Cómo hackear tu cerebro: Visualización
Si esperas alcanzar tus objetivos y metas, desplegar tu potencial, o que tus sueños se hagan realidad, lo que estoy a punto de explicarte es crucial para esa misión.
No soy psicólogo, ni neurólogo, ni un maestro zen, ni hago nada que tenga que ver con la meditación o lo espiritual.
Solo intentaré trasmitir lo que me fue sucediendo durante varios años y que mucho tiempo después empecé a entender y poner en palabras.
No te preocupes. Hay ciencia e investigación involucrada en todo lo que hablo.
Visualización, sí, eso. La visualización es una habilidad extraordinariamente poderosa, es como ver señales, como en los sueños, acerca de cómo te ves vos mismo en un futuro.
Acá viene la ciencia. El cerebro humano es una maravilla de la naturaleza, con su compleja estructura y sus innumerables funciones. Una de las partes más fascinantes del cerebro es el Sistema Activador Reticular (SAR), un conjunto de neuronas con un papel crucial en nuestra percepción y atención.
¿Qué es el Sistema Activador Reticular?
El SAR es una red de neuronas que se encuentra en el tronco del encéfalo, justo en la unión entre el cerebro y la médula espinal. Se extiende desde la parte inferior del cerebro hasta el tálamo. Aunque su tamaño es relativamente pequeño en comparación con otras estructuras cerebrales, su función es esencial para nuestro funcionamiento cognitivo y comportamental.
La función principal del SAR es actuar como un filtro para la gran cantidad de información sensorial que llega al cerebro. Imagina la cantidad de estímulos que experimentamos constantemente: sonidos, olores, luces, sensaciones táctiles y una variedad de información visual. Si toda esta información llegara sin restricciones al cerebro, sería abrumador y agotador para nuestra mente.
Si tu cerebro captara todo con igual valor, tu cabeza explotaría! Así que el SAR protege a tu cerebro filtrando información y solo dejando entrar cosas con las que está de acuerdo.
Tan simple como eso. Esa es la razón científica y el mandato por el cual debes empezar a reprogramar eso.
El SAR actúa como un guardián inteligente, seleccionando y filtrando los estímulos que son más relevantes y significativos para nosotros en un momento dado. Esta selección es crucial para la percepción y la atención, ya que nos permite enfocarnos en lo que es importante y descartar lo que no lo es.
La atención es un recurso limitado en nuestro cerebro. Nuestro SAR nos ayuda a asignar nuestra atención de manera eficiente y efectiva, lo que nos permite concentrarnos en tareas importantes y ignorar distracciones.
Por ejemplo, cuando estamos concentrados en la lectura de un libro, el SAR filtra los sonidos ambientales para que podamos enfocarnos en el contenido del libro sin que otras distracciones interfieran.
El SAR también juega un papel crucial en nuestro ciclo de descanso. Durante el día, mantiene nuestro cerebro alerta y en estado de vigilia, asegurándose de que estemos atentos y alerta a nuestro entorno. Durante la noche, cuando necesitamos descansar y dormir, el SAR disminuye su actividad y permite que nuestro cerebro entre en un estado de sueño reparador.
Acá viene lo bueno. Una característica interesante del SAR es que puede ser reprogramado y modificado a lo largo del tiempo. Como mencionamos anteriormente, nuestras creencias y experiencias pasadas influyen en cómo el SAR filtra la información entrante.
Si tenemos creencias negativas sobre nosotros mismos o el mundo que nos rodea, el SAR tenderá a buscar y confirmar esas creencias, creando un ciclo vicioso que se repite constantemente.
¿Y adivina quién programó ese filtro? Vos, tu historia y las personas con las que compartiste tu vida, en tu casa, colegio, trabajo, etc.
Así que si constantemente sentís que no eres digno de amor, credibilidad, confianza, o de algo que debas llevar adelante ¿adivina qué? Tu SAR pasará el día y señalará cada pieza de evidencia que confirme esa creencia negativa que tienes, y te lo recordará de manera inconsciente todo el tiempo.
Ese mecanismo del cerebro es llamado sesgo de confirmación.
El sesgo de confirmación significa que a tu mente le encanta leer cosas con las que estás de acuerdo porque leer cosas con las que estás de acuerdo confirma tu filtro.
Cómo hacemos para empezar a reprogramar el SAR del cerebro, de manera que comience a detectar oportunidades, a encontrar evidencias de que las cosas están funcionando, y a notar coincidencias para que podamos construir un impulso a partir de allí?. Todo comienza con la visualización.
El cerebro no distingue la diferencia entre algo que realmente te sucedió, y las cosas que imaginas que te están sucediendo.
Permíteme decirlo de nuevo. Tu cerebro no distingue la diferencia entre las cosas malas que realmente te suceden, los recuerdos reales que tienes, y un recuerdo imaginado que estás creando.
Para comprender por qué nuestro cerebro no distingue entre las cosas malas que realmente nos suceden, los recuerdos reales que tenemos y un recuerdo imaginado que estamos creando, debemos tener en cuenta algunas características fundamentales del procesamiento de la memoria en el cerebro humano.
El cerebro humano es altamente plástico, lo que significa que tiene la capacidad de cambiar y adaptarse a lo largo del tiempo. Cuando experimentamos eventos o situaciones, nuestro cerebro registra esas experiencias mediante conexiones sinápticas entre las neuronas. Estas conexiones forman los recuerdos que almacenamos en nuestro cerebro.
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Cuando imaginamos algo o recordamos una experiencia pasada, ciertas áreas del cerebro se activan. Lo interesante es que algunas de estas áreas son compartidas tanto por la experiencia real como por la imaginada.
En ambos casos, se utilizan las mismas redes neuronales y circuitos para representar la experiencia o la imagen en nuestra mente.
A nivel neuronal, no hay una distinción clara entre una experiencia real y una experiencia imaginada.
Por ejemplo, si recordamos haber comido helado, las mismas áreas cerebrales que se activaron durante la experiencia real del acto de comer helado también se activarán durante la memoria de ese evento.
Las experiencias emocionales fuertes están vinculadas a respuestas fisiológicas y cambios en nuestro estado emocional. Estos recuerdos emocionales están almacenados en el cerebro junto con la información sensorial asociada. Cuando imaginamos una experiencia emocional, nuestra mente también puede activar las mismas respuestas fisiológicas y emocionales, aunque la situación sea imaginaria.
Es así como los actores apelan a este recurso y lo utilizan por ejemplo cuando deben hacer una escena donde lloran, apelando a emociones y recursos personales que los hacen llorar.
La atención y la concentración juegan un papel importante en cómo procesamos y recordamos información. Si prestamos mucha atención a un evento o situación, es más probable que se convierta en un recuerdo vívido y duradero. Del mismo modo, si nos concentramos intensamente en una visualización, nuestro cerebro puede interpretarla como una experiencia real y procesarla de manera similar a una memoria real.
Tu cerebro, cuando visualices de esta manera, lo codificará como un recuerdo real. Y eso es importante porque cuando lo codificas como un recuerdo real, cambia el filtro, el sistema de filtrado, el SAR.
Y esto es lo que sabemos según muchas investigaciones: cuanto más visualices las cosas, en primer lugar, mayor será tu confianza. Tendrás más seguridad al respecto. Y aquí está lo realmente interesante. Cuanto más hagas esto con tus metas, te despiertes todos los días y simplemente visualices lo que quieras que suceda. Lo que sugieren los estudios y lo que se ha demostrado es que simplemente visualizarte haciendo cosas, desarrolla realmente la habilidad y te ayuda a mejorar las habilidades. Igual que si realmente lo estuvieras haciendo.
Si te visualizas dando una charla TED ante cientos de espectadores, acerca de un tema que te apasione o un libro que hayas escrito, seguramente empieces a activar los mecanismos que te lleven a ese lugar en el futuro.
Y finalmente, lo otro que es realmente importante acerca de esto es que cuanto más lo hagas, lo que sabemos según las investigaciones, es que la razón por la que comienzas a creer lo que piensas es porque estás reprogramando tu cerebro
Estás cambiando la red de neuronas que actúan como un filtro. Y así, cuanto más creas en eso y comiences a pensar y visualizarte haciéndolo, más confianza tendrás y más habilidades estarás desarrollando para terminar haciéndolo en el futuro.
Y en lugar de buscar todas las razones que te inhabiliatan a hacer eso que quieres, simplemente empezarán a aparecer oportunidades porque el SAR las está dejando entrar. Así es como funciona. Por eso es tan increíblemente simple e importante.
La comprensión del SAR y su potencial para el cambio nos invita a explorar y aprovechar el increíble poder de nuestro cerebro para mejorar nuestra experiencia y bienestar en el mundo.
Aprovechar esta capacidad puede ayudarnos a desarrollar una percepción más positiva y receptiva, lo que, a su vez, nos permite construir una vida más plena y enriquecedora.