Supera el efecto Salomon: Atrévete a ser tú mismo

Supera el efecto Salomon: Atrévete a ser tú mismo

En los años 60, un joven investigador del comportamiento humano, Salomon Hash, se sorprendió al descubrir lo fácil que resultaba para las personas adaptar (léase cambiar) sus respuestas para ser aceptado en un grupo. Y es que en sus experimentos no hubo siquiera la necesidad de que el grupo le pidiese a la personas que cambien... lo hicieron porque lo consideraron "conveniente".

La triste realidad es que la mayoría de nosotros moldea inconscientemente su actuar y respuestas solo porque imaginan que ello es un requisito para ser aceptados por el grupo, aun cuando no estemos de acuerdo en lo que dicen o hacen, aun cuando el grupo en el que nos encontremos no sea particularmente importante para nosotros.

Ello explica, por ejemplo, por qué algunos niños deciden no responder a las preguntas de profesor, aun cuando conocen la respuesta, por temor a equivocarse, o sentir que serán etiquetados como "diferentes" por sus compañeros. Algo muy similar nos sucede a los adultos, cuando callamos sobre algo que nos parece injusto, o cuando decidimos no contradecir lo que la mayoría piensa, aunque sepamos que están equivocados.

El experimento de Salomon puede dejar en el ambiente la idea de que estamos condenados a deambular en el mundo aceptando lo que la mayoría indica, dejando soterrados nuestros planteamientos e ideas, e incluso nuestro sistema de valores y creencias. Para bien y tranquilidad de todos nosotros, lo que sucede es lo contrario.

Como en muchas de las circunstancias sociales, somos capaces de romper ese efecto "mágico" del grupo cuando somos conscientes de su existencia. No se necesita un conjuro particular para romper con el encantamiento: saber que está en nuestras manos superarlo si así lo decidimos sirve como una vacuna contra su efecto.

Ahora que nuevamente tienes el poder de dirigir tu destino sobre tu grupo de referencia (si es que no lo tenías ya) ¿qué barrera estás dispuesto/a a superar? Tu decides. Si me permites sugerir algo, avanza sobre aquello que consideras un abuso y que callas por temor a que los demás te cataloguen como diferente.

Lo que mencionas se puede extrapolar al tema de la corrupción, gente que se hace a un lado o se conforma con que "el sistema es así" y no da cara o defiende sus principios o ideas como corresponde. El seguir la corriente o dejarse llevar termina haciéndonos complices a perpetuar dicho comportamiento. A levantar la voz una o mil veces ante lo que no nos parece justo, correcto o simplemente porque queremos hacernos escuchar, como bien dices "ser nosotros mismos".

Muy buen artículo Rune Arauco Mengoni!, gracias por compartir valor! y como bien dices:’está en nuestras manos’. Gran abrazo!

Mariella Terry Cámero

FORMADOR EN ANÁLISIS DE DATOS CON EXCEL Y POWER BI - EXCEL CORPORATIVO - EXCEL PARA UNIVERSITARIOS - LUDUS

4 años

Lastimosamente, queremos confundir la empatía y la prudencia con la auto-censura si cabe el término, y el miedo al rechazo.....expresar nuestra opinión no nos quita lo empático ni lo prudente, y si al expresarla, experimentamos rechazo constante como respuesta al sentimiento de amenaza que experimenta tu interlocutor ( y que no tiene nada que ver con uno) con respecto a nuestra opinión, entonces podría ser una alerta de que debemos cambiar de entorno. Muy buen artículo Rune. Felicitaciones

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