Publicación de Juan Pablo Soto Araque

Análisis que debe permitir valorar a Adolfo Figueroa LA SOCIEDAD SIGMA - UNA TEORÍA DEL DESARROLLO ECONÓMICO. Alberto Vergara y Adolfo Figueroa están de acuerdo en que la forma en que se ha implementado el liberalismo en América Latina no ha sido suficiente para abordar los desafíos estructurales que enfrenta la región. Vergara defiende una renovación del liberalismo que incluya valores republicanos y ciudadanos, mientras que Figueroa argumenta que solo un cambio estructural significativo, como el que propone para la sociedad Sigma, podría conducir a un progreso más inclusivo. Aunque ambos enfoques enfatizan la necesidad de abordar la desigualdad y la exclusión, no están de acuerdo sobre cómo hacerlo. https://lnkd.in/eKx2sN_i

🌍 Para derrotar a la ultraderecha, las Izquierdas deben ser radicales: Reflexiones de Álvaro García Linera. En una reciente entrevista, Álvaro García Linera, exvicepresidente de Bolivia, compartió su visión sobre cómo los movimientos progresistas y de izquierda pueden enfrentar y derrotar a las nuevas derechas emergentes en América Latina. Según García Linera, es esencial que las izquierdas adopten una postura más audaz y radical para responder a las necesidades y demandas profundas de la población. 🔹 Comprender la Informalidad: Los movimientos progresistas deben enfocarse en los problemas económicos que afectan a las mayorías, abordando las dinámicas y desafíos que enfrentan las personas en situación de informalidad. 🔹 Reformas Profundas: Para neutralizar las propuestas de las nuevas derechas, es necesario avanzar en reformas estructurales en áreas clave: Propiedad, Impuestos, Justicia Social, Distribución de la Riqueza, Recuperación de Recursos Comunes 🔹 Responsabilidad Histórica: El progresismo debe responder con responsabilidad histórica a las demandas populares y construir una alternativa viable y atractiva frente a las derechas. García Linera aboga por un enfoque radical y comprometido con la justicia social y económica. Solo así, los movimientos progresistas podrán neutralizar las propuestas de las nuevas derechas y lograr un cambio duradero en América Latina. ¿Qué opinas sobre estas propuestas? ¿Crees que sirven para enfrentar los desafíos actuales de la democracia en México? #DerechosHumanos #AméricaLatina #Democracia https://lnkd.in/gggVayDZ

Los efectos del auge de la extrema derecha en el mundo El auge de la extrema derecha es un hecho innegable en el mapa sociopolítico actual que impacta en todos los continentes. Poco a poco va transformando la dinámica social y económica de múltiples naciones, pero ¿a qué se debe esta tendencia creciente? El filósofo, activista y uno de los académicos más citados del mundo, Noam Chomsky, habló de lo que hay detrás del auge de la extrema derecha. Aseguró que se remonta a los programas neoliberales de los últimos 40 años que se diseñaron para aumentar el poder y la riqueza de los poderes económicos mundiales, pero dejando el salario de los trabajadores igual que en 1979. “Ha habido mucho crecimiento pero se mantuvo en muy pocos bolsillos”, dijo Chomsky, y por eso la rabia, resentimiento y poca credibilidad en las instituciones facilitan el acceso a los candidatos con el discurso de “Yo los voy a salvar”. El Instituto IFO de Investigación Económica de Alemania lo confirmó en un estudio que reveló que en las regiones con más pobreza y exclusión social hubo un mayor número de votos por la ultraderecha. Pero ¿cuáles son las consecuencias? Un gobierno de extrema derecha podría socavar las instituciones democráticas, limitar la independencia judicial y restringir la libertad de prensa, marginar a las minorías y erosionar principios de igualdad y justicia, mencionó Eduardo Ruiz-Healy para El Economista en el marco de las elecciones de Francia. Entre los efectos más claros de su auge son los discursos nacionalistas y antiinmigración que marcan divisiones étnicas, raciales y religiosas, contribuyendo a un clima de tensión entre grupos sociales. Líderes como Donald Trump en Estados Unidos o Victor Orbán, en Hungría, han implementado medidas estrictas para controlar la inmigración, alegando la protección de la seguridad nacional y los intereses económicos del país. El discurso económico de la extrema derecha a menudo se centra en la protección y crítica de los acuerdos de libre comercio. La implementación de aranceles y barreras comerciales puede llevar a una disminución en la cooperación económica internacional y afectar negativamente a las economías globalizadas. Los partidos de extrema derecha, como menciona The New York Times, dejaron de ser sólo una fuerza opositora para tomar sillas de alto poder. Se trataron de explicar a través del concepto del populismo, como auténticos representantes de un pueblo olvidado, tratando de no hacer grandes promesas a los votantes y presentándose como el menor de los males.

https://lnkd.in/dcmbqR8p CAMBIO DE PARADIGMA DENTRO DEL MISMO SISTEMA Del concepto de ECONOMÍA COLABORATIVA, de principios de siglo, al capitalismo salvaje. PREGUNTAS: ¿En esta nueva etapa, la democracia seguirá siendo factible? Esa es la cuestión de fondo. ¿Qué significa que los acompañantes de Trump digan que su libertad es incompatible con la democracia? ¿Debemos entender que la democracia liberal es una etapa que corresponde a un periodo determinado y que ahora entramos en otra fase en la que esa democracia está en fase de extinción? Josep Ramoneda: "Estamos asistiendo a una corriente que denomino autoritarismo postdemocrático, que implica un desplazamiento de las derechas hacia una radicalització". "No hay que frivolizar la comparación, pero la victoria de Trump tiene similitudes con la de Hitler en Alemania porque señala una etapa que produce un deterioro definitivo de las democracias occidentales. Aquí el fracaso de Macron es muy interesante." "El Partido Demócrata ha sido demasiado blando. Kamala Harris daba muy buena imagen, posiblemente demasiado sofisticada. Esto no ha ayudado, porque en un momento de tanta tensión, cuando la gente se siente insegura, necesita a alguien que le ampare." "¿Seremos capaces como humanidad de frenar lo que califica como una ola de autoritarismo postdemocrático? Solo un 30% de la población vive en estados con sistemas de tipo democrático. El problema es que siga claudicando más gente. No podemos perder el sentido crítico ni entrar en discursos comprensivos respecto a quien abusa o rompe la legalidad democrática.

DERRIBANDO NARRATIVAS Los espacios que hay que ganar El progresismo se ha limitado históricamente a las luchas sociales en las calles, lo que ha llevado a que las derechas y los centros lo perciban como solo un movimiento de activistas, y en el discurso más ofensivo, esos que "quieren todo gratis". Sin embargo, el progresismo está presente en todos los ámbitos y desde estos revindica luchas y debe ocupar los espacios que, hasta ahora, han sido hegemonizados por la derecha, que no los va compartir. Existen empresarios y emprendimientos progresistas, por lo que es necesario crear todo un ecosistema de instituciones con voz que promueva las luchas sociales. En la agenda creativa y cultural se tiene fuerza, tal vez ahí somos una voz potente. Debemos apropiarnos de más espacios porque no se van a compartir y parece que un sector no quiere ese diálogo. Una sociedad no puede permitirse la división ni la autoexclusión. Sin embargo, en Colombia ha prevalecido una visión hegemónica aplastante que ha eliminado, incluso físicamente, a quienes piensan diferente. Los centros, terminan aliados de las derechas, sus intereses siempre han estado ahí. El progresismo debe crear más empresas, desarrollar mecanismos de financiamiento, establecer cámaras de comercio, agremiaciones, medios de comunicación, tanques de pensamiento y seguir vigente en lo académico. Esto llevarlo a un nivel visible. He observado cómo un sector del país reaccionó violentamente ante una opción diferente de gobierno y ha promovido narrativas que impiden cualquier diálogo. Se niegan a aceptar su participación en un modelo poco productivo que concentró la riqueza y dividio la sociedad en clases. A veces pienso que si es tan difícil dialogar con estos ciudadanos y hacerles entender la coyuntura y las realidades, quizá sería mejor separarnos. Sin embargo, reflexiono y me doy cuenta de que esa idea es absurda; caer en ese pensamiento sería imitar la intolerancia que critico. Pero no podemos ni caer en exclusión y tampoco eliminar el dialogo con quién no piense igual. Ese error de las derechas no se puede cometer. La extrema derecha habla de "ganar la batalla cultural"; para equilibrar el poder, el progresismo debe ganar más escenarios. Aunque se hable de división de poderes, en la práctica el Estado sigue estando cooptado por una sola visión. Esto explica las actuales dificultades del gobierno: empresarios que dejan de invertir adrede, políticos y congresistas que bloquean la agenda, jueces y magistrados alineados con esa idea que tumban las reformas, funcionarios de carrera que entorpecen los procesos. Además, la apatía hacia la política se agrava con el giro de algunos jóvenes heterosexuales hacia la extrema derecha. Creen que el poder está en manos de la izquierda, pues han vivido bajo gobiernos progresistas, y como es natural en la juventud, desafían el establecimiento, asumiendo erróneamente quién es el poder realmente.

Importante leerlo para elevar el nivel de discusión. "Ese progresismo en América Latina y Colombia está afincado en la idea de que el mercado, si bien es necesario pues la estatización es inviable, es ineficiente para asignar bienes y servicios que en realidad son derechos como en el caso de la vivienda, la salud o la educación. El principal reclamo del progresismo es la mayor regulación del Estado para corregir las imperfecciones del mercado en la redistribución de la riqueza. Los niveles insólitos de concentración en el mundo, tal como lo demuestran las series de Thomas Piketty (El capital en el siglo XXI). El economista ha mostrado hasta qué punto no ha sido posible una democratización de la riqueza por la dinámica automática del mercado como suponía el liberalismo económico. El 1% más rico acumula casi el doble de la riqueza que el restante 99% de la población mundial."

LECCIONES DE POLITICA NACIONAL 15 Jul 2024 Algunos asocian el FASCISMO a la extrema derecha, y que promueve regímenes totalitarios, nacionalismo exacerbado, y corporativismo que se basa en la organización de los sectores económicos, donde empresas y sindicatos participan en la toma de decisiones, con la tutela del gobierno. Puedo afirmar que en nuestro país no existe ni fascismo ni extrema derecha. Tenemos el COMUNISMO o el SOCIALISMO en su concepción original. El comunismo propone la lucha de clases y la abolición de la propiedad privada en los medios de producción, resultando incompatible con la democracia por su naturaleza también totalitaria. El socialismo, más diverso, busca la distribución de la riqueza y la justicia social, en su versión más moderada, la demócrata, no necesariamente elimina la propiedad privada, sino que la regula, aceptando la economía de mercado. Sin embargo, todas sus vertientes defienden una fuerte participación del Estado y una planificación extensiva para ordenar su crecimiento. Aquí nos damos cuenta de que en Colombia este extremo en particular si está presente. Nuestra Presidencia muestra clara aversión a la propiedad privada y ha tomado pasos efectivos para eliminarla de sectores críticos como el de la salud. Su retórica sobre la lucha de clases y de razas, es constante, agresiva y obsesiva. Rechaza los contrapesos democráticos que limitan su poder. Redistribuir la riqueza y la tierra, argumentando su falta de productividad, enfocandose en las más productivas como son los cultivos de caña de azúcar. Busca que el Estado domine la banca y el transporte aéreo (sin tener idea de cómo lograrlo) y propone proyectos utópicos de trenes que nunca se materializan. Cuando uno observa todo esto, no ve un demócrata, sino un dictador en ciernes. Ni siquiera toma los elementos más moderados del socialismo, sino que incorpora claramente elementos del comunismo y ¡oh sorpresa!, del fascismo. Es evidente que en Colombia no existe extrema derecha. Se puede votar entonces tranquilamente por los líderes de las corrientes conservadoras tradicionales sabiendo que están a salvo nuestras libertades políticas y económicas. Pero no ocurre lo mismo con las otras corrientes radicales, lideradas por el propio Presidente, que ponen en peligro nuestra institucionalidad republicana y están echando al traste nuestros logros económicos. Esa sí es extrema izquierda. Y muy, pero muy peligrosa. Los Colombianos ante esta situación debemos aplicar la GERENCIA ASCÉTICA, busca la perfección mediante el esfuerzo personal y la aplicación de prácticas contra lo que nos aleja de lo ideal, prioritario, optimista, positivo y trabajar en equipo, conscientes de que cuando unimos esfuerzos, multiplicamos los resultados. La llamada gerencia ascética . Esto implica a las empresas la necesidad de mayor claridad en metas, objetivos, resultados y capacidades para lograrlos, así como concentración y foco, sin depender nuestras decisiones de ideologías extremas.

DERRIBANDO NARRATIVAS Vamos a los hechos no a las narrativas Durante varios siglos dos visiones del mundo han venido enfrentándose incluso de forma violenta. Los defensores a la monarquía y los que querían abolirla (Liberales) provocan la Revolución Francesa, que derivó a la liberación y constitución de muchas naciones. Pero luego se subdivide todo, porque esos liberales eran muy diversos, muchos eran burgueses que no querían pagar más tributos y se unieron con el pueblo para derrocar el sistema de un rey único. Sin embargo, el nacimiento de la era industrial separa a estos liberales. Unos defienden la libertades de unos burgueses (comerciantes, industriales) a precarizar, explotar la mano de obra, porque es una libertad que se debe respetar. Esa visión considera que la riqueza proviene de los beneficios. Decían que si los mismos trabajadores en su libertad trabajan, para que limitar la "buena labor del empresario", se les olvidaba que la gente necesitaba comer. Estaba la otra parte el proletariado, algunos empresarios y burgueses que estaban era a favor de los derechos laborales. Pero esos que pedían más derechos, e integridad se les denominó izquierda, y los que estaban a favor que el empresario pudiera reducir el costo laboral lo mayor posible para obtener más ganancias se unieron con los conservadores que añoraban el papel de la corona y se le llamo derecha. Pero la izquierda no es una sola, es muy diversa, amplia. Entonces cuando ese tipo de premisas como la de la foto se dice, sin ningún sustento, se debe a unos sesgos por un momento en cuestión que se termina en 1989 cuando cae el muro de Berlín y la visión Comunista de Stalin, derivado de múltiples factores. Pero esa es solo una visión, no es toda la izquierda. Cuando el señor Oscar Pérez hace esta aseveración tan descarada en la ignorancia hay que recordarle que: China es hoy la nación a ser la potencia del mundo y es una de las tantas visiones de izquierda y que abrazó el libre mercado, los Nórdicos implementaron economías de bienestar, promovido por una visión de izquierda. Los Kibbutz fueron un invento de la izquierda judía que promovió el crecimiento de lo que hoy es Israel. Afganistan pudo lograr un crecimiento cuando implemento medidas del socialismo antes que fuera derrotado por los fundamentalistas pagados por EEUU por miedo a que se expandiera el comunismo. Varios presidentes en el mundo han sido progresistas que son otra de las tantas visiones de la izquierda y han dejado a sus países bien. Por su puesto estan los casos contrarios. Así como la derecha ha tenido igual gobiernos buenos, han tenido malos. Porque la corrupción, la codicia, la ineficiencia no es producto de las ideas. Son los seres humanos los corruptos e ineficientes. Las personas que hacen este tipo de afirmaciones no se informan y además no entienden la política, y promueven sesgos. Como también hay sesgos promovidos desde las izquierdas a las derechas. Y si hay un bloqueo y golpe....

De acuerdo en muy buena parte con el columnista. Pero no excluyo a las posturas de centro ni a la derecha moderada. Comparto plenamente en que pretender implantar en Colombia un modelo históricamente fracasado, basado en paradigmas fallidos propuestos por pensadores que si bien fueron idealistas, no puede decirse que tuvieran una visión amplia y sistémica para comparar beneficios y males del capitalismo con los ideales beneficios propuestos en sus teorías pero insostenibles por no considerar aspectos de la economía y el desarrollo,productivo que son necesarios para hacer sostenible a la sociedad. Tampoco veo conveniente la oscilación del péndulo hacia una derecha extrema, que si bien no destruye la economía, acapara en unos pocos los beneficios de la creación de la riqueza, termina privando a las mayorías de los resultados de esfuerzos colectivos que deben traer como consecuencia beneficios colectivos proporcionales al esfuerzo realizado para producirlos. Debemos avanzar hacia un modelo generoso en oportunidades, pero exigente en cuanto a dar a cada quien lo que se merece con base en su esfuerzo y contribución.

Comparto la nota "La «batalla cultural»: El consolidado de ideas que «encarnan» sectores ultra de derecha e izquierda", en la cual participo con algunos comentarios al respecto: "se trata de una compleja estrategia de reconfiguración hegemónica que busca modificar los sentidos comunes, redefinir marcos interpretativos y naturalizar posiciones ideológicas. En fin, de lo que se trata es de ponerse en la posición de definir qué es la realidad, y cómo ella funciona". Se puede acceder a la nota completa en el siguiente enlace: https://lnkd.in/e3nFuiwS