Cómo hablar en público: Dos conceptos que cambiarán tus presentaciones
Fabián González
MBA | Consultor | Escritor | Conferenciante en #marcapersonal #emprendimiento #productividad personal #liderazgo Formación Incompany para directivos y equipos de trabajo
Hoy continuaré trabajando en el arte de PRESENTAR, una de las 5P de la MarcaPro. Personalmente creo que desarrollar la habilidad de presentar y hablar en público, permitirá fomentar tu marca personal y hacer de ella una marca que se anticipe, vaya siempre adelante y marque esa diferencia que queremos crear como profesionales.
Quiero hablar de 2 conceptos importantes en este sentido. El primero tiene que ver con el nivel de afianzamiento del proceso de aprendizaje y el segundo con un cambio de paradigma.
Edgar Dale creador de la pirámide del aprendizaje, enseña que después de dos semanas de recibir una formación la gente suele recordar el 5% de lo que escucha, así que hay mucha información de la gente recibe que simplemente se olvida o nunca se tuvo clara. Te recomiendo que revises esta pirámide sobre todo si te dedicas a la formación.
Hay dos tipos de métodos que se utilizan en una presentación y estos son: los métodos pasivos y los métodos activos. Cuando hablamos y decimos algo a nuestra audiencia, estamos teniendo una actividad pasiva y después de dos semanas, la gente solo recordará el 5%, es decir, se acordará de 3 frases o unas cuantas palabras. Si incrementamos el nivel de involucramiento de las personas y buscamos que no solo escuchen, sino que también vean una imagen, un gráfico, un vídeo, dos semanas después, la gente podrá recordar el 20% de lo que vio. Si logramos que las personas escuchen y vean una información al mismo tiempo, la tendencia es que recuerden el 30% de lo que aprendieron. Es decir, no solo trabajamos por un lado la visión y luego la escucha, sino que integramos las dos cosas al mismo tiempo. Mi recomendación es que en cada presentación busques que la gente pueda, no solo escuchar tu mensaje, sino que, entregues al mismo tiempo ese mensaje a través de una diapositiva, una imagen, un gráfico...
Hasta aquí, hemos hablado de buscar que la gente recuerde un 30% de lo que has dicho o enseñado, pero aún sigue siendo poco, ya que siguen siendo actividades muy pasivas, la gente no está haciendo algo adicional, simplemente está escuchando, viendo y quizás algunos tomando nota.
Por eso es importante que pasemos a un siguiente nivel, al método activo o de las actividades activas, y tiene que ver con buscar que las personas hagan algo, que la gente pueda involucrarse teniendo una conversación, por ejemplo. Si podemos lograr que las personas compartan unos con otros, podremos aumentar el nivel de recordación a un 50%. Si al dar una conferencia, un taller, una charla solo por el hecho de hacer que la gente comparta de alguna manera, que haya una conversación… dos semanas después podrán recordar el 50% de lo que tú has enseñado. Entonces aquí empezamos a dar forma a lo que realmente es educar, pasamos del concepto de enseñar, al concepto de aprender del que hablaré más adelante.
Si queremos apretar un poco más la tuerca y buscamos que la gente practique y entrene eso que estás enseñando, que lo puedan hacer in situ, en el mismo lugar que se da la formación, podrás incrementar el nivel de recordación a un 70%, es decir, enseñas algo y dos semanas después tenderán a recordar un 70% por el involucramiento que la gente ha tenido en su experiencia de aprendizaje y formación. Como profesor mi recomendación es, busca siempre que la gente en cada concepto, esté participando porque de esta manera se llevarán realmente el concepto y serán capaces de implementarlo en su vida personal.
¿Qué más podrías hacer para incrementar el estándar? Si quisieras lograr que la gente consiga recordar el 90% de lo que entregas en tus formaciones, debes buscar que las personas enseñen a otros lo que han aprendido, esto sí que marca la diferencia. Probablemente en una clase no puedas conseguirlo por el factor tiempo, pero te animo a que siempre invites tus alumnos a que compartan con otra persona lo que han aprendido.
Así que procura siempre dentro de tus charlas, conferencias, formaciones, que la gente se involucre lo más que pueda, para que realmente puedan llevarse el máximo valor. Puedes crear plantillas, estructuras, técnicas, herramientas… de hecho, en el curso “He dicho” que hemos creado para aprender a hablar en público y conectar con tu audiencia, puedes encontrar técnicas y herramientas de comunicación que te servirán para hacer tu trabajo mucho mejor.
Recuerda, échale un vistazo a la pirámide del aprendizaje de Edgar Dale, como profesor, docente o comunicador, debes tener esto claro. Tus formaciones no pueden ser las mismas clases aburridas donde todo el tiempo hablas y la gente no hace nada, excepto esperar que acabes para irse. Debes buscar que la gente viva el mensaje que estás compartiendo.
Por último, hay un segundo concepto que quiero compartirte y tiene que ver con un cambio de paradigma, debemos pasar de la enseñanza al aprendizaje, y me preguntarás cuál es la diferencia, pues cuando hablamos de la enseñanza, el centro de todo es el profesor, la persona que imparte, que enseña y esto estaba bien hace 10 o 15 años, pero hoy centrar la educación en el profesor es un error, porque hay profesores que dicen lo que tienen que decir y hasta ahí llega su responsabilidad, cuando en realidad la responsabilidad de un profesor no debe basarse en la idea de enseñar, sino en la idea de que la gente aprenda, de que realmente se lleve el concepto bajado a tierra.
Deberíamos pasar de llamar a los centros de enseñanza, centros de aprendizaje. Donde la gente realmente aprenda, se involucre, comente, pregunte, comparta, se inquiete, sienta ganas de seguir aprendiendo. Debemos despertar el hambre por ese aprendizaje, una labor que tiene arte, el arte de enseñar y comunicar, aplicar la pirámide de Dale, pasar de lo pasivo, a lo activo, de contar algo de manera aburrida a algo totalmente divertido y práctico. Creo que es importante tener esto claro porque es el punto de arranque para que la gente realmente sienta tu mensaje y que tu marca se pueda quedar en la mente de las personas.
Vive con pasión, vive feliz.