Vacacionar en hoteles fit
Si bien el descanso anual no se restringe a la época estival, lo cierto es que una enorme porción de la población vacaciona entre los meses de enero y febrero, sobre todo las familias con niños y adolescentes en edad escolar. Los destinos pueden ser a nivel nacional o en el exterior y las propuestas hoteleras varían de acuerdo al presupuesto con el que se cuenta. No obstante, en los últimos años los turistas se han volcado a reservar hoteles con gimnasios, una opción que aparece en todos los buscadores de hospedajes.
Los motivos pueden ser múltiples: continuar con la rutina fitness, perder algunos kilitos ganados durante las fiestas de Navidad y Año Nuevo, o compensar los desajustes alimentarios y los denominados "permitidos" que muchas veces aparecen en las vacaciones.
De esta manera, los hoteles deben disponer y diseñar un gimnasio para que sus clientes se sientan a gusto y no rompan con sus ejercicios cotidianos. El ambiente puede organizarse con algunas máquinas y accesorios, y un entrenador que los guíe en su utilización. También, se pueden ofrecer alquileres de sogas, pesas y bandas TRX para que las personas puedan entrenar al aire libre, ya sea en algún espacio verde del mismo alojamiento, o en el exterior, como en la playa o a los pies de una montaña.
El objetivo debe ser el de ofrecerles a los huéspedes la posibilidad de descansar y de no desechar todo el esfuerzo que han realizado durante el año para mantener un estilo de vida fit. Por supuesto, otros servicios son bienvenidos como bebidas y snacks saludables, sesiones de masajes, y asesorías nutricionales, entre otros.