5. Ley de La Adición
La Ley de La Adición habla de añadir valor al servir a los demás. Hoy tienes el privilegio de vivir un día más, en un puesto de liderazgo que es un puesto de servicio a los demás: ¿Qué estás llevando a la mesa para compartir con los demás, con tu equipo, con tu organización?
Es de naturaleza humana el tema de la dualidad. Parece que todo tiene que ser blanco o negro, bueno o malo, suma o resta. Al hacer consciente esta situación, accionamos nuestro liderazgo para sumar como una opción. La otra opción aunque es evidente, se antoja casi inverosímil. Sin embargo, recordemos que si el principio de la dualidad es inherente en el ser humano, entonces también puede surgir el lado oscuro. Y este se puede ver reflejado en la Ley de La Adición. Es aquí cuando vemos la incongruencia de una enorme cantidad de líderes, sobre todo en el ámbito de la política. Hoy esta incongruencia abunda en todo el mundo. Ya es aceptado como el estatus quo de nuestro país. Ya no nos asombran las nuevas noticias de los escándalos de corrupción, de enriquecimiento ilícito de nuestros gobernantes. Nos parece de lo más normal. Una total confusión en su máxima expresión de La Ley de la Adición al únicamente satisfacer intereses personales, sin ninguna adición a los demás. A veces, perfectamente disfrazados de buenas acciones o con justificaciones internas de cualquier índole.
La Ley de La Adición, establece la siguiente pregunta: ¿Estás haciendo que la situación sea mejor para la gente que lideras? La respuesta debe ser un rotundo SÍ para tener validez. Si hay una mínima duda o surgen condicionantes, entonces esta ley deja de cumplirse. Como líder, esta ley dice que eres dador o eres quitador. Le das a la gente o le quitas. El 90% de los líderes que le restan a la gente, lo hacen sin darse cuenta de que están sustrayendo. Así como la adición (dar) genera eventualmente la multiplicación, el líder que resta o quita, llevará inevitablemente a la división.
Recordemos también que el 90% de los líderes que dan (agregan valor a su grupo o equipo) lo hacen de manera intencional. Esto resalta y toma gran valor en esta reflexión por el hecho de que el ser humano es egoísta por naturaleza. Es lo más natural y lo más normal estar seguro de que yo estoy bien primero y después me preocupo por los demás. Pensar en los demás, darles, requiere salir de la zona cómoda personal. El líder tiene el hábito de salir de la zona cómoda de manera diaria al pensar y actuar dando valor a los demás. Por esto el líder se vuelve atractivo a los equipos u organizaciones. El líder se siente cómodo estando fuera de la zona cómoda y al adicionar, eventualmente se multiplica el resultado. La esencia del ser humano percibe enorme satisfacción cuando da a los demás sin expectativas personales. Es ahí donde el alma encuentra su verdadero valor y trascendencia, es ahí donde la necesidad del ego desaparece.
“Sólo una vida vivida al servicio de los demás es la que vale la pena vivir.” – Albert Einstein.
Agregamos valor y cambiamos vidas SÓLO CUANDO:
1. Verdaderamente valoramos a los demás. Cuando se está en posiciones de liderazgo, no se tiene ningún derecho de tomar ventaja de la gente. Esto es tan delicado e importante. Un líder no puede estar tan ocupado que no tiene tiempo ni para saludar. La gente de su equipo u organización es el trabajo y ocupación principal de cualquier líder que desee seguir con éxito esta ley.
2. Nos hacemos más valiosos para los demás. Un ser humano no puede dar lo que no tiene. ¿Qué tenemos de valor que podamos ofrecer a los demás? ¿Puedes ofrecer reflexión y perspectiva adquiridas a través de tu experiencia?
3. Sabemos e interactuamos lo que otros valoran. ¿Cómo nos damos cuenta de lo que otros valoran? Escuchando. Lo que parece que todo mundo sabe pero que muy pocos líderes practican: Escuchar de manera activa.
4. Hacemos cosas que Dios o el Universo o La Naturaleza valoran. Podría no ser obligatorio para un líder ser creyente. Sin embargo, a pesar o no de las creencias, existe un ser superior, sin tintes religiosos por así decirlo. La madre naturaleza, el poderoso universo, son precisamente eso. Respetamos la naturaleza y al universo, la naturaleza y el universo nos abrazarán como respuesta.
Es muy impresionante cuando grandes compañías, o una persona de mayor jerarquía en la organización nos pregunta que puede hacer por nosotros o cómo nos puede ayudar. No es común hoy en día. A ti como líder, no necesariamente te sugiero bolearle los zapatos a un subordinado, pero ¿has observado sus zapatos? Probablemente ha caminado más de lo que te imaginas y algo que podría apoyarle en ese momento es algo de comprensión y empatía de tu parte, un poco de escucha activa. Es muy probable que esté en tus manos apoyar un poco dándole un enorme valor con bajo costo para ti, limpiando cualquier conflicto de relaciones que pudiera estar pendiente por resolver. En ese momento en que se limpian las agendas erróneas de una relación de liderazgo, es entonces cuando se allana el camino para resultados increíbles.
Qué tengas un excelente día,
Tomás García
Coach de Negocios