Un nuevo año no significa esto
Estamos iniciando un nuevo año, un conjunto de 365 días para generar nuevas posibilidades o al menos eso es lo que muchas personas piensan.
Pues seamos honestos, en muchas de las ocasiones los propósitos de lo que haremos el año que sigue, son dejadas en el tintero con la mejor de las intenciones de hacerlas realidad.
He aprendido tanto por experiencia propia que dejar nuestras metas para un "próximo año" es sin lugar a dudas una de las ideas de crecimiento personal y profesional más arriesgadas que podemos tomar.
Es como dice el dicho "Dispararnos nosotros mismos en nuestro propio pie". No me mal entiendas en esta afirmación, pero te hago la siguiente pregunta:
¿Por qué si ese propósito es TAN IMPORTANTE para ti, por qué lo postergas para el próximo año?
Este acto es como esperar ver el fututo, con los ojos vendados y sentados esperando a que el mismo llegué... ¿Parece absurdo verdad? Pues bien, en esta analogía, es lo mismo, pues contemplamos metas u objetivos que deseamos alcanzar, esperando que ahora sí, el próximo año se cumplan.
Sin embargo, nadie (al menos por el momento) puede asegurar lo que en verdad nos reserva el futuro con exactitud.
Es más, el propio Nostradamus aún a pesar de todas sus predicciones hay algunas que ha llegado a fallar.
Es por eso que si tienes una meta, un objetivo, un propósito por cumplir en este año, no esperes a las condiciones perfectas, mejor observa tu presente, analiza lo que te llevará a ese futuro deseado y haz una pequeña acción para alcanzar tu meta.