Aprendido en 2019

Desde que hace más de diez años escuché a Leila Navarro decir que nunca se equivocaba, que ella, “o acertaba, o aprendía”, lo hice mío. Este año hemos trabajado en metodologías ágiles, en las que uno de los mantras es “o gano o aprendo”. Con todo esto, lo que no me ha salido bien este 2019, es aprendizaje para 2020 y siguientes.

Hace también unos años, implantamos lo que por entonces era un pionero modelo de evaluación 360 en el banco en el que trabajaba. Lo primero que me llamó la atención fue que el CEO publicó las áreas de mejora que, quienes le evaluamos, le quisimos manifestar. Su sucesor, año tras año, hizo lo propio. De esta especial forma de hacer de Juan Arena y Jaime Echegoyen, siempre admiré la valentía con la que publicaban a toda la compañía, sólo lo que quienes evaluaban pensaban que debían mejorar.

Por eso hoy, en lugar de hablar de nuestros éxitos este año, quiero publicar los errores las enseñanzas aprendidas.

• Control de los tiempos. Aprendimos que no todo el mundo tenemos los mismos “tempos”, y que no siempre por querer ir más rápido se llega antes.
• Calidad total. Aprendimos que no podemos entregar “cualquier” cosa, sino lo mejor que sepamos hacer. En todo lo que hacemos. Aunque suele pasar casi siempre, no podemos olvidarlo.
• Dejar más espacios vs. ser más exigente. Este es un aprendizaje personal cada año, pero este no ha sido distinto. A veces, por dejar más espacios, se pasan por alto algunos resultados esperados. No exigir a equipo no le hace un favor, les hace peores. La exigencia no está reñida con la libertad para hacerlo.
• Terminar de aprender a trabajar deslocalizados. Seguir avanzando en nuestra particular manera de trabajar deslocalizados, sin necesariamente vernos físicamente en semanas, no ha sido sencillo en momentos. Pero creemos que es la manera, creemos en ello, y sólo tenemos que mejorar el modelo.
• Contar más con colaboradores. 2020 debe ser el año en que nuestros excepcionales consultores tengan más horas de vuelo. Han demostrado unos resultados excelentes con clientes, y es momento de que empiecen a tomar más peso en nuestra estructura.
• Poner más el foco en el interés en las personas de nuestros clientes. Aunque está en nuestro ADN, necesitamos volcarnos aún más en las “personas del cliente”. Escucharles mejor, conocerles mejor, y acompañarles en más retos a lo largo de este año. Si desde hace años algunos están en el “Customer Centric”, y otros han empezado hace poco con el “People Centric” en dpersonas estamos enfocados en el “People-customer centric”. Por ellos trabajamos para que la empresa consiga sus resultados.

Un año más, nuestro "claim" sigue estando vigente:

“Ayudamos a tu Empresa en sus Procesos de Cambio, trabajando con quienes los hacen posible: las Personas”

No quiero dejar de recordar que este año hemos publicado "Eleven", con once años de reflexiones, por si te apetece comprarlo o regalarlo https://amzn.to/2ZHbfC7

Feliz 2020!!!!!