#E005T01 YO ERA UN INFELIZ!

¡YO ERA UN INFELIZ!

- Yo era un desgraciado, vivía sufriendo, vivía amargado. No duraba en ningún empleo. Mi pobre mujer vivía quejándose. Mis hijos me reclamaban más atención.

Era lo que se dice un verdadero hazme llorar.

Hasta que un día, un amigo, me prestó el disco de Warren Sánchez “buscando el sendero”. Y desde ese día mi vida cambió: dejé de sufrir, dejé de amargarme, dejé de trabajar, dejé a mi mujer, dejé a mis hijos...  

(LES LUTHIERS – 20 años - GANDES HITOS - El sendero de Warren Sánchez (Salmos sectarios))

Como te comenté la semana pasada en mis confesiones de La Vida Es Una Moneda, yo era un infeliz.

Ahora bien, si algo aprendí, fue, que es real la fábula del rey y su anillo con la leyenda “Y esto también pasará”, reducido al anillo de Don Julio Grondona, “Todo pasa”.

 - ¿Pasa y listo, Daniel?

- No pequeño saltamontes. A esa frase le falta su complemento: TODO TIENE UN PRECIO. 

Claro que, al mismo tiempo, ese precio, puede ser el impulsor de tu crecimiento y el acelerador del “Todo Pasa” para quedar del otro lado de la moneda, a sabiendas (sino no aprendiste NADA) que la moneda sigue girando en el aire. 

“No importa cuántos errores cometas o lo lento que sea tu progreso, todavía estás muy por delante de quienes no lo intentan.” (Tony Robbins)

Apostar al largo plazo, tiene un precio.

Escuchar activamente, tiene un precio.

Creer en el otro, tiene un precio.

Hacer daño a otro, tiene un precio.

No hacer nada, tiene un precio.

Por eso es interesante saber ¿cuánto estás dispuesto a pagar?

El despido de un empleo, el fracaso de un negocio, la separación de pareja, una enfermedad; son variables que se nos cruzan en el camino, que en la mayoría de los casos no puedes controlar y te sorprenden sin aviso.

 "De vez en cuando la vida nos gasta una broma, y nos despertamos sin saber que pasa, chupando un palo sentados, sobre una calabaza. (Joan Manuel Serrat)

Pero más extraño aún es que te sorprenda un ascenso, inyección de capital a tu emprendimiento, encontrar el amor en una cafetería, tener un hijo o que seas un hippie con OSDE.

“Escoger un camino significaba abandonar otros” (Pablo Cohelo)

Todo tiene un precio.

Y a medida que crecemos, sabemos que ese precio se va prorrateando contra el beneficio obtenido.

La famosa balanza en busca del equilibrio entre lo emocional y la racional.

Entre lo que tengo y lo que no.

Entre lo que busco y lo que encuentro.

Entre lo que obtuve contra lo que perdí.

Entre hacer y delegar. 

Y es así estimado saltamontes (ya googlaste lo de saltamontes, #MalditoMillennial??), te cuento que es inexorable que a medida que uno crece, las frustraciones y la realidad que a cada uno le pegue; hace que vayamos dejando de lado a algunas convicciones o ideales que traíamos de nuestra época de divertidos estudiantes, modificándolas sustancialmente o simplemente desaparecen. 

"Quien piensa igual de adulto que a los 18, no piensa" (Fernando Savater)

Por ejemplo, ¿te imaginás pagar el precio de perder la libertad de estar todo un sábado paseando o preparando tu salida nocturna, para estar horas en una página web armando un viaje, cuando alguien más experimentado, con conocimientos técnicos y que además le pagan, puede armártelo mientras vos haces otra cosa? 

Muchos dirán: #SI. Creo que existe un segmento #Centennial que sin dudas lo hace, incluso pidiéndole la tarjeta de crédito a sus padres. 

Por otro lado, ese pequeño burgués que estaba dormido en lo más profundo de tu corazón, cada día se levanta más temprano que vos, y te dice:

- Che, hoy pinta fulbito con los pibes. ¿No te vas a poner a buscar un vuelo a Dubrovnik verdad? (de paso te cuento que, si sos fan de #GOT, podes revivir escenas de la serie, por sus pintorescas calles. Si te animás a andar desnudo y te griten: Shame! Shame!, ¡podrás hacerlo!!! Jajajaja ) Y decís #No y te conectás con tu agente de viajes (o el de tus padres,  tu empresa, o, bah… conmigo.) para que resuelvan el tema.

Te aseguro que a medida que crecés, valoras más tu tiempo y aprendes a delegar y pagar esa comodidad burguesa, que separa lo mejor de lo bueno, lo urgente de lo importante y que existen cosas en las que ya no vale la pena gastar tiempo (otra forma de pago). Preguntále a tus padres, o al tío piola de la familia. O pensá que le dirías a ese yo de 18 años que veía un mundo que tal vez hoy ya no existe.

Cuando viajas, ya no querés un hostel ni hacer multi escalas, ni viajar a dedo, ni se te ocurre viajar sin asistencia al viajero!!! ¡Y ni hablar si además viajas por trabajo! Joder, OMG!!.

Así que si vas a #viajar, sea por trabajo o placer, vive tu burguesía sin culpas y contactame.

Mi diván siempre está listo para recibirte y hacerte sentir menos culpable. Cobro caro. Sabelo.

- Pero Daniel, yo buscaba una respuesta a una pregunta y ... ¿me estás queriendo vender tus servicios, así de una...?

- TODO PASA pequeño saltamontes.

«Dentro de veinte años estarás más decepcionado por las cosas que no hiciste que por las que hiciste. Explora. Sueña. Descubre«. (Mark Twain)

#SeFeliz 

🆂🅴🅴 🆈🅾🆄 🅰🅱🅾🅰🆁🅳!

#DanielUría 

#LaVerdadDeLaMilanesa_#E005T01_YO ERA UN INFELIZ!.

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