BACTERIAS DE INTERÉS IV: Lactobacillus acidophilus

Es curioso que tanto en el mundo microscópico como en el macroscópico sea objeto prioritario de nuestra atención aquello que “nos hace mal”. Esto puede parecer lógico, ¿quién no quiere saber qué le perjudica para poder combatirlo? Pero, ¿Y lo que nos hace bien? Hoy le toca tener su momento a una especie que aparece en algo tan común y cotidiano como un yogur.

Lactobacillus acidophilus: Características interesantes

L. acidophilus es una bacteria del género Lactobacillus (gram negativa) y es considerada no sólo beneficiosa sino también necesaria para una salud humana de calidad. La bacteria se caracteriza por la producción de ácido láctico (mediante fermentación) y la acidificación posterior del medio. Se considera que su pH óptimo de crecimiento es de 4 a 5 y su temperatura de unos 45 ºC.

La bacteria encuentra un medio propicio para el crecimiento en diversas clases de alimentos. La más famosa es sin duda el yogur. En este producto, es usado junto a Streptococcus thermophilus durante su proceso de fabricación. OJO: No sólo habita intestinos animales, sino que también habita el intestino humano, boca y la vagina.

Usos industriales: Más allá del yogur, ¿Qué puede aportar esta especie?

·        Producción de vitamina K. Este compuesto es sintetizado en la forma menaquinona (vitamina K2). Deficiencias en vitamina K vienen asociadas a problemas con la coagulación (hemorragia interna masiva) con el riesgo que ello implica.

·        En medicina natural esta bacteria es usada para prevenir o tratar diarreas no complicadas y aquellas también causadas por antimicrobianos que destruyen la flora intestinal habitual.

·        Usadas en situaciones de estreñimiento. Si la bacteria es útil en pacientes con diarrea, también lo está demostrando en pacientes que sufren de la patología inversa. Sigue el mismo principio que el punto anterior: FLORA MICROBIANA SANA PARA UNA SALUD DE CALIDAD.

·        Actualmente está en estudio su papel para prevenir las vaginosis bacterianas. Los suplementos de esta bacteria ayudan a reponer la flora natural de la vagina. Al reponer el stock bacteriano, se reequilibra la zona y se evita la proliferación de otras especies que pueden ser patógenas.

Os dejo una página con todas las posibilidades del uso de esta especie:

https://medlineplus.gov/spanish/druginfo/natural/790.html

Esta especie lleva con nosotros desde el antiguo Egipto y los primeros yogures. Hoy en día, la genética y la biología molecular nos han ayudado a conocer mejor a esta bacteria y a aprovechar sus características fisiológicas. Aún queda mucho camino por explorar y os invito a todos a reflexionar sobre estas bacterias beneficiosas, pensad en el vinagre, etc...