Traiga un Título Universitario, sume su Experiencia Comprometida y le daremos a cambio un Salario Mínimo. Atentamente, La Empresa

***Sin mencionar que algunas empresas le importa un pepino la salud de sus trabajadores, esos que día a día dan el todo por el todo. Y si enferman... al pote

En la actualidad, la búsqueda de empleo se ha convertido en una odisea para muchos profesionales, y también para aquellos recién egresados o con poca experiencia laboral. Sin embargo, a la dificultad de encontrar una oportunidad acorde a las habilidades y expectativas, se suma una práctica cada vez más común: la exigencia por parte de las empresas de copias de trabajos anteriores y título universitario para ofrecer a cambio el salario mínimo.

Esta situación genera una serie de interrogantes y cuestionamientos, ¿acaso la experiencia adquirida en trabajos previos no tiene valor si no se avala con un título universitario? ¿Es justo que un profesional con un bagaje de conocimientos y habilidades comprobadas se vea obligado a aceptar un salario mínimo, por debajo de sus expectativas y necesidades?

Es importante recordar que un salario digno está establecido para garantizar también una vida digna a los trabajadores, cubriendo sus necesidades básicas de alimentación, vivienda, salud y vestido. No obstante, en muchos casos, este salario mínimo no se ajusta a la realidad del mercado laboral, especialmente en áreas donde el costo de vida es elevado.

Sin mencionar que algunas empresas le importa un pepino la salud de sus trabajadores esos que día a día dan el todo por el todo. Y si enferman... al pote

Exigir copias de trabajos anteriores y título universitario para ofrecer el salario mínimo no solo es una práctica asquerosa, sino que también desincentiva la contratación de talento joven y limita las oportunidades de crecimiento profesional. Las empresas deben reconocer el valor de la experiencia y las habilidades, independientemente del nivel educativo, y ofrecer condiciones laborales justas y dignas a sus empleados.

Es necesario que se genere un cambio de paradigma. Las empresas deben apostar por la inversión en capital humano, brindando oportunidades de desarrollo y crecimiento a sus trabajadores, y garantizando salarios dignos que permitan una vida plena y satisfactoria.