Métricas de éxito médico

¿Metas económicas o médicas?

Siempre estas épocas son de gran utilidad para observar que fue lo que ocurrió durante un año de trabajo. Es innegable que existe mucha información alrededor de nuestra actividad profesional, y existen muchas herramientas que facilitan su acceso. Algunas métricas que se me ocurren son número de consultas, consultas canceladas, proporción de pacientes de primera vez y subsecuentes, pacientes hospitalizados, procedimientos realizados, entre otras. Evidentemente todos pensaran que hace falta una métrica, la cual para muchos es la más importante, y es el ingreso económico generado.

Ya hace algunos años cuando comencé mi actividad profesional preguntaba a mis colegas que ya tenían algo de tiempo trabajando cuál de las métricas era la más importante, para tratar de formarme un criterio de cómo medir mis aciertos o fallos. Resulto ser que los ingresos económicos es algo que se mide con mayor frecuencia; sin dejar de lado que el dinero es una herramienta para realizar otras tantas actividades, es sin duda una métrica que “el sistema” nos lleva a medir casi de manera automática, ya que entre estados de cuenta, facturas, y declaraciones de impuestos es muy fácil de cuantificar, y así año con año se pueden comparar los resultados y reconsiderar nuestros esfuerzos por mejorar esta métrica.

Sin embargo nunca me convenció el ingreso neto como el elemento que mida mi desempeño profesional, es obvio que si la considero, pero no es mi métrica favorita, principalmente porque esta profesión está destinada a atender pacientes, no a hacer dinero. Ya que si pensamos en cuanto dinero nos falta o nos sobra, perdemos de vista el objetivo primario, que es la atención de pacientes. Además si únicamente se consideran los recursos económicos como indicador de éxito o fracaso, cuando no se logre alcanzar la meta entonces se hará lo posible por obtener más ingreso, y estas estrategias son completamente diferentes, a las que se pueden idear para obtener más pacientes o más referencias de pacientes.

Si se piensa en aumentar ingresos existen muchas maneras de hacerlo, y dado que nunca nos dieron clases de economía en la carrera, estoy seguro que tomaremos pésimas decisiones solo para ver como aumenta el dinero en la cuenta del banco; cosas como aumentar el costo de la consulta o procedimientos, reducir el tiempo de atención por paciente y poder atender más pacientes, solo por mencionar dos ejemplos, y sin contar todas las cosas ilegales que este país permite y que son completamente desleales.

Por el contrario si se piensa en qué se puede hacer para mejorar la satisfacción de los pacientes, para mejorar su percepción de nuestro trabajo, que la experiencia de su atención sea lo más placentera posible, o incluso favorecer la recomendación a sus amigos y familiares, estoy seguro que surgirán cientos de ideas, todas ellas buenas, seguramente todas lograran algún grado de éxito, sin duda ninguna fuera de la legalidad y lo más importante, todas dirigidas a pensar en los pacientes, y no en la cuenta del banco.

Después de cinco años de considerar las metas económicas como algo secundario, y pensar en las necesidades del paciente como mi métrica primaria, me doy cuenta que al final del día las métricas económicas también se cumplieron. Estoy seguro que si el objetivo primario hubiera sido el ingreso neto, la cuenta del banco estaría mejor nutrida, pero siendo honestos, es más grato dormir preocupado por la gente que por los billetes.

¿Ustedes que van a medir este fin de año?