SOS FUTURE

Hoy lo digo. Conozco cientos de jóvenes que buscan oportunidades en el mercado laboral español. Jóvenes que sienten que se les escapa el tren, hundidos, pero en busca de una oportunidad para demostrar lo que valen. Jóvenes sobre cualificados y políglotas que acumulan estudios en caras universidades que sus padres con el sudor de sus madrugones han patrocinado incondicionalmente. Jóvenes que con tan solo una oportunidad dejarían la piel por demostrar de lo que son capaces. Jóvenes sin empleo, luchando desde algún rincón con wifi, esquivando falsas promesas, mails plantilla de departamentos de Recursos Humanos (gracias) y frases tópicas como el “ya daré voces” o “envíame un mail”.

Al otro lado veo empresas. Pirámides verticales con puestos de gente que calienta sillas (obviamente no todos), bloquea oportunidades y cultiva su pequeño jardín por y para él. Veo empresas que retribuyen en cascada de más a menos y vierten mierda en vertical de menos a más. Empresas con bailes de testosterona y ego en los amplios despachos y en cambio, equipos de zapatos gastados y sobre esfuerzos en las salas sin lujos. Veo las mismas caras en televisión. El mismo hombre del tiempo desde hace 25 años. Las mismas firmas bajos las mismas columnas. Inmovilismo, bloqueo y poco Darwin.

Veo una España pobre. Estancada y exprimida como el Outlet del Sur de Europa que es. Veo un país que le da la espalda a lo nuevo, al futuro, a los jóvenes. Una España atontada repartiendo salvoconductos a estudiantes que escapan al extranjero en busca de suerte. Veo una España de paella para comer entre semana y carajillo. Veo una España de “ande yo caliente ríase la gente”, una España dominada por narcisos y clasistas de marcas caras y corazones pobres. Una España garrula que vota por torpe empatía como si votara a un cantante de “La Voz”. Una España “bertiniana”, machista y simplona que avala a gente que abandera la mentira falsificando estudios y jodiendo a todos aquellos jóvenes que sí han estudiado y han luchado para poder llamar a las puertas del empleo con seguridad.

Y de vez en cuando veo gente que da oportunidades. Que ampara a jóvenes y tiene memoria. Gente que acepta el cambio y que entiende que colaborar con talento es tenerlo y dar oportunidades es recibirlas y enriquecerse. Veo gente que responde a los emails de aquellos que llaman sus puertas en busca de un ángel. Veo personas que no solo reciclan sino que también cierran el círculo de la vida y procuran por el ecosistema y el futuro de los aspirantes. Veo esto, lo entiendo como justicia y reconozco la sabiduría que encierra.

Pero por cada persona que encuentro, cuento mas de cien “zombies” robotizados, hacia su meta, sin visión panorámica. Si los líderes no transmiten valores y acaparan el poder a cualquier precio, si la gente no lee y solo mira por su parcela, si los empleados ocupan zonas de confort permanentes, si no arriesgamos, si no apostamos por una generación en peligro de ser frustrada, si nos preocupa más el parecer que ayudamos que el “ayudar”, si no apadrinamos, si no plantamos, si no hacemos nada….Hoy.

Nada crece, nada sube y todo deviene antiguo o muerto, o lo que es lo mismo; más triste.