¡No te dejes engañar de tu futuro yo!

“El futuro depende de lo que hacemos en el presente” Mahatma Gandhi

No sé por qué a veces le tenemos más confianza a nuestro “futuro yo” que al “yo presente”, esperamos que como por arte de magia el tiempo nos ayude a tomar mejores decisiones, por ejemplo, nos imaginamos que en el futuro cercano vamos a ser más ahorradores, vamos a comer mejor, vamos a levantarnos más temprano o hacer ejercicio. Díganme si en alguna ocasión han estado en alguna de estas situaciones: 

1. Este fin de semana como de todo, porque el lunes comienzo la dieta,
2. Hoy me levanto un poco más tarde porque mañana me levanto a correr,
3. Este es el último café que me compro antes de empezar mi plan de ahorro, 
4. Hoy salgo a comer con unos amigos y mañana me levanto temprano a estudiar, o
5. Después mando la hoja de vida, después me inscribo en el curso, después..., después...

Indudablemente hay algunas cosas que son más fáciles para nosotros que para otras personas y a otras personas se les facilita lo que a nosotros se nos dificulta. Sin embargo, la verdad sea dicha, si en este momento no queremos empezar a comportarnos como nos imaginamos que se comportará nuestro "futuro yo", ¡nunca lo vamos a lograr! porque siempre encontraremos la excusa perfecta para seguir aplazando esa cosa que no queremos hacer.

Según James Clear escritor de Hábitos Atómicos "no cambiamos por arte de magia cuando chasqueamos nuestros dedos y decidimos convertirnos en alguien completamente nuevo. Cambiamos poco a poco, día a día, hábito a hábito". De acuerdo con su libro, la manera más práctica de cambiar quiénes somos, es cambiar lo que hacemos, de esa forma con acciones diarias nos iremos convirtiendo en esas personas que queremos ser.

Es decir, si quieremos ser personas atléticas, no vamos a esperar mañana para empezar a hacer ejercicio, nos ponemos los tenis hoy y salimos a dar una vuelta, si queremos ser de las personas que aman la lectura, nos leemos una hoja hoy que ya después se convertirá en una de muchas hojas leídas y así poco a poco, el cúmulo de pequeñas acciones nos irán transformando en esas personas que queremos ser. Yo sé, suena muy sencillo para ser cierto, pero cuando me pongo a pensar fue así como desarrollé mi hábito de la lectura, imaginándome que quería ser una gran lectura y empezando por la primera hoja.

Por eso, esta semana quiero invitarlos a pensar en qué personas les gustaría llegar a hacer, cómo les gustaría ser reconocidos y que reflexionemos acerca de qué tipo de acciones son las que desarrollan las personas que tienen esa identidad. De esta forma, si queremos ser personas "saludables", nuestras acciones deberán demostrar que nos ejercitarnos regularmente, tomamos agua y comemos saludable, recordemos que son nuestras acciones y no nuestras palabras las que nos permiten descubrir realmente como somos y como seguramente nuestro "futuro yo" se va a comportar.

Entonces, si queremos ser una persona con ciertas características: "atlética", "ahorradora", "culta" o "saludable" debemos tener más confianza en nuestro "yo presente" de manera que desarrollemos los hábitos necesarios para que el "futuro yo" le quede más fácil convertirse en esas personas que queremos ser.   

¡Feliz semana de actuar hoy como quienes queremos ser en el futuro!