Sueño cumplido, Promesas Rotas… El Trabajo de Hoy
He leído muchos blogs y libros que mencionan aquellos errores que los candidatos cometen en las entrevistas de trabajo, aquellas características que buscan los reclutadores en los postulantes, consejos que ayuden a conseguir el empleo que tanto sueñas o como venderte mejor en el mercado laboral basándonos en nuestras capacidades y experiencias, ¿Te suena?.
Pero no me he topado con aquel que mencione la imagen que la empresa nos vende, la otra cara de la moneda.
Realizamos un proceso exhaustivo de selección en el que invertimos tiempo para seleccionar al candidato idóneo para la vacante y podemos llegar a jugar con las expectativas e ilusiones de las personas que se presentan sin ser intencional.
Les prometemos un buen ambiente de trabajo, un desarrollo de carrera dentro de la empresa, prestaciones de ley (como deben de ser), estabilidad laboral, buena relación con los jefes, incrementos salariales, plan de retiro, aunque en ocasiones los dueños o directivos de la empresa nos cambien las decisiones y eso pueda significar que no podamos cumplir una promesa previamente planteada
Ofrecerle empleo a un candidato te da cierta satisfacción y al cubrir una posición que quizás fue un tanto complicada te llenas de alivio, lo complicado de esto es, que la empresa pueda cumplir con las condiciones que se le prometieron al candidato en el proceso de reclutamiento.
Por qué a final de cuentas los responsables de Recursos Humanos nos adaptamos a las condiciones y decisiones de trabajo que se tomen de la alta Gerencia.
¿Somos responsables los de Recursos Humanos? Si, hasta cierto punto, porque al igual que tú también somos empleados de la empresa y también necesitamos acatar decisiones, podemos sugerir, plantear pero a veces las mejores propuestas caen en oídos sordos.
Las empresas serán las primeras responsables en dar luz verde a la implementación de estrategias de retención de talento, quitarse esa mentalidad a veces un tanto conformista de pensar que si desarrollan a su personal se irán a otra empresa, o de creer que las personas son fácilmente reemplazables y que la rotación de personal les es indiferente.
Olvidan que las personas prefieren estar en situaciones retadoras, simplemente intente recordar el momento en su vida donde ha tenido un mayor crecimiento y cuáles fueron las causas que lo originaron.
Sin importar la paga o el ambiente laboral, a todos nos gusta seguir creciendo y a nadie le agrada la idea de sentir la sensación de estancamiento.
El área de recursos humanos siempre será perfectible, sin importar que te encuentres como director en una empresa, siempre habrá algo nuevo que aprender y adaptar, todos tendremos que trabajar de manera continua en:
· Abrir mejores canales de comunicación y evitar ofrecer un puesto con grandes beneficios que después no cumplirás.
· No limites las ideas. La persona se acaba de incorporar y por lo general vienen con ideas, procedimientos, maneras de hacer más fácil el trabajo que han marcado su trayectoria laboral y que durante la entrevista fue lo que más llamo tu atención, es momento de dejarle hacer las cosas y no poner trabas, apoyarle para sacar lo mejor de sí.
· Ofrece información. Se claro avisando de posibles problemas que existen con el equipo de trabajo, problemas que hay que solucionar, una clara visión del área donde se va a desenvolver.
· No abusar. A la persona siempre se le contrata para realizar ciertas actividades y a veces cuando se incorpora los jefes quieren que realice apoyo en otras áreas, no tiene nada de malo que apoyen a los compañeros, pero llegan a verlo posteriormente como parte de sus obligaciones diarias, esto llega a desanimar en gran medida al personal de lo que creen.
· Ofrece retroalimentación. Habla con el personal a menudo y pregúntale si necesita algo, si está disfrutando el trabajo y si esta coincide con lo que se le prometió al contratarlo, como van las relaciones con su equipo de trabajo, comuníquense y sobre todo ten mucho tacto y no olvides la prudencia, si hay algo que no te agrada de su trabajo dilo, no hagan lo que muchos hacen, esperar al finalizar el periodo de prueba para decir todas sus fallas… da pena ajena.
· No te dejes llevar por comentarios. Una nueva incorporación puede ocasionar la incomodidad de personas toxicas que muchas veces son identificables, puedes confrontar con la información recibida, la confianza es un imán de oportunidades, si confías en el candidat@ defiéndele y recuerda estar por encima de tonterías.
· Cumple lo prometido. En todos los aspectos como: de Salario, Desarrollo de carrera, beneficios en salud, Capacitación, al final de cuentas si el candidato no dio el ancho, con una mano en la cintura te deslindas de responsabilidad y tu conciencia se queda tranquila.
Debemos estar conscientes de las decisiones que se toman, por que conlleva a un impacto en la imagen corporativa de la empresa. Ya que si no cumples con las maravillas que le hablaste al candidato acerca de la empresa, este siempre buscará mejores opciones de empleo.
“Cultura empresarial sin futuro, la mitad de tus ganancias se irán en sustituir nuevos candidatos”