Ya no es tan fácil hablar simplemente de Servicio al Cliente...
Kay Valenzuela
A Top voice in Customer Experience in Latin América, International Speaker & Experienced Consultant in Total Experience Cultures and CX - EX Design | Founder ICSA LATINOAMÉRICA
"A la hora de manifestarse frente a los equipos de trabajo, la comunidad, familia ó al individuo más complejo de todos: uno mismo; hay una gran diferencia entre hablar con intensión vs hablar por atención."
Sin embargo, ambas formas parecieran estar cocidas por un mismo hilo conductor...el deseo de acercarnos a alguien ó tratar de que alguien se nos acerque.
La necesidad de conexión que tenemos los seres humanos no es una fabricación de situaciones pasadas, presentes ó momentáneas. Está instalada dentro de nuestro instinto de supervivencia, en la parte más primitiva de nuestra biología. Entenderlo es simple pues para perpetuar nuestra especie obviamente necesitamos estar con otros.
Busca dentro del ermitaño y encontrarás que tiene una herida si, pero no quiere estar sólo realmente. Mira dentro del alma de quien se reprime en silencio y encontrarás una herida sí, pero en silencio es como más fuerte habla...Encuentra a quien se mantiene distante ante el temor de una herida, que añora ser sanado por alguien que se acerque y le regale otra experiencia. Busca en quien no expresa amor y encontrarás una gran lucha por no entender finalmente para qué vive ese ser humano...
"Busca dentro del alegre el por qué quiere alegrar a otros siempre y por qué es tan optimista, que se vio de frente a la tristeza y vio que no vale la pena pues ya sabe que pasa."
"Busca detrás del auténtico que genuinamente lo da todo y encontrarás un alma plena que necesita poco de nada ó casi nada."
"Busca detrás de quien de amor habla y quien de amor busca y encontrarás su verdad al desnudo, con experiencia acumulada de muchas ausencias aceptadas y por eso conoce su importancia."
Cuando las personas me preguntan por qué elegí hablar específicamente de "Experiencias en Servicio" suelo contestar con una pregunta...Y si de eso no se tratara, entonces...para qué ha de vivirse la vida?
Las experiencias, al recordar historias que traspasan el tiempo y percibir nuestra capacidad de poderlas revivir perfectamente iguales y en su misma intensidad, cuando cualquiera de nuestros sentidos se activa, tiene la particularidad de provocar emociones positivas o negativas y por eso dependemos de nuestra memoria emocional (experiencia) para perpetuarnos como especie...aunque no somos sus esclavos, cumplen el mismo objetivo: La supervivencia.
Cada uno de nosotros, en cada interacción con nuestro entorno, tiene algo también muy peculiar y repetido a nadie...la intensión más íntima. Pero la intención es consciente...Y a pesar de que no puedes accesar a tu parte biológica más primitiva para interrumpir tus verdaderas emociones, también significa eso que no puedes instalar intenciones en lugar de emociones a tu albedrío, por lo que mejor ocúpate de saber que tu intención vaya de la mano y manifiesta en cada experiencia que generas intencionadamente para ti mismo...porque tu también eres parte de la ecuación de esa experiencia.
Dentro de todo lo que nos fue dado, para vivir experiencias positivas, para resguardarnos de las malas ó quedarnos en las nulas, también se nos dio el inmenso regalo de poder elegir quienes somos en el proceso y como apreciamos y se lo demostramos a quienes nos rodean. De ahí viene el juicio de valoración sobre las cosas...lo bueno y lo malo es bueno o malo...mucho ó poco, pero comparado con qué?...Con la experiencia de otros. Si hasta el derecho al libre albedrío abandona y hasta ese merecido derecho expira ...el día en que no haya nadie para llevarle la contraria! Entonces...para qué quieres derecho?
Uno sólo puede amarse, hacerse o darse cosas a uno mismo hasta un punto; a partir de ahí, cualquier lugar que ese sea, a donde uno llegue con uno mismo...por ley de la vida necesitamos encontrar a otro ser humano y que pueda ser específico el juicio del valor sobre cuánto realmente fue lo que vivimos...que no es sólo compararlo sino quien lo valore...Si no cómo sabríamos si hicimos y dimos realmente lo mejor que pudimos?
Todo es un asunto de experiencias...Y pensar que alguna vez a todo esto sólo se le llamó...simplemente Servicio al Cliente....