Análisis sobre las especies exóticas introducidas en la zona del Valle de Toluca - México

Análisis sobre las especies exóticas introducidas en la zona del Valle de Toluca - México

La globalización y el incremento en la eficacia del transporte — terrestre, aéreo y acuático — han propiciado la entrada masiva, intencional o accidental, de especies no nativas a los ecosistemas. No se pueden desviar las vías de dispersión natural, como el caso de los ríos, cuyo movimiento entre cuencas es libre, o las corrientes marinas que facilitan el movimiento sin control de miles de especies, y la vía aérea para el caso de las aves.

La invasión por especies exóticas representa un fuerte agente de cambio global y está considerada como la segunda amenaza a la diversidad biológica. Ante un problema de prioridad internacional que daña severamente el medio ambiente y provoca elevados costos ecológicos y socioeconómicos, la educación aparece como el mejor instrumento de prevención y gestión oportuna. Las especies invasoras exóticas son cosmopolitas y están representadas en todos los grupos taxonómicos, incluyendo virus, hongos, algas, musgos, helechos, plantas superiores terrestres y acuáticas, invertebrados terrestres y acuáticos, anfibios, reptiles, aves y mamíferos.

En el Área de Protección de Flora y Fauna Nevado de Toluca, los principales problemas registrados son la destrucción o fragmentación del hábitat originada por el cambio de uso del suelo constituye por sí mismo un factor de riesgo para las poblaciones de flora y fauna silvestre, por desplazamiento, reducción de su área de distribución, eliminación de sitios de alimentación, refugio y reproducción, modificación de la cadena trófica, entre otros.

Eliminación de especies: Diversas especies de fauna silvestre, principalmente reptiles y anfibios, son exterminadas bajo el argumento de que representan un riesgo para las poblaciones humanas y el ganado por tratarse de animales venenosos o falsamente etiquetados como venenosos, por su aspecto o parecido con especies venenosas. Estas prácticas alteran los procesos ecológicos y evolutivos entre los que se encuentran la sucesión ecológica, el reclutamiento de individuos a las poblaciones de fauna nativas y la continuidad de las redes alimenticias, entre otros procesos.

Por otro lado, en el cráter del volcán Nevado de Toluca se encuentran las lagunas conocidas como El Sol y La Luna, lagos cráter formados por el aporte de agua de lluvia en verano, la nieve en invierno y el agua de deshielo en primavera; son reservorios exclusivos de una gran diversidad de flora (fitoplancton) y fauna (zooplancton), típica de lagos alpinos. Este ecosistema acuático ha sido fuertemente impactado por las actividades turísticas (basura, introducción de grasas y detergentes, nado), y en el pasado reciente, por la arqueología submarina. Destaca también la introducción de especies exóticas como la trucha arcoíris (Oncorhynchus mykiss). La trucha arcoíris se encuentra inscrita en el listado de las 100 especies exóticas invasoras más dañinas del mundo, publicada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN),93 y registrada entre las especies invasoras de alto impacto a la biodiversidad, identificadas para México. El hábitat acuático de las lagunas cráter se ha fragmentado por el aumento en el aporte de sedimentos a los lagos, por el cambio en las condiciones físico-químicas y biológicas del agua y por la disminución del área de captación de agua.

La diversidad de condiciones de temperatura, humedad, suelos, altitud, microclima y vegetación del Nevado de Toluca, ofrece una heterogeneidad de ambientes en los que pueden establecerse y desarrollarse exitosamente una gran diversidad de plantas y animales incluyendo especies invasoras y exóticas. Entre las plantas invasoras destacan el muérdago enano amarillo (Arceuthobium globosum subsp. grandicaule), muérdago enano negro (A. vaginatum subsp. vaginatum) y muérdago verdadero (Psittacanthus sp.) cuyo hospedero principal es el pino ocote, pino amarillo o pino chino (Pinus hartwegii), además del muérdago enano del oyamel (A. abietis-religiosae) que prolifera sobre el oyamel (Abies religiosa).

Impactos generados por la invasión:

Los impactos ocasionados por la presencia de especies invasoras exóticas son de gran intensidad, generalmente irreversibles y pueden considerarse más perjudiciales para las especies y los diversos ecosistemas que la mismadestrucción y degradación de los hábitats. El creciente interés en el crecimiento económico, las actividades comerciales, el turismo y otras actividades humanas ha creado más oportunidades para la introducción y el desplazamiento de especies foráneas de manera accidental o deliberada.

La invasión de especies exóticas tiene consecuencias ecológicas y socioeconómicas. El costo ecológico está representado por la pérdida irreversible de especies y ecosistemas nativos que fácilmente se ven reemplazados por la presencia dominante y la habilidad competitiva de las especies invasoras. De manera general, la introducción de fauna exótica puede traer como consecuencia la modificación de los ambientes en que se encuentre, ya que estos evolucionaron sin su presencia. Es posible que la especie compita por recursos alimenticios tales como pastos y plantas arbustivas o pequeños árboles con otros ungulado, llegando a afectar sus poblaciones. En caso de que sus poblaciones crezcan demasiado podría llegar a alterar la dinámica poblacional de algunas plantas y por consiguiente su abundancia y la composición de las comunidades vegetales de la zona. Por otro lado, esta especie representa una presa adicional para depredadores como los pumas y coyotes. Indirectamente, la presencia de esta especie podría ejercer un impacto negativo sobre sus depredadores potenciales (coyotes, jaguares, pumas y lobos), ya que puede promover campañas para el control de éstos. Por último, esta especie puede ser un portador y transmisor potencial de enfermedades y parásitos que afecten a la fauna nativa.

Bibliografía:

SEMARNAT. 2013. Decreto que reforma, deroga y adiciona diversas disposiciones del diverso publicado el 25 de enero de 1936, por el que se declaró Parque Nacional la montaña denominada “Nevado de Toluca” que fue modificado por el diverso publicado el 19 de febrero de 1937. Diario Oficial de la Federación, martes 1 de octubre de 2013. México, D. F.

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