SOMOS INSUSTITUIBLES
Yael Bern • Branding Marketing Specialist Creadora, Coach, Consultora y Conferencista
Ayudar a las empresas y profesionales a transformar su identidad, destacar con su comunicación y estrategias para seguir siendo relevantes y brillar en un entorno altamente dinámico y competitivo.
¿Qué le ocurre a la autoestima de hombres y mujeres cuando se ven forzados a vivir de acuerdo con unos estereotipos sociales tan arcáicos, estereotipos de masculinidad y feminidad tan unidimensionales?
Bueno....
El hombre a menudo desarrolla una máscara, un falso ego, que debe presentar al mundo, porque siente que tiene que demostrar lo que vale; tiene que ser competente y un hombre de acción.
La mujer también desarrolla una máscara, ya que se obliga a ser encantadora, amable, servicial y generosa.
Cuando un hombre o una mujer intenta mostrar su otro lado, generalmente surgen sentimientos de culpa y vergüenza, de inferioridad o todo lo contrario: de presunción y arrogancia.
Cuando hombres y mujeres se ven forzados a vivir de acuerdo con estereotipos unidimensionales de masculinidad y feminidad, su autoestima puede verse gravemente afectada, ya que estos estereotipos limitan su expresión auténtica y generan conflictos internos.
Aquí te explico algunos efectos comunes:
1. Pérdida de identidad
Tanto hombres como mujeres pueden sentir una desconexión con su verdadera identidad cuando tratan de ajustarse a los roles rígidos que la sociedad espera de ellos. Para los hombres, esto puede manifestarse en la presión por ser siempre fuertes, competitivos o emocionalmente cerrados, mientras que para las mujeres, puede incluir expectativas de sumisión, cuidado y sensibilidad. Esta falta de autenticidad erosiona la autoestima, ya que el individuo siente que no puede ser valorado por lo que realmente es.
2. Sensación de fracaso y vergüenza
Cuando las personas no logran ajustarse a estos estereotipos, pueden experimentar sentimientos de fracaso o vergüenza, lo que impacta su autoestima. Los hombres que no encajan en el modelo de "masculinidad tradicional" pueden sentirse inadecuados o menos "hombres", mientras que las mujeres que no se alinean con expectativas tradicionales de feminidad pueden ser percibidas como poco femeninas o no valiosas. Esta constante lucha para cumplir con estándares poco realistas genera una baja autovaloración.
3. Bloqueo emocional y falta de autenticidad
Vivir según estereotipos restringe la expresión emocional. Los hombres, por ejemplo, pueden suprimir emociones como la tristeza o la vulnerabilidad, ya que se asocian con debilidad, mientras que las mujeres pueden sentir que deben reprimir su ambición o liderazgo para no desafiar los roles tradicionales. Este bloqueo emocional crea una falta de coherencia interna, que mina la autoestima, ya que la persona siente que debe esconder partes esenciales de su ser para ser aceptada socialmente.
EL EQUILIBRIO DE LA ENERGIA FEMENINA Y MASCULINA Y SU EFECTO EN LA MARCA QUE DEJAMOS:
La armonía entre la energía femenina y masculina que todos los seres humanos poseemos es esencial para alcanzar una vida equilibrada, productiva y plena, tanto en lo personal como en lo profesional.
Estas energías no están relacionadas exclusivamente con el género, sino con cualidades y dinámicas que pueden potenciarse mutuamente cuando están en equilibrio.
1. Energía masculina: acción y enfoque
La energía masculina se asocia tradicionalmente con cualidades como la acción, el enfoque, la estructura, la disciplina y la toma de decisiones. Es la energía que impulsa el avance, la ejecución de tareas y el logro de objetivos claros. En un contexto profesional, esta energía ayuda a cumplir metas, ser productivo y mantenerse orientado hacia resultados tangibles.
2. Energía femenina: creatividad y conexión
Por otro lado, la energía femenina está vinculada a aspectos como la creatividad, la intuición, la empatía, la colaboración y la flexibilidad. Esta energía permite conectar con el entorno, con las emociones y con las necesidades internas, generando ideas, innovación y relaciones armoniosas. En lo profesional, la energía femenina facilita la adaptación a cambios, el trabajo en equipo y la generación de soluciones creativas.
3. Equilibrio y armonía entre ambas energías
El equilibrio entre ambas energías es clave para alcanzar una vida productiva y plena, tanto en lo personal como en lo profesional. Cuando la energía masculina y femenina trabajan en armonía, las personas pueden alternar entre la acción y la reflexión, entre la ejecución estructurada y la creatividad fluida, logrando una mayor eficiencia y satisfacción en sus proyectos.
Herramientas para cultivar la armonía para una vida plena
Para cultivar esta armonía, es necesario ser consciente de ambas energías y cómo interactúan en el día a día.
La meditación, el trabajo personal y el autoconocimiento son herramientas útiles para equilibrar estas fuerzas. En lo profesional, encontrar un equilibrio entre planificación y ejecución (masculino) con creatividad y colaboración (femenino) permite un rendimiento más sostenido y alineado con el propósito de vida.
¿Cómo a través de un proceso de marca personal hombres y mujeres recuperan la autoestima y su fuerza para convertirse en protagonistas de sus destinos, creadores de sus realidades y manifestadores de sus sueños?
La marca personal es la forma en que te presentas y eres percibido por los demás, basada en tu autenticidad, habilidades y valores únicos.
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La mala fama de la marca personal a menudo surge de la idea de que es una forma de autopromoción superficial o egocéntrica, enfocada únicamente en la imagen externa y en "venderse" en lugar de ser auténtico.
Algunas personas creen que puede llevar a una falta de autenticidad, ya que se percibe como una estrategia para impresionar, más que como una expresión genuina de uno mismo.
A través de un proceso de marca personal, tanto hombres como mujeres pueden recuperar su autoestima y fuerza interior, permitiéndoles convertirse en creadores conscientes de sus realidades y manifestar sus sueños.
En una era donde los estereotipos sociales se desvanecen, el valor de la marca personal radica en la autenticidad y la capacidad de diferenciarse desde la propia singularidad.
A medida que las normas rígidas y las expectativas tradicionales pierden fuerza, la marca personal permite a las personas definirse por sus propios valores, talentos y pasiones, sin las limitaciones impuestas por los estereotipos.
Esto no solo fortalece la identidad, sino que también inspira a otros a ser auténticos y genuinos, creando conexiones más profundas y relaciones basadas en la verdad individual y la diversidad.
Aquí te explico cómo el proceso de crear una marca personal va más allá de los estereotipos sociales y de ser una estratgia de auto promoción.
1. Reconexión con su autenticidad
El proceso de construir una marca personal comienza con un autoanálisis profundo, donde hombres y mujeres exploran quiénes son más allá de las expectativas y estereotipos sociales. Este viaje de autodescubrimiento les permite reconectar con su propósito, valores, fortalezas y pasiones, recuperando su sentido de identidad auténtica. Al reconocerse como seres únicos, comienzan a sanar heridas de baja autoestima causadas por tratar de encajar en moldes predefinidos.
2. Valorar sus talentos y singularidad
Cuando hombres y mujeres descubren y aceptan sus habilidades únicas y contribuciones al mundo, aprenden a valorarse desde su autenticidad. Este reconocimiento les permite despojarse de las comparaciones y expectativas sociales, desarrollando una autoestima sólida basada en sus talentos y no en la validación externa. En lugar de buscar encajar, comienzan a destacar sus diferencias como una ventaja, lo que refuerza su confianza y sensación de poder personal.
3. Empoderamiento para crear su propio camino
Al crear una marca personal auténtica, las personas se vuelven conscientes de que pueden diseñar la vida que desean vivir, tanto a nivel personal como profesional. Este proceso les otorga el poder de definir sus metas y sueños, alineados con su esencia, y de tomar acción para manifestarlos. Ya no dependen de los roles que les asigna la sociedad; se convierten en creadores activos de su destino. Este sentido de control y autorrealización fortalece su autoestima y capacidad para manifestar sus sueños.
4. Superar el miedo al rechazo
A través de la creación de su marca personal, hombres y mujeres aprenden a superar el miedo al rechazo y al qué dirán, ya que reconocen que su valor no depende de la aprobación de los demás, sino de su autenticidad. Este proceso les ayuda a tomar decisiones más arriesgadas, a expresar su verdad y a sentirse cómodos siendo vulnerables. Cuanto más confían en sí mismos, más libertad experimentan para crear su propia realidad sin las ataduras de los juicios externos.
5. Alineación de la vida personal y profesional
Un proceso sólido de marca personal implica alinear quiénes son con lo que hacen en todas las áreas de su vida. Esto crea una coherencia que se refleja en una mayor satisfacción personal y profesional. Al vivir de acuerdo con su propósito y esencia, hombres y mujeres experimentan un sentido más profundo de realización, lo que les permite manifestar sus sueños con mayor claridad y fuerza.
En resumen...
Cuando las personas se ven obligadas a vivir bajo estereotipos de género limitantes, sufren una pérdida de autenticidad, conexión emocional y autoaceptación, lo que deteriora su autoestima y su capacidad de vivir una vida plena y equilibrada.
A través de la construcción de una marca personal auténtica, hombres y mujeres pueden reconstruir su autoestima, liberarse de los estereotipos y reclamarse como los creadores conscientes de sus realidades, manifestando sus sueños desde un lugar de poder y autenticidad.
La armonía entre las energías femenina y masculina en cada persona permite una mayor productividad, una mejor toma de decisiones y un enfoque más balanceado en el logro de metas personales y profesionales. Este equilibrio no solo ayuda a alcanzar el éxito, sino también a disfrutar del proceso y crear una vida más plena y auténtica.
¡Aceptar ese poder de crear desde nuestra marca personal es divino y único!
Digamos «sí» a nuestra autenticidad, abandonemos el deseo de comapararnos, copiarnos y competir.
Cuando nos afirmamos sobre nuestra auténtica fuerza, no necesitamos trascender nuestro ego, nuestra personalidad, ni dejarlo atrás; no necesitamos negar nada en nosotros.
Respondamos con alegría a lo que somos; porque somos insustituibles.
¡ A BRILLAR !
Yael Bern