Anatomía del rechazo emocional
Amor 𝗡𝗢 correspondido, traición o rechazo💔
¿Sabías que, las personas rechazadas emocionalmente experimentan en su cerebro los mismos cambios que alguien con un trastorno depresivo?😮💨
Si te interesa este tema, lee lo que voy a escribir a continuación. Espero que, te pueda servir de ayuda para entender el comportamiento y los sentimientos que pueda estar experimentando alguien de tu entorno o incluso tu mismo.
Nos encontramos en una época en la que, para verificar que un dolor o sufrimiento ajeno es más válido que otro, debe de haber una verificación por parte de un experto. Y con esto no me quiero referir a que no acudamos a un experto si sentimos que algo va mal, porque en muchos o en la mayoría de los casos, es imprescindible una opinión experta de psicólogos, psiquiatras u otros. 👩🏻⚕️
Pero…¿Esto quiere decir que no podemos experimentar síntomas iguales a los que tendría una persona con un trastorno depresivo sin tenerlo?🤔 Lee lo que te voy a contar a continuación sobre los cambios que experimentamos a nivel físico, cerebral y emocional causados por un rechazo o una traición amorosa.
𝗔𝗰𝘁𝗶𝘃𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗱𝗲𝗹 𝘀𝗶𝘀𝘁𝗲𝗺𝗮 𝗟𝗜́𝗠𝗕𝗜𝗖𝗢.
Me imagino que, si te hablo de regiones del cerebro cómo la amígdala o el hipocampo, rápidamente las asociarás con la palabra “emoción” y esto es, porque éstas áreas están especialmente ligadas con el estrés o el miedo, por lo que, se activan ante las situaciones que nos generan éstas emociones para preparar y proteger al cuerpo ante futuras situaciones amenazantes o desagradables. De esta forma, éstas áreas nos ayudan a recordar situaciones del pasado con un componente emocional fuerte y almacenar en nuestra memoria que, para futuros escenarios, si no queremos sufrir, deberemos actuar y enfrentar de manera diferente a estas situaciones que nos generan miedo, ya sea huyendo, luchando o evitando.
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𝗗𝗶𝘀𝗺𝗶𝗻𝘂𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗦𝗘𝗥𝗢𝗧𝗢𝗡𝗜𝗡𝗔 𝘆 𝗗𝗢𝗣𝗔𝗠𝗜𝗡𝗔.
Estas sustancias son realmente “famosas” por producir en nuestro organismo sensaciones positivas y es que, tanto la serotonina, cómo la dopamina, contribuyen en nuestra regulación emocional y del placer. Estoy segura de que alguna vez has escuchado de forma coloquial que la serotonina es, la hormona de “la felicidad”, por lo tanto, una disminución de ésta podría producir en nosotros lo contrario a un estado enérgico y lleno de felicidad. La dopamina es conocida por ser ese “motor” que nos impulsa y nos motiva a experimentar cosas nuevas, conocer gente y tener interés por ello. Por estas razones, disminuciones en serotonina y dopamina tras una situación de rechazo amoroso dan resultado a estados de ánimos muy decaídos y sin intereses, con falta de motivación para realizar sus actividades diarias con normalidad y falta de energía; todos síntomas muy similares a los que experimentaría una persona con un trastorno depresivo.
𝗜𝗻𝗳𝗹𝗮𝗺𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗰𝗲𝗿𝗲𝗯𝗿𝗮𝗹 𝗮 𝗰𝗮𝘂𝘀𝗮 𝗱𝗲𝗹 𝗲𝘀𝘁𝗿𝗲́𝘀 𝗰𝗿𝗼́𝗻𝗶𝗰𝗼.
El estrés perdurado en el tiempo por algo que nos preocupa constantemente, nos mantiene en alerta, esperando que algo negativo nos pueda pasar e intentando estar preparados para protegernos ante esas amenazas. Pero esta dosis de estrés continuada, no es en absoluto algo adaptativo ya que, puede producir en nuestro organismo un síntoma psicosomático como es la inflamación de alguna zona de nuestro cuerpo, como defensa a estos niveles elevados de cortisol causados por el estrés crónico.
𝗣𝗿𝗼𝗰𝗲𝘀𝗮𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗶𝗻𝗳𝗼𝗿𝗺𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝘆 𝗽𝗲𝗿𝗰𝗲𝗽𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀 𝗡𝗘𝗚𝗔𝗧𝗜𝗩𝗔𝗦.
El rechazo puede afectarnos en la forma en la que percibimos las cosas, os pongo un ejemplo: si comenzamos a asociar que los acontecimientos negativos que nos suceden (rechazo o traición) son causados por nosotros mismos, o mejor dicho, por una causa interna, la cuál, no podemos modificar puesto que, nuestra personalidad o forma de actuar, es estable en el tiempo, comenzamos a experimentar cada vez más situaciones negativas, dando por hecho que tenemos la culpa de todas ellas y esto, podrá proporcionarnos pensamientos automáticos muy negativos sin ningún tipo de control y distorsionando totalmente nuestra realidad, cómo si estuviéramos sufriendo un trastorno depresivo.