TRES HABILIDADES QUE APRENDÍ AL GRABAR UN AUDIOLIBRO
Qué rico escuchar un buen audiolibro. Una buena historia, Una buena voz.
Pero el proceso de producción conlleva tiempo, concentración y paciencia.
Por eso hoy te quiero contar tres habilidades que aprendí al grabar un audiolibro:
1. La escucha activa: No soy yo contra el micrófono. Es el director/directora, el sonidista y yo. Entre los tres nos enfrentamos al texto. Los directores me cuidan las espaldas o mejor dicho, me cuidan las palabras.
2. Aguantar: Se dilatan desde las ganas de un sorbo de agua, hasta las ganas de quebrarse mientras se interpreta. Se aguanta la energía, pero se sueltan los músculos. Se aguanta la posición durante largo tiempo.
3. Ser paciente: conmigo en ese momento de caídas y reparos, con las situaciones técnicas, con los tiempos que hay que cumplir.
Los directores me cuidan las espaldas o mejor dicho, me cuidan las palabras.
La satisfacción de grabar un audiolibro va más allá de "una voz bonita" que sabe hacer pausas y leer en alto un texto.
Se trata de saber hacerlo respetando al autor y su obra dándole el toque creativo como talento de la voz y aplicando las habilidades que he mencionado.
Te invito a escuchar mi demo como narradora de audiolibro y si mi voz encaja con tu proyecto, escríbeme a audios@locutoranoemihernandez.com. Recuerda que me encontrarás en Madrid, España y me acento es el Español Neutro Latinoamericano.