¿Cómo trabajar desde casa y no morir en el intento?
En tiempos del coronavirus o COVID-19, hemos vivido lo que probablemente se trate del mayor experimento de teletrabajo de la historia, lo cual nos enseña que muchas veces las grandes transformaciones solo surgen ante grandes adversidades.
Durante mis años de trabajo, he podido sentarme en ambos lados de la mesa: He tenido que marcar tarjeta y cobrar por -como dice la expresión popular- "hora nalga", he trabajado bajo modelos mixtos donde solo se requería mi presencia en reuniones y, por último, he trabajado 100% bajo modalidad home office. Por eso, hoy decidí redactar este artículo para compartir un poco de mi experiencia trabajando en casa y contar acerca de cómo logré dominar el arte del teletrabajo sin morir en el intento.
Las primeras semanas son clave
Para quienes han trabajado toda su vida marcando tarjeta y con el jefe respirándoles en la nuca, el teletrabajo se presenta como un grito de ¡LIBERTAD! Despertar una hora más tarde, trabajar en pijama con la música que nos gusta sin tener que lidiar con el compañero melómano que nunca falta en las empresas y que disfruta imponiendo su playlist a los demás, realizando pequeñas expediciones a la cocina durante el día, tomando una merecida siesta después de almuerzo, entre otros, son algunos de los pequeños placeres que descubrimos al comenzar.
No obstante, esto puede llevarnos a trabajar más horas de lo habitual debido al constante procrastinar. Es así que se hace imperativo el desarrollar una cultura de trabajo desde el inicio que le permita mantener su productividad e inclusive ir más allá al haberse ganado el tedioso periodo de desplazamiento hasta el lugar de trabajo.
Los diez mandamientos del teletrabajo
Después de trabajar varios años desde casa, logré establecer diez simples reglas que me permitieron disfrutar del home office y a la vez seguir siendo un miembro productivo para las empresas que me otorgaron este beneficio.
- Definir un horario: Si antes debía despertar a las 5 a.m. para llegar a tiempo a trabajar, ahora despertaba a esa hora para bañarme y vestirme, desayunar sin afán, leer las noticias, arreglar mi cuarto y estar sentado frente a mi equipo a la hora habitual. Igualmente, a las 5:30 p.m. debía dar por concluido mi día, por lo que me obligaba a completar mis pendientes sin excusas.
- Crear el ambiente adecuado: Esto aplica en especial para quienes conviven con niños o roomates ruidosos. Establezca un espacio para trabajar, en el cual debe evitar interactuar con los demás miembros de su hogar. Organice su estación de trabajo de la manera más cómoda posible y haga a los demás entender que mientras se encuentre allí, no desea ser interrumpido.
- La música siempre ayuda: Ahora que se liberó de esa canción de Maelo Ruíz que sonaba todos los días a la misma hora, construya su propia lista de reproducción para trabajar. En mi caso, me gusta sintonizar la emisora de Lo-Fi en YouTube, ya que me permite concentrar sin caer en el error de colocar mis bandas favoritas y terminar cantando a grito herido mientras envío un correo al destinatario equivocado.
- Tener donde apuntar: Un error que cometía era el no tomar nota de lo discutido en las llamadas, asumiendo que al estar en mi casa, de seguro no lo iba a olvidar. Es bueno tener un cuaderno para tomar apuntes, lo cual ayuda a mantener el orden y productividad.
- Aprovechar los canales digitales: Como muchos estarán descubriendo en estos días, esa reunión de dos horas en sala de juntas se puede convertir en una call de 40 minutos en Zoom o Microsoft Teams. No solo se optimiza el tiempo, sino que estas herramientas ofrecen cada vez más características que permiten mantener la sensación de interacción.
- Mantenerse disponible: Esto es algo que viví en muchas ocasiones. Bajo excusas como "se me cayó el internet" o "se me olvidó abrir Skype", muchas personas abusan del teletrabajo para "desaparecer" por horas y aislarse del resto del equipo, lo cual puede afectar la productividad e inclusive generar conflictos.
- Comer y mantenerse hidratado: Para evitar las excursiones a la cocina, solía mantener un tarro con frutos secos y maní en mi estación de trabajo, lo cual me mantenía satisfecho y a la vez, me ayudaba a evitar la comida chatarra. De la misma manera, tener un frasco con agua evita tener que levantarse a servirse un nuevo vaso permanentemente.
- Pausas activas: No se debe confundir este término con tomar siestas de una hora y salir al gimnasio a media mañana aprovechando que no hay nadie. La idea de las pausas activas es descansar los ojos, estirar el cuerpo, llamar a su novio/a o jugar un rato con su mascota.
- Utilizar la técnica pomodoro: Esta práctica me la enseñó uno de mis mejores amigos, quien por años ha trabajado como diseñador 3D desde su casa. La técnica pomodoro es un método de gestión del tiempo que consiste en dividir este en fragmentos de 25 minutos (denominados pomodoros), durante los cuales se trabaja intensamente hasta que se cumple el intervalo y se procede a realizar una pausa activa de máximo 5 minutos. Pueden leer más sobre esta técnica aquí.
- Hacer actividad física: Una desventaja del home office es que nos evita tener que caminar para tomar el bus o pedalear nuestra bicicleta hasta el trabajo. El sedentarismo asociado al trabajo puede afectar su salud, por lo que es bueno al finalizar la jornada o antes de iniciar, salir a caminar un rato o realizar una rutina de ejercicio, lo cual no solo mantendrá su condición, sino que influirá positivamente en su estado de ánimo.
El escenario actual es una oportunidad para descubrir nuevos modelos colaborativos y aprender a darle un mejor uso al tiempo. No es sencillo tumbar los viejos paradigmas y hacer entender a nuestros superiores que podemos trabajar sin necesidad de "tener encima al policía", pero es inevitable que cada vez más personas trabajen desde cualquier lugar del mundo, no siempre a la misma hora ni por el mismo canal.
Ingeniera Electrónica | Coordinación de Servicios | Gerencia de proyectos | Equipos Médicos | Radiología | Servicio al cliente | ITIL |
4 añosYo antes hacía homeoffice dos veces por semana y ahora que estoy todos los días, lo más importante es Definir un horario. Si no, empiezas a levantarte 10 minutos antes de que inicie la jornada, a quedarte más horas frente al cumpu. Yo me levanto a la misma hora, sigo la misma rutina y el tiempo de desplazamiento, lo utilizo para estudiar.
Con todo este tema del Corona virus, El mundo y Colombia cambiaran , siento que muchas formas de empleo son perfectas para teletrabajo pero en Colombia todavía se impone el ir a cumplir horas.