4 años de aprendizajes

A los 18 años  comencé a estudiar la licenciatura en Comercio Internacional por sugerencia de mi directora del colegio, quien entonces me dijo “no lo dudes, este tema es el futuro”. Sin pensarlo mucho, y con la ayuda de mis padres, tomé su consejo y empecé un recorrido que hoy me llena de emoción.

Hace 12 años me sumé al sector público desde el Gobierno de la Ciudad y tuve el privilegio de liderar excelentes equipos de profesionales. En estos últimos cuatro años me desempeñé como Secretaria, primero en el Ministerio de Agroindustria y luego en el Ministerio de Producción y Trabajo. Cada uno de esos espacios fueron una instancia de aprendizaje que me hicieron redescubrir mi vocación por la gestión de desafíos colectivos. Ahora se termina una de las etapas más movilizantes de mi vida profesional y personal, por lo que antes de trabajar en lo que se viene quise dedicarle un momento para repasar lo vivido.

Aperturas de mercados, negociaciones, plan Argentina Exporta, Acuerdo Mercosur - UE, herramientas de facilitación, simplificación de trámites, misiones comerciales, son todas acciones que llevamos adelante para fomentar el comercio exterior. Lo hicimos pensando en agregar valor a las economías regionales, en ayudar a que más PyMEs miren el mercado internacional como un camino posible y para que nuestro país realmente pueda crecer.

Detrás de cada uno de estos avances, y digo avances porque soy consciente de que hay que seguir trabajando, está la labor incansable de los distintos equipos y el vínculo que logramos establecer con el sector privado, generando espacios de escucha y diálogo.

Recuerdo cada encuentro con los sectores productivos en el entonces Ministerio de Agroindustria. Esas reuniones donde tal vez no éramos muchos ni teníamos todas las herramientas, pero fueron la base para identificar nuevos mercados y abordar los desafíos de cada sector. Ese trabajo sostenido en el tiempo hoy se traduce en más negocios para nuestras empresas en mercados donde antes era impensado acceder. China es uno de ellos, donde abrimos más de 12 mercados del sector agro.

Y también fueron espacios para tener la sensibilidad de entender lo vital que es estar cerca de las empresas, más aún cuando la gran mayoría de las exportadoras son PyMEs. “Una mala decisión del gobierno nos puede dejar fuera del sistema”, me decían en cada encuentro y lo recordé en cada decisión que tuve que tomar.

El paso al Ministerio de Producción y Trabajo fue un desafío complejo y con grandes gratificaciones. Ya no trabajábamos para un solo sector como antes, ahora debíamos abordar a todos. Y fue allí donde viví momentos que jamás hubiera imaginado, como el instante en el que logramos cerrar el Acuerdo #MercosurUE después de 20 años de negociaciones. Fue una responsabilidad y un orgullo enorme haber tenido un rol concreto en un equipo negociador al que admiro. Cuando los desafíos son tan grandes y no hay recetas, el camino es entregarse al equipo y dar lo mejor para construir algo superador. Por eso celebro la entrega con la que defendimos el trabajo de nuestras economías regionales y ojalá pronto empecemos a ver los resultados de una herramienta muy poderosa: el diálogo.

En este sentido fue muy importante integrar a la diplomacia como parte de la estrategia exportadora nacional. La Cancillería y las embajadas argentinas en el exterior fueron socios clave que se complementaron con la agenda de Promoción de la Agencia de Inversiones.

Aún tenemos muchos desafíos pendientes. La inserción de mujeres en comercio exterior es una agenda que requiere atención profunda. Las universidades necesitan articular sus contenidos con la dinámica y desafíos que presentan las negociaciones del mundo actual. Las PyMEs son y seguirán siendo la base de crecimiento de nuestro país, es por ello que debemos seguir recorriendo cada provincia para concientizar a cada empresa de la importancia del comercio exterior y dotarlos de todas las herramientas necesarias para aumentar su inserción internacional.

Fueron años fundacionales. Desde lo profesional, afianzando mi pasión por mejorar el comercio exterior de la mano de un gran equipo; desde lo político, acompañando al Presidente Macri en todas las misiones oficiales que fueron disparadores de numerosas agendas bilaterales de comercio e inversiones; desde lo personal, contando con el apoyo de mi familia, amigos y colaboradores que me acompañaron en cada decisión. Mención especial para mis mentores Félix Peña y Jorge Castro, quienes fueron y serán mis mejores profesores.

Mi compromiso es seguir trabajando para construir el futuro de nuestra querida Argentina, un país lleno de oportunidades, con una geografía única para el desarrollo de productos y servicios de calidad, y sobre todo, con recursos humanos muy calificados. Orgullosa de lo que logramos juntos, ¡GRACIAS!