos eso ya no ocurre.

¿Sabes por qué te parece caro? ¡Porque no tienes ahorros! Hay que buscar una financiación extra (eso es parte de nuestro valor añadido) que SIEMPRE encarecerá la de la hipoteca. ¿No te salen los números? Acude a cualquier banco a ver si te pueden conseguir lo mismo que nosotros.

"No tengo préstamos"

¿Para qué crees que sirven los extractos bancarios? Además, todos los bancos consultan la CIRBE antes de conceder financiación. Ahí va a salir hasta lo que comiste ayer y, además de hacernos perder el tiempo, te vas a llevar un NO como una catedral. Nos interesa ganar a todos.

"Una tarjeta no es un préstamo"

Sí que lo es. Perjudica al cliente a la hora de conseguir financiación y, tal y como ocurre en el apartado anterior, siempre termina sabiéndose. Jugará en tu contra y en la nuestra.

"Ya tengo la casa reservada, necesito la hipoteca"

¿Cómo te atreves a reservar una casa sabiendo que en tu banco no puedes conseguir una hipoteca? La única realidad es que estás desesperado y ya no sabes cómo conseguir la financiación. Has movido ficha antes de contactar con nosotros y, si no sacamos adelante la operación, tendrás que aceptar las consecuencias de haber actuado de forma kamikaze.

"No estoy en ASNEF"

¿Qué nos apostamos? Al igual que ocurre con los préstamos, al final también se termina sabiendo si estás o no en un fichero de impagados. No vayas de listo porque hay formas de averiguarlo. Y, por si no lo sabías, este registro es común para todos los bancos, cualquier entidad podrá descubrir lo que se te 'ha olvidado' pagar. Si consultas con un asesor, díselo SIEMPRE.

¿Has dicho alguna vez estas frases? Que pasemos la información por alto no es sinónimo de que nos la hayamos tragado. Es más, justo después comenzaremos a indagar esperando la sorpresa en cualquier momento. Tú quieres tu casa y nosotros cobrar por nuestros servicios. No nos hagamos perder el tiempo.