(V) PERSPECTIVAS SOBRE LA INDUSTRIA PETROLERA VENEZOLANA
(Extracto del libro "Derecho y Economía del Ambiente y de los RRNN- DERECHO ECOLOGICO" Autor: Enrique Prieto Silva - En Amazon: https://amzn.to/3gn8mD2
En nuestras entregas anteriores hablamos del petróleo, su evolución histórica, la clasificación del petróleo y su importancia económica, el impulso petrolero en Venezuela, la historia petrolera venezolana, la cuantificación de los recursos petroleros en Venezuela, las reservas petroleras del mundo, el petróleo en el ingreso y en el presupuesto nacional de Venezuela, evolución y desarrollo de la industria petrolera en Venezuela, el ministerio de energía y petróleo, petróleos de Venezuela, s. a. (PDVSA), el registro de producción nacional de petróleo en Venezuela, y el proceso de nacionalizaci[on de la industria petrolera, concluiremos el fundamento del tema en esta entrega con:
15. PERSPECTIVAS SOBRE LA INDUSTRIA PETROLERA VENEZOLANA
Queremos en esta entrega referir nuestro interes por proyectar nuestro entusiasmo con la perspectiva del futuro que antes hubimos de considerar para nuestra industria petrolera, por lo que obviaremos los abatares del presnte pol[itico de la industria hoy dia, que sabemos tendrá una inmediata recuperaci[on y volvera a la industria proyectada en el pasado fin de siglo.
Desde entonces, Venezuela exporta hidrocarburos de diferentes API, en proporciones que les permite calcular el precio por barril sobre la base de la mezcla de ellos. Últimamente, se desarrolló la exportación de mayores volúmenes de productos refinados, luego PDVSA completó y puso en operación el proyecto de integración entre las refinerías de Amuay y Cardón, ambas ubicadas en la península de Paraguaná, estado Falcón. Sinergia que le permite la optimización de los paquetes de productos elaborados por ambas refinerías, lo cual, unido a las redes instaladas anteriormente, genera ganancias en el orden de 80 millones de dólares anuales, por concepto de manufactura de productos de alto valor comercial.
Otro proyecto en operación que es digno de nombrar, es el que incorporó al mercado la producción de gas y gasolinas generados en el Complejo Criogénico de Anzoátegui, el cual se ha desarrollado con excelentes perspectivas.
Perspectivas en la producción
Hasta la época de los años del 2000, cuando hubo el incremento en los precios petroleros, para ese momento, los más altos de la historia, el año 1973 marcó el final de la primera era del petróleo seguro y barato. En octubre de ese año, como resultado de la guerra entre árabes e israelíes, los países árabes productores de petróleo recortaron su producción y embargaron el suministro de crudo a Estados Unidos y los Países Bajos, y aunque el recorte árabe representaba solo pérdida de menos del 7% del suministro mundial, la situación provocó el pánico de las compañías petroleras, los consumidores, los operadores del petróleo y algunos gobiernos. Cuando unos pocos países productores comenzaron a subastar parte de su crudo se produjo una puja desenfrenada que alentó a los países de la OPEP <para entonces eran ya 13 países> a subir el precio de todo su petróleo a niveles hasta 8 veces superiores a los precios de pocos años antes. El panorama petrolero mundial se calmó gradualmente, ya que la recesión económica mundial provocada por el aumento de los precios del petróleo recortó la demanda de crudo. Entretanto, la mayoría de los gobiernos de la OPEP se hicieron con la propiedad de los campos petrolíferos situados en sus países.
En 1978 comenzó una segunda crisis del petróleo, cuando como resultado de la revolución que acabó destronando al Sha de Irán, la producción y exportación iraní de petróleo cayeron hasta niveles casi nulos. Como Irán había sido un gran exportador, el pánico volvió a cundir entre los consumidores. Una repetición de los acontecimientos de 1973, incluidas las pujas desorbitadas, volvió a provocar la subida de los precios de crudo durante 1979. El estallido de la guerra entre Irán e Irak en 1980 dio un nuevo impulso a los precios del petróleo. A finales de 1980 el precio del crudo era 19 veces superior al de 1970.
Para los economistas mundiales, los elevados precios del petróleo volvieron a provocar una recesión económica mundial y dieron un fuerte impulso a la conservación de energía; a medida que se reducía la demanda de petróleo y aumentaba la oferta, el mercado del petróleo se fue debilitando. El crecimiento significativo en la oferta de petróleo procedente de países fuera de la OPEP, como México, Brasil, Egipto, China, la India o los países del mar del Norte, hizo que los precios del crudo cayeran aún más. En 1989, la producción soviética alcanzó los 11,42 millones de barriles diarios y supuso el 19,2% de la producción mundial de aquel año.
Pero a pesar de que los precios internacionales del petróleo mantuvieron su escalada descendente desde 1986, la preocupación por posibles trastornos en el suministro siguió el foco de la política energética de los países industrializados. Las subidas a corto plazo que tuvieron lugar tras la invasión iraquí de Kuwait reforzaron esa preocupación. Debido a sus grandes reservas, Oriente Próximo seguirá siendo la principal fuente de petróleo en el futuro previsible.
La crisis varía según el consumo de cada país. Los industrializados son los que utilizan la mayor parte de la energía mundial. En 1990 el consumo de energía en Estados Unidos, Europa, los países de la antigua URSS y Japón era más o menos tres cuartas partes del total mundial.
Para esos años se produjo una crisis petrolera, que para muchos, era coyuntural, aun cuando otros pensaron que la misma se prolongaría por largo tiempo, lo cual se transformó en cíclica, incrementándose por la incorporación de países como China e India en etapas de súbito desarrollo e incremento del consumo petrolero como fuente energética.
En tal sentido indicó el estudio, que Venezuela y el Reino Unido de Gran Bretaña poseen el mayor número de campos petroleros con reservas probadas superiores a los 300 millones de barriles, siendo Venezuela el país que en el hemisferio occidental, tiene la mayor suma de campos petroleros, con un total de 40, en tanto que Inglaterra posee solo 17 campos.
Fue también de interés saber que Venezuela es el país que tiene el mayor número de campos petroleros con reservas probadas superiores a los 1.000 millones de barriles, no obstante que se presenta con reservas probadas superiores a los 64.000 millones de barriles, lo que lo califica como un país de grandes perspectivas. En el informe de PDVSA se puede apreciar con diáfana claridad la superioridad de Venezuela en nivel comparativo, tanto en campos petroleros gigantes, supergrandes, grandes, medianos y pequeños, que superan en todos los casos a los otros países petroleros como: Ecuador, Colombia, Alaska, Reino Unido y Noruega.
Las reservas probadas de petróleo en Venezuela, fueron clasificadas de acuerdo al grado API así: 73% de crudos pesados y extrapesados, con 47.85 millones de barriles; y 27% de crudos livianos y medianos con 17.415 millones de barriles.
Detallando las posibles reservas a descubrir, siguiendo los esquemas planteados con el procedimiento de apertura a la exploración y consecuente explotación, mediante los contratos de asociación, se espera que, en las áreas más prospectivas se encuentres entre 7 y 23 mil millones de barriles de crudos livianos y medianos, así como 10 trillones de pies cúbicos de gas natural.
A estas reservas debemos sumar, las correspondientes a los campos marginales, considerados como explotables y las reservas probadas adicionales que serán recuperadas mediante la implantación de métodos de recuperación secundaria susceptibles de ser aplicadas en los yacimientos existentes, las cuales, aparte de su cuantificación como reservas, forman parte de la política de conservación emprendida por nuestra Industria.
La apertura petrolera
A todas éstas, consideramos de interés hacer mención del estudio presentado por PDVSA con motivo del inicio de la Apertura Petrolera para esos años, en el cual refiere una brillante perspectiva de Venezuela para aumentar y valorizar el negocio petrolero. Fue una estrategia energética del Estado anuncia y puesta en ejecución por Carlos Andrés Pérez en 1992 durante su segundo período presidencial, la cual consistía en permitir la inversión de capital privado en las fases de exploración, producción, refinación y comercialización del petróleo y sus derivados a nivel nacional e internacional. Apertura que comenzó bajo la forma de Convenios Operativos con los cuales las empresas petroleras privadas se encargaban de reactivar los campos que se encontraban inactivos. A ésta le siguió la figura de Asociaciones Estratégicas establecida en 1995 entre PDVSA y las empresas petroleras, su objetivo era encargarse de la extracción y mejoramiento de crudos pesados y extrapesados localizados en la Faja del Orinoco.
La última modalidad que se estableció durante la Apertura Petrolera fue la de Convenios de Exploración a Riesgo y Ganancias Compartidas, según la cual a las empresas privadas se le permitía explorar en sectores nuevos con su propio capital, pero aceptando la posterior participación del Estado venezolano de haberse encontrado reservas.
La internacionalización de PDVSA
Cuando explicamos lo correspondiente a la Apertura Petrolera, hablamos de recibir capital privado nacional e internacional. Surgió el proceso conocido como la internacionalización de PDVSA, planteado y ejecutado con el objetivo de buscar nuevos mercados, colocar petróleo de forma segura, aumentar la capacidad de refinación, asegurarse la comercialización y comercializar y procesar el crudo pesado, entre otras.
El primer paso de la operación se inició en 1983 cuando la empresa estatal se asocia con la alemana VebaOel para adquirir a partes iguales las acciones de RührOel, así se adquirieron las refinerías en Gelsenkirchen, Neustadt, Karlsruhe y Schwedt, todas en territorio alemán. PDVSA solo suministra alrededor del 10% del crudo procesado en esas plantas desde que las opera. Pese a ello en 2005 RührOel alcanzó un record en dividendos por 1.300 millones de euros. VebaOel fue transformada a E.ON que en 2002 vendió su participación a Deutsche BP.
En 1986 la petrolera venezolana adquiere el 50% de NynäsPetroleum con base en Suecia, mientras que el resto de las acciones permanecen bajo la administración de la finlandesa Neste Oil.
Ese mismo año, también se adquiere en Estados Unidos el 50% de las acciones de Citgo, que formaba parte de la Corporación Southland, en 1990 adquirió la totalidad de la empresa.
15. LOS HIDROCARBUROS GASEOSOS - EL GAS NATURAL
En este estudio sobre el desarrollo y las expectativas de la Industria Petrolera venezolana debemos enfatizar sobre el gas natural, cuando relacionamos, tanto por su importancia volumétrica, como por la relevancia que está tomando para los planes y los proyectos de desarrollo en esta área de la economía nacional.
El gas natural en genérico, es una mezcla de hidrocarburos parafínicos, cuyo principal componente es el metano (CH4), existiendo en menor proporción otros hidrocarburos livianos como el etano (C5H12), el hexano (C6H14) y el hepano (C7H16).
Se caracterizan estos gases, por contener impurezas como el nitrógeno, el dióxido de carbono, el sulfuro de hidrógeno, etc., substancias que le restan valor comercial cuando exceden de ciertos límites, ya que le disminuyen su poder calorífico, que en el gas natural venezolano oscila entre 818 y 1.798 B.T.U. por pie cúbico.
El gas natural se presenta generalmente asociado con el petróleo, sin embargo, puede encontrarse solo, en yacimientos exclusivos de gas. En Venezuela la mayor parte (94%) de las reservas de este hidrocarburo está constituida por el gas asociado y se encuentran ubicadas, principalmente en la cuenca del Lago de Maracaibo, mientras que las reservas de gas no asociados, se hallan fundamentalmente en el área del Estado Anzoátegui y representan el 85% del total de este tipo de gas. Las principales reservas de gas de Venezuela son las que corresponden a los yacimientos de la zona Anaco en el mencionado estado Anzoátegui, y los ubicados al Norte de la Península de Paria en el Estado Sucre, cuyo potencial energético en conjunto es aproximadamente igual, al de las reservas de petróleo convencional. Por curiosidad comparativa, sabemos que, a diferencia de lo que ocurre en Venezuela, el gas asociado representa el 27% de sus reservas totales.
El gas natural por ser un combustible limpio, barato y fácil de transportar, constituye una de las principales fuentes de energía más económica y con el mayor índice de crecimiento en la cuantificación de reservas descubiertas durante los últimos años. Para 1991, se estimaron mediante cálculos técnicos las reservas probadas de gas natural, en 3,6 billones de metros cúbicos, lo que ubica a Venezuela entre los ocho países con el mayor potencial de explotación de este hidrocarburo.
La importancia del gas natural como hidrocarburo generador de energía, lo apreciamos al conocer algún nivel de consumo, donde en el ámbito mundial, dentro de las cuatro fuentes tradicionales de energía en el mundo, el gas ha ocupado un lugar relevante al aportar el 20%, mientras que el petróleo aportó el 48%, el carbón el 29% y otras fuentes de energía aportaron solo el 3% restante. En Venezuela, el gas natural es una importante fuente de energía al aportar el 41% del total del consumo, después del petróleo con el 42% la hidroelectricidad 14% y el 3% restante, los combustibles y sólidos.
En los planes nacionales de desarrollo de la industria petroquímica, el gas ocupa un lugar de relevancia, al servir en ella de materia, utilizándose además para la producción de amoníaco y el negro humo. Es también de importancia el gas en la industria del caucho, en la generación de gasolina natural y los llamados líquidos del gas natural (L.P.G.)
La gasolina natural es mezclada con el crudo para aumentar la gravedad y se destina a la exportación o se inyecta a los yacimientos para aumentar la recuperación del crudo. De la producción del gas licuado (L.P.G.) parte es exportado y también el usado directamente por las compañías petroleras y distribuido en bombas y tanques para fines domésticos e industriales.
También se utiliza el gas para la inyección en los yacimientos petroleros, pues además de servir para mantener una presión adecuada y de quedar almacenado para su futura utilización, causa una mayor recuperación final del petróleo.
La explotación del gas natural está regida por la Ley de Hidrocarburos Gaseosos. En efecto, dicha Ley declara de utilidad pública todas las actividades relacionadas con la exploración, explotación, manufactura o refinación, transporte y almacenamiento de dicho combustible.
Igualmente, la explotación de gas natural está gravada con el pago del impuesto de explotación o regalía nacional, equivalente al; 162/3% sobre el valor del gas natural enajenando o usado como combustible. En este sentido, dispone el artículo Nº 41 de la ley de Hidrocarburos que cuando el gas sea tratado en plantas de gasolina natural o destinados a otros tratamientos industriales, se celebrarán entre el Ministerio de energía y Minas y la empresa explotadora, por un término no mayor de 15 años, para determinar la participación que corresponda a la Nación.
Con la visión de incentivar y motivar a los inversionistas interesados en el gas, para que cuenten con condiciones atractivas para acometer proyectos de industrialización, transporte, distribución y comercialización de los gases metano y etano en el territorio nacional, el Ejecutivo Nacional emitió el DECRETO Nro. 2.532 del 28 de mayo de 1998 y la Resolución 323 del Ministerio de Energía y Minas. Instrumentos normativos que establecen en su contenido las condiciones por las cuales deberá regirse el sector privado en la industrialización, transporte, distribución y comercialización de los gases Metano y Etano en el territorio nacional. Son el paso inicial para elaborar una Ley Orgánica del Gas que proporcionará una mayor estabilidad jurídica al sector privado en un negocio que en Venezuela avanza aceleradamente hacia un esquema de competencia.
El Gas Metano es la energía más económica y menos contaminante, cuyo suministro es continuo, seguro y confiable.
17. ACCIÓN AMBIENTAL EN LA INDUSTRIA PETROLERA VENEZOLANA
El concepto ambientalista se encuentra presente en la filosofía de PDVSA, tanto en su tratamiento como forma de protección en la ejecución de sus operaciones, como en la programación de actividades de acción ambiental nacional. En este sentido actúa en forma independiente como corporación estatal y en la elaboración de convenios para el saneamiento de áreas específicas del territorio nacional donde opera, tal como es el caso con el Convenio para el saneamiento ambiental y control de enfermedades en el Delta del Orinoco. Convenio que busca fomentar planes y programas de saneamiento ambiental y de prevención y control de enfermedades endémicas, el control de plagas y el reforzamiento de la vigilancia epidemiológica. Todo, dentro de una política de Ambiente, Higiene y Seguridad (AHS), en la cual incorpora temas que se han afianzado con el tiempo, tales como el desarrollo sostenible[1] y las tendencias globales de ambiente, higiene y seguridad. En PDVSA han entendido, que los límites para el desarrollo no son absolutos, sino que vienen impuestos por el nivel tecnológico y de organización social, que deben asociarse al impacto que la explotación produce sobre los recursos del medio ambiente y la capacidad de la biosfera para absorber los efectos de la actividad humana. En este entendido, ayudados por la ciencia, se ha volcado a mejorar tanto la tecnología como la organización social, para abrir paso a una nueva era de crecimiento industrial y mejoría económica, sensibles a las necesidades de protección ambiental.
En el mismo orden de ideas, EE UU propuso a Venezuela trabajar juntos en materia ambiental, especialmente en lo relativo a los acuerdos de la Convención de Cambios Climáticos de Kioto[2], que estableció en diciembre de 1998 niveles de reducción de emisiones de gases invernadero.
En su oportunidad, el secretario de Energía de Estados Unidos Bill Richardson en el foro La respuesta del Hemisferio: Energía e Integración, organizado por el Centro Internacional de Educación y Desarrollo (Cied), expuso que “El gobierno del presidente Clinton considera que todos los países deben reducir o limitar el crecimiento de sus emisiones de gas invernadero. En este sentido se expuso, que la posición venezolana, coincidente con una gran mayoría de países, es que los países en desarrollo no pueden tener el mismo tratamiento ni alícuotas de reducción de emisiones, cuando los industrializados han sido los principales emisores de gases invernadero con sus agresivas políticas de industrialización interna. Es esta una consideración totalmente valedera, por cuanto, los países productores de petróleo, no son los más beneficiados con la venta de este producto y las emanaciones en estos países son muy reducidas, en comparación con las de los industrializados. Esto cambió con la Conferencia de Cancún y la de Rio + 20. Vale recordar, que Estados Unidos es el emisor del 25% de los gases contaminantes que van a la atmósfera.
La conferencia de Kioto aprobó estabilizar las concentraciones de los gases invernadero al nivel de 1990, con la meta global de reducción de 5% en el período 2008-2012 y con cuotas de 7% para EE UU, 8% para la Unión Europea, y 6% para Japón. Los países en desarrollo no tienen reducción.
Según Richardson, los programas de eficiencia energética y la participación en los enfoques internacionales mediante la negociación de las emisiones “pueden beneficiar a todas las economías y no representar una amenaza para los combustibles fósiles”.
En ese entonce se estimó que en Venezuela puede registrar una merma en sus ingresos petroleros de 100 millardos de dólares sobre el Producto Territorial Bruto hacia el año 2030, si los países industrializados consumidores adoptan medidas proteccionistas extremas como impuestos (carbón tax) al crudo importado, no obstante esto se produjo por el acontecer politico.
De igual forma, las empresas operadoras en el área de la exploración, explotación y comercialización, especialmente el transporte, siempre han matenido actualizados y vigentes, planes para la emergencia en caso de reventones y derrames petroleros, tanto en tierra como en sectores acuáticos.
Los derrames de crudo producidos en nuestras costas, lago de Maracaibo y mares, han hecho reaccionar a las gerencias que deben atender los riesgos de esta naturaleza, para mantener en aplicación las normas de protección ambiental contempladas en las leyes Penal del Ambiente y en la Ley Contra la Contaminación de las Aguas por el Petróleo. Todo en coordinación con la Guardia Nacional, que además de ser el órgano de policía ambiental, es el cuerpo que se encarga de la seguridad interna de las instalaciones del ente petrolero[3].
Legislacion venezolana para impedir la contaminación de las aguas por el petróleo
Sobre la materia es de sumo interés conocer el desarrollo histórico de esta legislación que, fundamentalmente aparece en el país con la incipiente industria petrolera, destacando por supuesto el interés que, desde un comienzo se tuvo sobre la protección de las aguas que eventualmente pudieran ser contaminadas por los frecuentes derrames petroleros, tanto en la fase exploratoria, como en la explotación y en el transporte.
La Ley para Impedir la Contaminación de las Aguas por el Petróleo[4], fue promulgada el 20 de julio de 1936, bajo el gobierno del general Eleazar López Contreras, legislación que rige en Venezuela desde entonces, con la cual, el gobierno nacional trataba de proteger este recurso natural, de las operaciones efectuadas por la empresa transnacional que tenía a su cargo la industria petrolera.
En la actualidad, aún con la industria nacionalizada se mantiene vigente esta ley, pero es evidente que las empresas pertenecientes a PDVSA, han hecho grandes esfuerzos por mejorar los planes de contingencia preparados con anterioridad por las empresas que les dieron origen, y hoy conforman una planificación que, eficiente en el pasado, su puesta en práctica recientemente no fue muy exitosa, tal vez por la confianza en la seguridad de la Industria.
La Ley se desarrolla en apenas 13 artículos, destacando su Artículo 1º que refiere la obligación que tienen las personas o compañías explotadoras de concesiones de hidrocarburos, situadas en las costas marítimas, lacustres o fluviales de la República, o que exploten terrenos cubiertos por las aguas marítimas, lacustres o fluviales y las que transporten dichas substancias, a cumplir estrictamente las medidas ordenadas en la Ley, a fin de evitar la contaminación de las aguas por el derrame de petróleo u otros aceites, lo cual constituye un grave peligro para la salubridad, la riqueza y la comodidad pública.
En el mismo sentido, la ley desarrolla en su normativa, tanto los procedimientos de obligado cumplimiento por las personas que involucra en la obligación, como también, los requerimientos necesarios para evitar el daño ecológico derivado de la actividad petrolera. Igualmente, establece en sus normas, el procedimiento a ejecutar el órgano gubernamental encargado de la vigilancia de su cumplimiento, las sanciones o multas aplicables y la atribución ejecutiva para el dictado de la reglamentación derivada de la norma legal. En cuanto a la acción punitiva, es decir, la acción penal, ésta se encuentra enmarcada en la Ley Penal del Ambiente
[1] Por la necesidad de limitar las acciones para lograr un nivel deseado de desarrollo, se ha impuesto el término “desarrollo sostenible”, con derivación gramatical por traducción, de “sustentable”. Con ambos términos se explica el desarrollo económico y social, que permite hacer frente a las necesidades del presente sin poner en peligro la capacidad de futuras generaciones para satisfacer sus propias necesidades y en tal sentido, mantener e incrementar el nivel del mismo desarrollo. El fundamento del desarrollo sostenible arranca durante las décadas de los 70´y los 80´, cuando el mundo comprendió que los recursos naturales estaban dilapidándose en nombre del “desarrollo”, produciendo cambios imprevistos en la atmósfera, en los suelos, en las aguas, en las plantas y en los animales, al igual que en las relaciones entre todos ellos. Fue entonces necesario, reconocer que la velocidad del cambio era tal, que superaba la capacidad científica e institucional para disminuir o invertir el sentido de sus causas y efectos.
[2] Materia ampliamente desarrollada en el Tema “La Problemática Ecológica”.
[3] Ver: "La Contaminación por el Petróleo".
[4] A pesar de que esta ley no ha sido derogada en forma expresa por ninguna otra normativa, su contenido aparece con tipología delictiva en la Ley Penal del Ambiente y en acuerdos internacionales suscritos por Venezuela.
Profesor at USM
11moBuenos tardes, un bonito cielo despejado, me permito decirle profesor creo que Pacheco No vendrá, pronto en Caracas, de acuerdo a mis estadísticas ambientales, este será un año con temperaturas altas, en promedio en todo el país, aún cuando es un año par 2024; y lo estamos observando en distintas regiones del interior del Venezuela. Veremos
Profesor integrador normativo del novedoso Derecho Ecológico implementado y desarrollado en la Universidad Santa María - CARACAS-VENEZUELA
1y!Mi saludos colegas!
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1yBuenas noches soy Graduado en Rivas tecnico hace 13 años en perforación de pozos petroleros estoy disponible para trabajar en la Guyana esequiba tecnico medio