Cómo evitar que una discusión se convierta en conflicto. Solución al reto de la semana pasada.
Óscar Fernández Orellana
Yo pongo las técnicas, tú pones la práctica. Formo para que cuando te comuniques, impactes, convenzas y vendas mejor tus ideas. Llévate un regalo aquí: interaccionhumana.es/suscribete
El conflicto es inherente a la condición humana. En el artículo de la semana pasada te proponía un reto a partir de una situación ficticia. Te pedía que contestases a dos preguntas.
– Qué ha pasado para que una discusión de trabajo se haya convertido en una pelea y,
– Si tú fueses alguno de los protagonistas, ¿qué harías para volver a conducir la discusión al éxito?
En este artículo voy a ofrecer mis respuestas a estas preguntas y voy a indicarte qué propone Aristóteles desde la retórica para evitar que un intercambio de opiniones se convierta en un conflicto.
Vamos allá.
PARA QUÉ SIRVE LA RETÓRICA.
Muchas personas piensan que la retórica sirve simplemente para hablar bonito o para expresarse correctamente pero, en realidad, ese no es su fin último.
La retórica es, fundamentalmente, una disciplina a partir de la cual tener un mejor dominio de las relaciones humanas, incidiendo desde uno de sus aspectos más cruciales, la comunicación oral o escrita.
Tener control sobre las relaciones humanas significa, para mí, tener claro qué objetivo persigues a la hora de comunicarte y saber cómo conseguirlo. Este control de las relaciones te llevará a saber qué está pasando en cada momento en el proceso de comunicación, si te estás acercando o alejando de tu objetivo.
En definitiva, la retórica se ocupa de poner las estructuras lingüísticas adecuadas para conseguir tus objetivos comunicativos.
Date cuenta de que esto supone que quien domina la retórica, posee una muy buena capacidad para organizar sus ideas y, por lo tanto, la capacidad para pensar ordenadamente.
En este punto, tal vez te estés preguntando qué tiene eso que ver con una discusión, un conflicto y con Aristóteles. Te lo explico.
LOS ÁMBITOS DE LA RETÓRICA.
Hace 2.500 años que Aristóteles determinó que la retórica servía para tres cosas.
Sigue leyendo