VIAJE A LA MOTIVACIÓN ETERNA: ¿Cómo utilizar el tiempo de manera productiva?

Hoy vamos a hablar sobre algunas habilidades claves sobre el manejo del tiempo. Son muy necesarias para mantenernos enfocados en producir efectos que nos motiven. El único tiempo que tiene sentido, es el que nosotros le otorgamos significado.

El problema de mucha gente desmotivada, es decir, personas sin la capacidad de producir efectos motivadores para su vida, fue que el significado a su propio tiempo se lo dieron otras personas. Delegaron sin saberlo la responsabilidad de otorgar significado a su propio tiempo.

Lamentablemente en el mundo sobran personas con ganas de darle significado al tiempo ajeno. Nunca dejes que tu tiempo quede a merced de otras personas. Tu tiempo es tuyo y de nadie más. No nacimos para vivir con nuestro propio tiempo tergiversado por otras personas.

Debemos ocuparnos de otorgarle significado a nuestro tiempo. Desde el momento en que una persona se siente tranquila en su casa para poder determinar sus objetivos, las tareas a desarrollar y el tiempo que le llevará, su vida comenzará a cambiar.

¿Cuántas veces al mes piensan cómo utilizar su tiempo de manera productiva?

Nuestros objetivos deben cambiar cada tanto para que exista una mejora, si cambian los objetivos, inevitablemente deberá cambiar la administración de nuestro tiempo.

Los objetivos siempre tienen que estar alineados con nuestro tiempo.

El tiempo que el mundo nos otorga es una gran oportunidad para construir causas que produzcan efectos motivadores.

Esas causas se construyen con nuestras decisiones y con las acciones que decidimos realizar.

No siempre dedicar la mayor parte del tiempo a lo que nos apasiona es sinónimo de productividad.

Puede denotar adicción a las tareas, podemos caer en enviciarnos con las tareas que nos apasionan. Debemos saber que las tareas que van a contribuir a nuestro crecimiento futuro no son las que ya sabemos hacer, las que ya sabemos hacer son tareas de mantenimiento netamente operativas. Las tareas estratégicas son justamente las que tenemos que desarrollar y están vinculadas a la mejora en aquello que no hacemos a la perfección. La mejora en las tareas que no sabemos hacer, nos implica una mayor motivación que las mejoras en las tareas que sí sabemos hacer.

La mente se estimula mucho más en la mejora de nuevas tareas.

Mucha gente pasa gran cantidad de su tiempo libre haciendo lo que le gusta hacer, y una buena estrategia es ocupar el tiempo libre en cosas que no nos guste hacer, pero que impliquen efectos motivadores futuros.

Hay un costo implícito en postergar las tareas que no nos gusta hacer, el mayor costo es que reducimos la posibilidad de que se produzcan efectos motivadores futuros. Es muy difícil ver ese costo en el presente, requiere un cierto nivel de visión, la capacidad de visualizar escenarios futuros.

Siempre tenemos que concentrarnos en generar efectos motivadores en la realidad.

Retrasar tareas de progreso es un gran error. La razón por la cual mucha gente no ocupa gran cantidad de su tiempo en nuevas tareas es muy simple, requieren concentración, esfuerzo y energía. Y las tareas habituales se hacen sin esfuerzo alguno, entonces no producen incomodidad. Lo que produce incomodidad con el tiempo se transforma en un efecto motivador, porque nos va a ayudar a cumplir objetivos futuros.

Mariano Menendez

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