Autoliderazgo
Jimena Cuesta Rodríguez
Lic. en Gestión de Recursos Humanos. Coach Ontológico y Ejecutivo.
"Sé el cambio que quieres ver en el mundo". Gandhi.
Autoliderazgo: cómo utilizar nuestra habilidad de influir en nosotros mismos a partir de nuestros pensamientos, emociones y acciones.
El cambio comienza por casa, se dice en Argentina. Comienza en nuestro interior, en nosotros, y solo a partir de ahí, podemos mirar hacia afuera con empatía e identificar o interpretar el mundo con la consciencia de saber que lo hacemos desde lo que somos. “El darnos cuenta” es lo que hace LA diferencia.
El autoliderazgo, no es solo primordial desarrollarlo en los líderes o en las mismas organizaciones, este es solo un aspecto de nuestro "estar haciendo", pues antes debemos liderarnos como personas. Conectar con lo que somos en esencia, identificar nuestro propósito y explorar el universo de emociones para descubrir y diseñar nuestros estados de ánimo que nos permitan relacionarnos con otros.
En este sentido, el autoliderazgo se lleva a cabo "de adentro hacia afuera". La auto consciencia o auto conocimiento requiere la capacidad de comprender los propios valores, deseos, perspectivas, creencias, fortalezas y debilidades. Saber quiénes somos y cómo interpretamos el mundo.
La Automotivación
La automotivación, a partir de este conocimiento de nosotros mismos, surge como faro, luz o norte que nos ilumina siempre el camino hacia nuestro propósito y qué nos impulsa en el día a día para lograr nuestros sueños, aunque fundamentalmente, para ser coherentes en nuestras elecciones, en nuestro hacer.
La Autoconfianza
La autoconfianza proviene de este conocimiento conjunto de ambos elementos: al estar al tanto de “ti”, te vuelves seguro y tienes a disposición la conexión más fuerte que es Hacer desde tu Ser, o dicho de otro modo, tienes la posibilidad de expresar tu estar siendo desde tus acciones.
Por último, la gestión emocional de nuestros impulsos que nacen en el cerebro límbico, y que gatillan gran parte de nuestro comportamiento, resulta ser la gema del mundo moderno y para ciertas generaciones, más aún. Reconocer, identificar, etiquetar, nombrar y recién ahí, buscar gestionar las emociones para que sean funcionales a nuestro accionar diario, resulta ser parte de las competencias más buscadas en las organizaciones, y que repercute directamente en nuestras relaciones personales.
El camino del autoliderazgo
Quienes recorren el camino del autoliderazgo no solo se descubren a sí mismos, sino también logran apreciar a los demás desde una mirada más genuina y empática. Cuando realmente te comprendes a ti mismo, puedes identificar estos aspectos en tus colaboradores, amigos, pareja, y demás relaciones.
No podemos ver afuera aquello que no somos capaces de encontrar en nuestro interior.
Puede no ser un camino fácil, como todo nuevo aprendizaje, tendrá sus idas y vueltas, sus trabas, nuestro cerebro buscará que desistas, te dirá “por ahí no, ¿para qué?” intentará que permanezcas en tu zona de comodidad. Si bien estamos en constantes cambios, biológicos y sociales, estos requieren a nuestro organismo muchísimo esfuerzo y energía, y es por ello, que buscará boicotearlo.
Para ello, los hacemos conscientes, definimos una meta, nos aferramos a nuestro propósito, y emprendemos el camino. Vos, ¿estás preparado?
Desde el Coaching Ontológico puedo acompañarte en este proceso de autodescubrimiento y de crecimiento personal, para que puedas primer Ser, luego Hacer y, finalmente, Tener los resultados que estás buscando.