Tú crees que es tuyo, pero es de otra persona
La cara que se te queda cuando te enteras de que tu hosting y tu dominio pertenecen a otra persona.

Tú crees que es tuyo, pero es de otra persona

Me he reunido con muchos clientes a lo largo de mi carrera.

Te puedo decir que el 95% se han sorprendido con esto que te voy a contar.

Imagina que quieres abrir un negocio físico.

Tienes tu idea, la has madurado bien, quizás has hecho un estudio de mercado y por fin te decides a poner todo en marcha.

Piensas un nombre que te encanta. Lo tienes clarísimo, es el nombre perfecto.

Te pones a buscar local. Miras en Internet, visitas unos cuantos hasta que das con uno que cumple con todo lo que necesitas.

Buena situación, buen tamaño, buen precio.

Listo, ese es el tuyo.

Bien, ahora que ya tienes tu nombre y tu local…

...vas y registras ambas cosas a nombre de otra persona.

¿Te parece que tenga eso el mínimo sentido?

¿A qué descerebrado se le ocurriría semejante locura?

A nadie, ¿verdad?

Pues mira, con el alojamiento y el dominio de las páginas web se le ocurre a la mayoría de la gente.

La mayoría de las personas pagan su hosting y su dominio a agencias que a su vez lo contratan al proveedor de hosting y registrador de dominio.

Es decir, funcionan como meros intermediarios. Con su margen comercial y todo, por supuesto.

¿Es malo que comercien con eso? Pues no.

¿Es bueno? Para ellos sí, para ti no tanto.

Sea como sea, es.

Pero espera, hay más, porque ya no es sólo que no seas dueño de tu dominio ni de tu hosting, no es sólo que estés pagando más por lo mismo.

Es que luego si quieres dejar de trabajar con esa agencia, tendrán que transferir el dominio a tu nombre. Si quieren, porque claro, en realidad es suyo.

Y en cuanto al alojamiento, lo más probable es que estés metido en un alojamiento compartido con unas cuantas webs más, por lo que no podrán ponerlo a tu nombre.

Así que te tocará pagar porque alguien te haga una migración a otro hosting.

¿Cómo te quedas?

En Plan A/B no trabajamos así. Pensamos que tu dominio y tu alojamiento deben ser tuyos y estar a tu nombre. Y así lo hacemos desde el principio.

O nos encargamos de cambiarlo cuando algún cliente viene con ese escenario.

El motivo es sencillo: menos complicaciones para ti, menos complicaciones para nosotros.

Y todos contentos.

Todo eso empieza aquí.

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