A Contar Con Lo Que Cuenta.

A Contar Con Lo Que Cuenta.
Por: Julián P. Palacio O.

Hay muchas frases que se adjudican a Albert Einstein; en una charla que escuché en estos días una que me llamo mucho la atención decía: “No todo lo que se puede contar cuenta Y no todo lo que cuenta se puede contar”.

Esta frase tiene mucho sentido; mucha gente se concentra en contar sus riquezas materiales tales como cuánto dinero tiene en el banco, que tan grandes son sus casas, cuántos vehículos tienen, cuanto dinero recibe de su profesión y otras; es cierto; estas cosas se pueden contar en unidades, incluso se pueden tocar, tienen precio; pero ¿Realmente tienen valor?

Por otro lado Hay muchas cosas que no cuestan un solo centavo, pero su valor es incalculable. Dijo Tomas Jefferson: “No son la riqueza ni el esplendor, sino la tranquilidad y el trabajo los que nos proporcionan la felicidad”.

Los buenos sentimientos no cuestan un centavo; muchas de las cosas que realmente nos toca el corazón son intangibles e incluso cada persona puede describirlas distinta forma y su medida Realmente es Subjetiva a cada persona. Pregunto ¿Alguien ha podido medir cinco lingotes de amor Cuatro tazas de tiempo de calidad con tus hijos o tres onzas de satisfacción por haber ayudado a la comunidad? Éstas últimas cosas mencionadas son las que realmente cuentan Para llenar la vida de una persona; ante los ojos de Dios todos somos iguales y a pesar de todos los avances de la ciencia, no importa cuánto dinero tengan; nadie puede estar en dos lugares a la vez ni puede desayunar dos veces el mismo día; si comes dos veces en la mañana la primera realmente es el desayuno, la segunda sería sólo una merienda.

No con esto digo que el dinero no tengan valor y tampoco quiero decir que tener bienes materiales es malo; el mensaje que quiero dar es que hay cosas que nos llenan la vida que realmente ningún dinero las puede comprar.

Ya cuando llegas a cierta edad aprendes el valor de las cosas intangibles tales como una tarde tranquila con un buen libro o disfrutar de una conversación con tu familia o sencillamente estar junto a tu pareja haciendo las cosas cotidianas de el día a día; todo está en la escala de valores que te establezcas personalmente.
Recuerdo una canción que decía “Nunca prefieras dinero a cambio de una amistad, el dinero se va y viene y un amigo no se va” Este es un ejemplo de los muchos donde no necesariamente lo que se puede contar cuenta y lo que cuenta no se puede contar.

Este inicio de semana Te invito a que analices las cosas que realmente cuentan para ti y establezcas prioridades a éstas en tu vida; verás que si llenas tu vida de cosas que no se pueden contar sentirás tu corazón más lleno que si tuvieras todas las riquezas materiales.

Que tu semana sea feliz…

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